La vida se encargará de explicar las cosas que no tienen sentido ahora

Sí, tendremos que continuar, muchas veces, sin algo que nos era esencial, lejos de lugares y de personas que hacen mucha diferencia en nuestro viaje, porque todo puede cambiar en un abrir y cerrar de ojos.La vida nunca será una constante, nada permanecerá inmutable, ni allá fuera ni dentro de cada uno - y eso es bueno. A cada sacudón, a cada vuelta, estamos llevados a reflexionar ya pensar en nuevas formas de supervivencia, haciéndonos más fuertes, más gente, más humanos.

Y, en medio de tantos cambios, a tantos sacudones y desconstrucciones de certezas, nuestro deber será siempre intentar calmarnos por dentro, obligados, además del dolor y la desesperanza que esas tormentas cargan en sus nubes de decepciones . Cuando estés bien en medio de las ventanías, nada parecerá tener solución, ningún rayo de esperanza parecerá permanecer en nuestros corazones. Sin embargo, confiamos en el paso del tiempo , que entonces tardará una eternidad, pero nada como el tiempo a que se aferra, sin que paralizamos en desistencias demasiado demoradas. Porque

es en el correr de los días que las nubes se van disipando, que la neblina se va disminuyendo , desanudando nuestros ojos, descargando de nuestros corazones los dolores punzantes y trayendo, poco a poco, ligereza a nuestros pasos. Es con el tiempo que la gente vuelve a respirar sin presión, a sonreír sin disimulación, a recordar sin angustia, porque percibe que mucho de lo que se fue sólo sirvió para nuestro bien, para nuestro mejor. Y la paz que entonces sentiremos será de un placer inenarrable.Aunque no es fácil, atravesar las oscuridad y el desierto de nuestros dolores siempre nos llevará a la conciencia de que la gente pierde mucho en esa vida, pero también acumula ganancias innegables, justamente con las cosas y las personas que la vida se encarga, ella misma de sacar de nuestro camino, para que se vuelva más limpio y feliz. Esperar el paso del tiempo siempre será lo mejor que hacer cuando el hoy es insoportable y angustiante. Porque todo ha de resolverse, aunque a nuestra falta, todo hay que mejorar y todos habrá de volver a sonreír.