Estrategias para dejar de atacar la heladera por ansiedad

Comer compulsivamente es una conducta destructiva que podemos cambiar.La clave para vencer esta conducta es alimentar el cuerpo, la mente y el alma de forma sana. Las siguientes estrategias le ayudarán a evitar caer en esa práctica y sus efectos dañinos.Conozca e identifique los factores desencadenantes

Es importante separar los factores que lo llevan a comer compulsivamente antes de sentarse a comer. Trate de sentarse a comer en un momento en que usted esté con buen estado de ánimo, y trate de dejar atrás situaciones del día que han sido emocionalmente difíciles.

Usted puede conseguirlo haciendo un pequeño paseo, con una sesión de meditación o tomando un baño relajante antes de comer.Esto no quiere decir que evitar los factores desencadenantes, pero que usted debe tener un tiempo para hacer frente a ellos y solucionarlos. De lo contrario, seguirán presentes y el problema de comer compulsivamente no será eliminando. Coma lo que le gusta

Los comedores compulsivos suelen ingerir sus alimentos preferidos durante sus excesos.

Para reducir los excesos, es importante que usted no elimine su comida favorita.

Es muy importante que usted coma de forma sana y variada, mezclando los alimentos que les gusta con los alimentos saludables, y evitando a aquellos que detesta. Si los ataques de exceso se dan con alimentos muy calóricos, como el chocolate, entonces trate de elegir opciones saludables y añadir a su dieta. Por ejemplo, usted puede comer un pedazo de chocolate amargo todos los días

, en vez de tres barras de chocolate hipercalórico en un ataque. Busque el placer personal para acabar con la ansiedadComer compulsivamente se relaciona con el estrés, la tristeza o el vicio en ciertos alimentos. En otros casos, esta conducta es una forma de obtener placer. Vale recordar que la comida es una forma de satisfacer nuestros sentidos, y si no estamos satisfechos con la vida, podemos intentar llenar ese vacío con alimentos poco saludables.

Si este es su caso, procure descubrir o aumentar actividades que le dan placer. Algunas personas pueden llenar ese vacío haciendo un trabajo social, llevando al perro para pasear, aprendiendo una actividad nueva, o estando con amigos. Son muchas las opciones y, aunque pueda tardar un poco, usted conseguirá ser más sano.

Conectarse a sí mismo Es fundamental estar conectado consigo mismo.

Cuando esto no sucede, podemos enfrentar las situaciones de la vida cotidiana comiendo compulsivamente. Usted puede reducir o evitar los riesgos creando una conexión consigo mismo.

Esto puede ser hecho a través de la meditación, e implica un verdadero ejercicio de reflexión.

Es común que la vida diaria y las obligaciones nos lleven a olvidarnos de nosotros mismos y de lo que queremos. Muchos comedores compulsivos simplemente perdieron la perspectiva de su vida y buscan encontrar un punto de equilibrio en la comida. Desafortunadamente, la conexión consigo mismo no puede ser sustituida por comida o cualquier otro producto.Foto cortesía de Milkovasa