La sexualidad es uno de esos temas sobre los que se crean todo tipo de hipótesis y reflexiones. Todas las áreas del conocimiento hablan de ella. Algunos quieren comprenderla a partir del enigmático mundo de los neurotransmisores. Otros intentan descifrarla a partir de las complejas redes de la cultura, o simplificarla recurriendo a las determinaciones del instinto.
El hecho es que
nadie tiene la última palabra sobre el tema de la sexualidad. Hay tantas formas de disfrutar o de disfrutar de la sexualidad como seres humanos que habitan el planeta. Una de las grandes fuentes de discusión es la relación que existe entre el amor y el sexo, y viceversa.
¿Hasta qué punto puede existir amor en una pareja, sin que haya sexo? ¿Hasta qué punto puede darse una relación sexual sin envolver el amor? El amor sin sexo
Lo llaman "amor platónico", "amor cortés" o, a veces, amor de mentira. La pregunta es:
puede haber amor verdadero entre una pareja sin que ocurra el encuentro sexual? Para responder a esta pregunta, primero deberíamos apuntar a un hecho que, a veces es despreciado:
la sexualidad no es igual a la genitalidad. Esta afirmación puede parecer difícil de comprender, en especial para los hombres o mujeres "más masculinos". Ellos no entienden una sexualidad que vaya más allá de los genitales.
Pero al contrario, la mayoría de las mujeres y buena parte de los hombres saben que la sexualidad es un ámbito que alberga toda una constelación de experiencias sensoriales.
Un beso o un abrazo son una expresión de la sexualidad, no sólo una "preliminar". Las manos, la voz, las caricias, son formas de acercamiento sexual en una pareja. Pero volviendo al punto central: ¿puede existir amor sin sexo? La respuesta contundente es SIM.
En materia de sexualidad, no hay normas rígidas e inmutables.
Al contrario: ninguna norma debe ser dada como absoluta. Una investigación conducida por el profesor Anthony Bogaert, en la Universidad de Ottawa, Canadá, apuntó que algunas parejas, después de varios años de convivencia, se sentían todavía apasionadas, pero no hacían sexo. No quieren dejar a su compañero porque la relación es estable y gratificante, pero al mismo tiempo ya no siente atracción sexual.
Por otro lado, el psicoanalista Óscar Menassa apunta que raramente el amor y el deseo coinciden. Añade que, si esto ocurre, la mayoría de las veces tampoco es una experiencia de larga duración. Y, finalmente, dice que muchas personas que van a consultarlo se definen como "asexuales".
El sexo sin amor
"El sexo sin amor es una experiencia vacía. Pero como experiencia vacía es una de las mejores. " -Woody Allen -
En el mundo actual el" sexo sin amor "se ha convertido casi en un dogma. Se supone que unir la idea de amor al primer encuentro sexual es, de hecho, ridículo para la mayoría de las personas.
Impera la idea de que el sexo es placer y amor es compromiso, y por lo tanto, problemas. Las parejas dejan claro que un encuentro sexual "no significa nada" en términos afectivos. Para que no haya confusión. Y si alguno de los dos se queja por "algo más", o sentir "algo" adicional después de un encuentro sexual aparentemente pasajero, es encarado con sospechosos.
Se supone que el encuentro sexual es como una "prueba de calidad".Si es correcto, puede dar lugar a una relación un poco más larga. Si no, "buena suerte".
Entonces puede haber sexo sin amor? Aquí hay que volver a la definición de sexualidad. Si el sexo es entendido como habilidad genital, la respuesta en definitiva es SIM. Pero si al contrario, el concepto es más amplio, la respuesta tiene que ser NO. Amor, múltiples realidades
En este punto también deberíamos aclarar que
la palabra "amor" puede definir muchas realidades diferentes. El alcance de ese sentimiento depende de las características de quien lo experimenta.
Algunos hacen como si fuera agua helada y sólo permiten mojarse la punta de los dedos. Otros se sumergen, sin importar si se congelarán.
Si hablamos desde el punto de vista de la salud mental, obviamente es mucho más gratificante y restaurador el sexo con amor.
Sin embargo, esto no quiere decir que el s exo sin amor sea una experiencia negativa. Por el contrario: en ciertas circunstancias es una forma completamente legítima de aferrarse a la vida.
De todos modos, cada persona debe encontrar su propia forma de disfrutar de la sexualidad. El "normal" es sólo una estadística.
Cada uno sabe si la forma en que vive su sexualidad le hace bien o no, y eso es lo que debemos aprender a respetar.