Apego seguro: la fortaleza del vínculo sano

El desarrollo de un apego seguro protege la salud mental de los más jóvenes. No tener que tratar los diferentes problemas que pueden surgir en sus relaciones debido a la presencia de un vínculo perjudicial durante la infancia les ayudará en el futuro. Sin embargo, ¿los cuidadores están preparados para favorecer este tipo de apego?

Siempre que tratamos el apego, lo hacemos enfocando en niños. Pero hoy vamos a tratar a los cuidadores como protagonistas. Estas figuras son tan importantes que muchas veces las culpabilizamos, pero también tuvieron sus propias experiencias, y lo que pasa es que tal vez nunca se les enseñó a actuar de forma diferente.

Pensamos que lo natural es que los cuidadores eduquen a los niños como ellos fueron educados , oendo al extremo opuesto. En cualquier caso, tomando como referencia su propia experiencia y las conclusiones que se internalizaron a partir de ella."Niños con relaciones seguras: el punto de partida de una vida llena de posibilidades."

-Anónimo-
Abrazando un apego seguro que nunca fue proporcionado

Es muy difícil para un adulto ser capaz de dar a su hijo un apego seguro si él o ella tiene un apego inseguro o ansioso. Por lo tanto, es importante que los cuidadores trabajen este aspecto, ya sea por sí solos o con la ayuda de un psicólogo. Con una buena orientación y enfoque, usted puede obtener los 3 pilares fundamentales del apego seguro.

¿Cuáles son estos pilares? La sensación de constante seguridad, el deseo de proximidad y la regulación emocional. Si el cuidador no adquiere e internaliza estos pilares, es muy difícil transmitirlos. Sin querer, usted estará transmitiendo a sus hijos un apego que está lejos de ser seguro. Este proceso puede parecer muy difícil, especialmente para aquellos que nunca han sido capaces de desarrollar un apego seguro en cualquiera de sus relaciones. Por lo tanto, el profesional a quien los cuidadores buscan debe trabajar, primero, el apego seguro en la relación adulto-terapeuta.

Porque el apego seguro no es sólo entre cuidador y su hijo, sino también en otros tipos de relaciones, como entre una pareja o una amistad.

Por encima de todo, el terapeuta va a ayudar al cuidador en diferentes tareas: detectar sus emociones, identificarlas, comprenderlas y externarlas de forma adecuada. En estos casos, la represión o la anestesia emocional es algo muy común cuyo origen puede ser un trauma o una experiencia que lo marcó de una forma importante. Hacer un relato de esta experiencia para que la persona pueda integrarla en su historia de vida de una forma positiva será uno de los pilares del apego seguro. "Reprimir las sensaciones de los niños no es una buena cosa, porque podrían eventualmente acarrear problemas emocionales e incluso caer en depresión. Es mejor siempre tener un diálogo constante con ellas para expresar sus emociones con palabras, y no con lágrimas. " -Anónimo-

Una vez que el cuidador sabe cómo relacionarse con un apego seguro y dejó en el olvido el apego inseguro o ansioso que él sufrió, entonces es hora de dar el siguiente paso y relacionarse con los niños de esta nueva manera. Si usted ha internalizado bien el apego seguro, eso no será un problema.

En el caso de no ser así, tendremos que retroceder y continuar trabajando en la relación entre adulto-terapeuta.
No se trata de huir

Aunque deseamos ser capaces de dar a los niños el apego seguro que traerá tantos beneficios, es importante dar, primero, atención a nosotros mismos. Además, en muchos casos, es necesario pensar en los niños para encontrar la motivación suficiente para seguir y no dejar el camino por la mitad. No se trata de huir. No importa si los años pasaron.

Al menos cuando estamos listos, sabremos que podemos hacerlo bien porque cambiamos y mejoramos a nosotros mismos. Cuando pensamos que lo que estamos haciendo es absurdo, que no vamos a cambiar nada porque somos más viejos o que es un desperdicio de tiempo, debemos parar de pensar en nosotros mismos y pensar en ellos, en cuánto podemos ayudarles si hacemos ese cambio.

¿Queremos ver a nuestros hijos el día de mañana sufriendo de dependencia emocional y con una depresión profunda?

¿Queremos que sean incapaces de establecer relaciones estables con alguien a causa de un temor profundo de que serán abandonados? Eso es real, y sucede más veces de lo que pensamos. La falta de autoconfianza, miedos, inseguridades, dependencia ... "Si queremos un niño independiente y autoconfiante, tendremos que intentar establecer una relación segura con ella. Esto significa estar presente y disponible, comprender y responder a sus necesidades como tal. "

-Mariel Bonnefon- Curarnos no es importante sólo para nuestros hijos, sino también para nosotros mismos.

Vamos a disfrutar de un mayor equilibrio, sentirnos más felices y ser capaces de tener relaciones más saludables con los demás. Vale la pena en todos los sentidos, por eso no neguemos a nosotros mismos el derecho de madurar en este aspecto, de crecer y aprender a relacionarnos de otra forma. Con un apego seguro que no nos dieron, pero que nos recuperamos.