Hoy elijo cuidar de mí

Hoy elijo cuidar de mí. Hoy, en fin, elijo ser fuerte y dar voz a mis deseos, imponer murallas a lo que me hace vulnerable ya aquellos que me alejan de mi esencia. Soy mi actitud, soy el jardín que crece dentro de mí y del que debo cuidar cada día.¿Cuál fue la última vez que usted se priorizó a sí mismo? Yo sé,

no es fácil y tampoco parece lo correcto. ¿Cómo cuidar nuestras necesidades si tenemos familia, amigos, trabajo y responsabilidades a cumplir? Creer si quiere, esto es necesario. Y nadie es egoísta por "cultivar ese jardín" interior. Hoy entendí que necesito cuidar de mí, que es vital oír esa voz que me dice que merezco un tiempo para mí, que necesito resolver mis tristezas, cuidar de mis heridas, alcanzar mis sueños. Necesito cuidarme para estar bien conmigo mismo y así estar bien con el mundo. Compartir

La verdad es que es curioso cómodía tras día dejamos de cuidar de nosotros mismos. A pesar de eso, a los ojos de otros a veces seguimos siendo egoístas: porque no estamos en casa suficiente, porque no hacemos lo que esperan que hagamos, porque no decimos lo que otros esperan.

La vida a veces parece muy compleja si no se aprende a establecer las prioridades correctas, y si no decidimos lo que merece nuestro tiempo y lo que no. Ahora, una cosa que los que están a nuestro alrededor también necesitan entender es lo siguiente: Usted necesita tiempo para usted, todos necesitamos cuidar de ese mundo interior en el que encontrar refugio, fuerza y ​​seguridad. Sólo cuando alcanzamos esa felicidad interior seremos capaces de dar lo mejor de nosotros a aquellos que amamos.

Cuidar de mí: soy el jardín que crece en mi interior

Usted es un jardín de colores que a veces se apaga y marchita. Usted es fuerte, sólo que ahora se ha olvidado de su esencia, de sus pilares, porque sus raíces se nutren actualmente de prisa, miedo, ansiedad, y tal vez de compañías que le impiden ser realmente. Si usted elige cuidar, si usted decide dar ese paso hacia su interior, es el momento de liberarse de esas capas externas que le impiden crecer, respirar y brillar con alegría.

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Pero, ¿cómo hacerlo? Parece muy fácil decir, e incluso aconsejar esto de "usted necesita cuidar", porque en este caso no estamos hablando de prevenir un resfriado, de evitar un dolor de espalda o un dolor de estómago. Estamos hablando de ese vacío existencial que nos impide ser feliz, que nos impide ser nosotros mismos. Tome nota de cómo usted puede cultivar el "su jardín" interior para recuperar el equilibrio.

1. Momentos de calma, soledad y silencio consigo mismoPara cuidar, primero tienes que oír, y nadie mejor que tú mismo para escuchar lo que te falta, lo que está doliendo y lo que te está alejando esencia.

Separe momentos de calma a lo largo de su día para estar tranquilo , para oír su voz interior y, simplemente, apagar el ruido de las preocupaciones, de las voces del exterior. Usted necesita ir profundizando poco a poco. Y para eso, lo mejor es encontrar un escenario de tranquilidad y relajarse.

Acerque su respiración y, poco a poco, déjese llevar por ese camino lleno de curvas que le llevará a su corazón.

Pregúntele lo que sucede, lo que usted necesita, lo que usted desea, lo que le hace falta.

  • 2. Aprenda a ser libre de pensamiento y libre de lo que lo aleja de sí mismoSu jardín interior quiere crecer, pero hay aspectos en su vida que le impiden hacerlo. En primer lugar hay que ver si hay aspectos de nosotros mismos que nos colocan cercas, murallas o rejas:
  • Evite preocuparse por cosas que no tienen importancia.
  • Deje de dar valor a las personas que roban el brillo de su vida,
  • no escuchen las críticas porque no lo definen, no da fuerza a quien le perjudica o usted será su víctima: libérese.Usted es la persona que debe definir el rumbo de su vida, y por eso debe asumir el timón en su día a día.

Aprenda a luchar por lo que usted desea y dirija sus esfuerzos en este sentido:

para una felicidad simple, pura y sin artificios, donde están las personas que usted ama de verdad. Vive con fuerza, locura y libertad, camina sintiendo su esencia y libérate de las cadenas de aquellos que sostienen con abismos egoístas y vacíos emocionales.

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  • 3. Enriquece tu vida buscando lo que te define, que te hace sentir vivo. La vida es un aprendizaje, es experimentar y deleitarse con el conocimiento compartido de la humanidad y de la naturaleza. Encuentra tu pasión y haz de ella su camino, permita que aquello que te ilumina por dentro dirija tu esperanza diaria y que sea una forma de sentirse útil, capaz. No dude en fomentar sus relaciones sociales;
  • las personas son una gran fuente de conocimiento. Cultiva tu jardín interior aprendiendo cosas nuevas cada día, enriqueciendo para crecer, para ser más libre de mente y alma. Pocas cosas en la vida son tan maravillosas como ver el mundo con la curiosidad de un niño, y disfrutar de la vida con la pasión de un adulto que se siente libre, que se cuida porque sabe que su felicidad interior es la fuerza para dar bien -estar a aquellos que lo rodean. Compartir