De vez en cuando quiero desaparecer. Y arroje la primera piedra que nunca quiso.
Quiero sumir de los compromisos aburridos, de las conversaciones hipócritas, de las personas que no quieren el bien de nadie sino su propio. Sumir del faro rojo, de la pelea que no acaba, del ruido de los vecinos, de la falta de libertad, del que aspira energía, de la no perspectiva.
Quiero sumir del arroz-con-frijol de todo día, de la rutina que empobrece, del mundo de las cosas que sofocan y obligan a la gente a convertirse en estatua, o que destilan una falta de sabor a la vida. Ciertas cosas deberían ser prohibidas: irrespetuoso, desamor, desánimo, deseanza, desinteligencia, desacuerdo entre personas. DESCULPAS para quien no necesita y no quiere oír, ni siquiera le importa.
Quiero sumir de representar lo que está en el script, de hacer todo cuadradito, de ser permisiva sin percibir, de no entender el otro, ni de hacerme entender, de tener que apresurar el paso cuando quiero ir despacio (y vice- y de sólo contemplar algo que deseo como realidad.
Quiero desaparecer de la comida rápida, de la loción de las calles, de la falta de dinero, del grito ajeno, de la mirada de reprobación y de la abstinencia de consideración.
Quiero desaparecer, pero no puedo!
Cada vez que quiero sumir, me deshago un poco. Me desintegra, me debilito. Es un precio alto a pagar ... desgaste para el alma, desavenencia para el corazón, energía pasa para nada. Sin embargo, el sentimiento de querer sumir es una excelente señal: aún no me he convertido en piedra, todavía estoy aquí. En mí, en algún lugar. Entonces ... Cuando quiero sumir, simplemente hago de todo para hacer los "masacradores del día" interesantes!Cuando estoy empezando a girar piedra, sea por circunstancias exteriores, sea por interiores, o por desilusiones, fracasos, depresión o sé lo que más, doy un salto. Sí, doy un salto en mí misma: hago algo diferente, algo que sea muy bueno, por mí. Egoísmos aparte, todos necesitamos eso.
Me desafío internamente a tener mejores pensamientos. A ignorar las situaciones y hechos sobre los que no tengo control. A resaltar las cualidades de los demás y las mías también. En el caso de que se trate de una persona que no haya visto, no se que no se quejarse, de no exigir demasiado de la vida, de revisar mis sueños, y buscar al que está tan escondido como olvidado por el peso de las obligaciones diarias. Hago una nueva oración, hito un encuentro con mi ángel protector (sí, usted también debería!), Y vuelva a conectar las puntas sueltas.
Doy un salto, doy una vuelta, y las cosas vuelven a ser mejores.
El corazón late de nuevo, la pasión por la vida adquiere un nuevo significado. No hay receta para revertir el efecto "quiero sumir", pero todos tenemos obligación de ser un poco egoístas y desaparecer, de vez en cuando, de lo que nos hace piedras: robots sin sentimientos ejecutores de tareas, individuos "tanto hace", sin voluntad.No es fácil, pero usted debe buscar su ruta para desaparecer. ¡Antes que se suma de sí mismo y gire la piedra sin siquiera percibir!