Terapia de parejas: tasa de éxito en la mejora de la relación

Son varias las razones por las cuales las parejas van a la terapia. En la mayoría de los casos, ella es motivada pordiscusiones frecuentes, incomodidad en la convivencia, rutina, falta de sexo o infidelidad.El secreto de la terapia de parejas está en ir cuando ambos miembros sienten la misma necesidad y tienen los mismos objetivos. No vale la pena iniciar el proceso si uno quiere recuperar la relación y el otro quiere terminar.

En muchos casos, el problema es que las parejas esperan un promedio de cinco a seis años para resolver sus conflictos, cuando la relación ya está más que desgastada. La mejor época para ir a la terapia es cuando empezamos a sentir que ya no es posible entendernos con el compañero, cuando intentamos explicar algo y queda la impresión de que el otro no sabe lo que queremos decir.

La terapia será mucho más eficaz si usted es cuando los conflictos aún no están profundizados. La tasa de éxito de la terapia de pareja es de alrededor del 70%. Sin embargo, es mucho mayor si la pareja es antes: como máximo dos años después de que los primeros problemas aparezcan. Muchas de las parejas que van a la terapia afirman que, después de superar la crisis, se quedaron mejor que antes.

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Las claves para la eficacia de la terapia conyugal

La Asociación de Terapeutas de Matrimonio y Familia de los Estados Unidos indica que tres de cada cuatro parejas que van a la terapia admiten una mejora en sus relaciones.

Las personas que van a la terapia de parejas mejoran su humor y, además, dos tercios de ellas también experimentan mejoras en la salud y el desempeño en el trabajo. José Bustamante, secretario general de la Asociación Española de Especialistas en Sexología, deja claro que el primer paso a hacer, en estas terapias, es encontrar el verdadero problema. La mayoría de las parejas van a la consulta porque discute mucho, pero"detrás de las peleas hay conflictos no resueltos"

. Por lo tanto, lo primero que hay que poner en la mesa es el problema real por el cual la relación no está funcionando. Es necesario trabajar usando diálogos en lugar de monólogos. Es decir, hay que tener empatía con el otro, oír, saber lo que realmente sucede e intentar comprender al otro. Por lo tanto, el principal en la terapia es enseñar:saber cómo escuchar, colocarse en el lugar del otro

y comunicar lo que sentimos o nos molesta sin perjudicar al compañero. Cuando se trata de la relación, los dos son parte del problema y los dos son parte de la solución.Dependiendo de la pareja en cuestión y del motivo que los llevó a la consulta, se elegirán los recursos utilizados en la terapia. Pero toda terapia de parejas busca el mismo objetivo: que la pareja aprenda a resolver sus conflictos, tanto los actuales como los futuros.

La terapia de parejas puede servir para más de una función. Ella puede servir para aceptar y enfrentar que la relación acabó sin internalizar eso como una derrota, pues a veces el término es la mejor solución. También nos ayuda a conocernos individualmente y, sobre todo, a ser mejores socios en esta o en futuras relaciones. A veces las parejas tardan mucho tiempo para hacer terapia, pues ellos creen que el tiempo va a resolver los problemas. Pero en la mayoría de los casos esto no hace más que acumular tensión, frustración y resentimiento.

Compartir ¿Por qué ir a la terapia de parejas?

La terapia de las parejas es un recurso que ayuda a identificar problemas. Ella hace que los socios se profundicen en el autoconocimiento, en la propia relación, y

redescubran el valor de la otra persona.

El psicólogo de la pareja proporciona las herramientas que ayudan a resolver los conflictos

, a evitar errores en la relación, cómo aprender una nueva manera de comunicarse y, en general, a reencontrarse y recomenzar una relación más satisfactoria y feliz. Al final, la terapia de parejas busca restaurar una interacción satisfactoria y ayudar a recuperar el respeto mutuo asociado a la convivencia como pareja. De la misma forma que al comienzo de la relación, pero con las bases más fuertes y más maduras.