Tengo tanto que decir que hasta que me calle va a aparecer mi leyenda

A veces guardamos pensamientos y sentimientos por tanto tiempo que somos capaces de expresarlos sin necesidad de palabras. Es fácil que esto suceda, pues la comunicación verbal representa sólo una pequeña parte de nuestra comunicación emocional.

Somos capaces de expresarnos con miradas, gestos, posturas y actitudes, mucho más que dando letras a nuestros pensamientos y sentimientos. La comunicación es muy versátil y amplia, de modo que podemos decir que, aunque nos callamos, hay cientos de indicadores que harán la función de leyendas y transmitir un mensaje. Esto al principio no es mal, ya que no siempre es preferible o necesario dar palabras a lo que sentimos o pensamos para transmitirlo a los demás. En este sentido, la comunicación emocional tiene muchas posibilidades y es muy amplia.

Lo que debemos saber para afinar nuestra habilidad de comunicación

Como dijimos anteriormente, la comunicación emocional es muy amplia y precisa de varios anclajes como la expresión facial, el movimiento, los gestos, el tacto, la elección de las palabras, el tono de las palabras, la voz, las metáforas, etc.

Los intentos de conexión más complicados son aquellos que están ocultos por la rabia o la tristeza.

Hay muchas razones por las que no queremos expresar nuestros sentimientos cuando están mezclados con experiencias o emociones negativas. A veces pensamos que la mejor forma de solucionar las cosas y de dar un giro positivo a las situaciones es evidenciando lo que molesta y evitando pensar en cosas que entristecen, aburrían o asustan.

CompartirOtras veces pensamos que nuestros sentimientos son muy aterradores o incómodos para expresarlos. Incluso puede ser que usted encuentre injusto llevar a las personas que le rodean con asuntos emocionales y sentimientos que

"no tienen importancia". Además,

tal vez usted no sepa encontrar las palabras para explicar lo que está pasando o lo que usted siente , y piense que si usted hace de sus sentimientos un motivo de comunicación, perderá su intimidad y su privacidad.Sin embargo, como hablamos anteriormente, el hecho de intentar ocultar los sentimientos no implica que no sean percibidos

, principalmente porque cuando desbordan, quedan muy evidentes. No es difícil imaginar cómo detrás del sarcasmo está la hostilidad, o como una persona que desvía la mirada y sonríe puede estar apasionada por alguien, pero no quiere reconocerlo.De hecho, cuando se perciben las emociones o buscamos compartir un mensaje emocional, todos tenemos la tendencia a observar con más atención la postura, la expresión facial, el tono de la voz ... Esto es,

prestamos atención no tanto en lo que se dice, pero en cómo se dice.

Tanto la comunicación como la lectura de la información emocional hacen necesario: Prestar atención al rostro ya las expresiones faciales.Interpretar movimientos y gestos.Dar importancia al lenguaje del tacto.

Percibir lo que la voz nos revela.

  • Transformar las sensaciones en palabras.
  • Saber escuchar a los demás ya nosotros mismos.
  • La importancia de la comunicación emocional
  • En resumen,
  • comunicarse bien emocionalmente requiere algo más que pronunciar las palabras adecuadas,
  • pues es necesario enviar y recibir mensajes no verbales con precisión. Raras veces usamos solamente la expresión facial o la gestual para comunicarnos; lo hacemos de forma global. Por eso es importante sincronizar todas estas cuestiones, para entonces poder expresar lo que sentimos en el corazón y mejorar nuestro estado emocional general. Las lágrimas que no son lloradas y las palabras que no se pronuncian pueden hacernos explotar y dar lugar a mal entendidos ya un aislamiento emocional innecesario.

Cuando nos convertimos en comunicadores hábiles, nuestros vínculos mejoran, así como nuestra forma de ver la vida y de contemplar los conflictos. Esto nos ayuda a sentirnos mejor ya escuchar a nosotros mismos, lo que a pesar de exigir cierto esfuerzo, vale mucho la pena.