¡No volveré a ser tratada así!

Aunque el proverbio diga que "no haga con los demás lo que no quisiera que hicieran con usted", nunca pensamos en lo que estamos dispuestos a aceptar de los demás.

Parece un juego de palabras, pero lo que básicamente usted debe saber es que los demás pueden hacer algo que le cause sufrimiento . No siempre tendrán esa intención, por supuesto, pero eso no quiere decir que tengamos que pasar por momentos así.Las relaciones personales no son en absoluto simples.

Hablamos de las parejas, de los padres, de los compañeros de trabajo, de los amigos, de los hermanos e incluso de los desconocidos. Hoy en día es muy fácil encontrar gente "tóxica" que quita nuestras fuerzas y nuestras buenas energías. Por lo tanto, preste atención a estos consejos para evitar que los demás hagan sufrir. Además de mejorar sus relaciones, usted se sentirá mucho mejor consigo mismo.

Defienda sus derechos al no permitir:Las discusiones sin sentido:

las personas adoran discutir y pelear, eso está más que comprobado. Ni por eso tienes que aceptar y participar en discusiones y peleas, sobre todo si estas no conducen a ningún lugar.No quiera dar explicaciones todo el tiempo, recuerde que "sus amigos no lo necesitan, mucho menos sus enemigos". Las personas pueden, o no, comprender ... eso depende de ellas. No pierda su valioso tiempo (ni el tiempo de los demás) dando vueltas en asuntos sin importancia, o que pueden atraer problemas aún peores. Cuando se dé cuenta de que una conversación no llevará a ninguna parte, es mejor que, de manera inteligente, usted acabe con la situación.La negatividad:

como decíamos antes, circulan muchas personas pesimistas por el mundo, que siempre buscan el lado negativo de las cosas, no se alegran con nada, etc.

Le corresponde a usted ver el vaso medio vacío o medio lleno en cada situación. Además, ese tipo de negatividad no nos ayuda a concretar nuestros sueños, sólo obstaculiza nuestras metas. El pesimismo es contagioso y roba energía. Las comparaciones:hay algo peor en el mundo que las comparaciones? Sí! ¡Que te dejes llevar por ellas! Comparar una persona con otra no sirve para nada, pues cada persona es un mundo.

La única persona con la que usted puede compararse es con usted mismo ; el pasado del pasado, por ejemplo, pues, definitivamente, hay que luchar para alcanzar la propia superación. La intimidación:las personas que, con sus palabras, gestos o acciones, causan intimidación, no son buenas compañías. Estos individuos quieren usar su mente mental, emocional e incluso físico, para sacar lo mejor de usted y arrancar sus virtudes. Nadie tiene el derecho de hacer que usted se siente menos de lo que realmente es! Defiende lo que pertenece a ti, no dejes que los demás pisen en ti para subir posiciones, no importa cual técnica intenten utilizar.

El rencor: no sirve nada guardar o acumular ese sentimiento en nuestros corazones. La energía vital con la que usted cuenta diariamente debe ser utilizada para cosas más productivas y positivas. Recuerde que es mejor pedir disculpas, perdonar y girar la página

que guardar los sentimientos dolorosos, vivir en el pasado y ser orgulloso. El recuerdo del pasado: en realidad, el problema con el ayer es que nos prendimos a él y quedamos impedidos de avanzar. Muchas personas pueden usar sus errores del pasado para envenenar su regalo, sentirse miserable, etc. La vida es corta; no se prenda a lo que sucedió ayer, siga adelante, continúe caminando en su camino. No se renegue a sí mismo por las cosas que hizo, tampoco se arrepiente.

Aprenda a usar las experiencias pasadas como aprendizaje para no repetir estas acciones. Ser feliz:

nadie merece ser tan feliz como usted. Recuerde esta frase y tatúe su mente con ella si es necesario. No importa lo que los demás digan o piensen de usted; nadie tiene la capacidad de juzgar o hablar de lo que has hecho más allá de ti mismo. La felicidad es algo que puede ser efímero o eterno, dependiendo de nuestra actitud. Aprecie todo lo que usted tiene, no permita que la envidia o las malas vibraciones entristezcan ningún día de su vida. Nada ni nadie es tan importante para alterar su buen humor y su felicidad.