¿Por qué sus hijos no aceptan un 'no' como respuesta

Los hijos nos ponen a prueba a toda hora.Tratan constantemente de desafiar los límites que imponemos a ellos. Un "no" como respuesta no es suficiente para ellos, que siempre quieren más de todo, no importa lo que sea. Preguntar las reglas y enfrentarnos como padres o educadores es para ellos un desafío muy emocionante.

Sin duda, una de las tareas más agotadoras de ser padre o madre es la lucha que enfrentamos para mantener los límites bien establecidos, hacer que ellos cumplan las reglas y mantengan la disciplina. Lo peor de todo es que, cuanto más decimos "no", más ellos muestran interés en conseguir lo que quieren, intentando hacer que cedamos por el cansancio. "El perro dijo al hueso: 'Si usted es duro, tengo tiempo.'"- Anónimo - ¿Por qué los niños lo hacen?

Los niños se comportan así porque necesitan experimentar, explorar caminos para averiguar cuál de ellos funciona para conseguir lo que quieren. En el fondo, deberíamos alegrarnos por que se comporten así, ya que esa es una forma de demostrar inconformismo ante lo que no les gusta o lo que no lo consideran adecuado.
Por supuesto que no tienen edad ni criterio para saber lo que es o lo que no es adecuado, pero al menos muestran personalidad y determinación en lugar de sumisión.

Pero este comportamiento también es una forma de respuesta que usan ante la debilidad de los padres. Si los niños detectan alguna inconsistencia en las reglas o falta de coherencia entre las diferentes personas con las que conviven o que la educan, ellas van a intentar tomar partido. De la misma forma que los abogados hacen en los tribunales, sólo que los niños lo hacen por pura intuición.

El secreto para mantener las cosas en su lugar es la consistencia y la coherencia, es decir, la persona debe hacer lo que dijo que iba a hacer, sin más.Con coherencia, las pruebas de límite se reducen al mínimo, ya que los niños aprenden que las normas establecidas mediante las palabras tienen una relación paralela con la realidad.

Refuerzo de la razón variable para nuestros hijos

Los niños cuyos padres no son firmes tienden a mantener los límites y las reglas a prueba, con la esperanza de que los padres desistan de ello.

Cuando los niños perciben que las reglas sólo se cumplen a veces y que el hecho de ser cumplidas o no es una cuestión abierta, van a intentar explotar la suerte, insistiendo, golpeando la misma tecla, hasta que la regla sea quebrada.Los psicólogos llaman este principio de refuerzo por razón variable.

Imagine un ratón empujando la palanca a través de la cual gana comida. Si la palanca que ofrece comida funciona a intervalos fijos, es decir, previsibles, el ratón sabrá exactamente cuándo puede conseguir comida. El ratón no va a esperar por la comida en otros momentos.

Pero si la palanca da comida en intervalos imprevisibles (variables), el ratón no sabrá cuándo conseguir comida, entonces seguirá empujando con la esperanza de que la comida venga.Sucede algo parecido entre los niños y los límites.

Cuando la respuesta de los padres es una situación inconsistente y un poco imprevisible, esta incoherencia motiva a los niños a continuar tratando de conseguir lo que quieren, hasta que consigan la respuesta que buscan.El primer paso es superar la incoherencia paterna. La inconsistencia de los padres suele ocurrir por diversas razones.

Uno de los motivos puede deberse a la falta de atención y comprensión de su papel como educadores.

Es decir, los padres no perciben la incoherencia en su propio comportamiento. Esto hace que la situación se vuelva cada vez más complicada, ya que los padres son incapaces de comprender su responsabilidad y su capacidad de influencia ante la situación. Otro motivo que explica la incoherencia paterna es la pereza o la incomodidad que surge como consecuencia. Esto hace que las consecuencias sean variadas en función de los intereses de los padres y que las segundas u terceras oportunidades aparezcan. Los hijos captan rápidamente este nuevo estándar y juegan con eso, incluso enfrentando a los padres o responsables, lo que lleva a una situación insostenible.

Otra razón que explica la incoherencia paterna es que los padres no logran seguir adelante con las consecuencias porque eso está fuera de su control, sea porque la persona encargada de cuidar de sus hijos no intenta cumplir la disciplina exigida o porque surge una consecuencia inviable .

Consideraciones finalesSi, como padre o madre, usted quiere que su hijo acepte un no como respuesta cuando usted diga "no" o diga "llega",lo que usted debe hacer es poner normas claras, conocidas por todos, y definir muy bien las consecuencias.

Siempre las mismas y proporcionadas: no utilice las primeras que vengan a su cabeza, dedique un tiempo para pensar en las opciones. Finalmente, usted debe seguir constantemente lo que dijo que haría.Si el problema de la incoherencia surge porque no todas las personas responsables de su hijo son realmente responsables, no se desespere. Deje claro a sus hijos que algo va a suceder si no cumplen las reglas, usted está allí en el momento o no. Asuma que tal vez usted también tenga que educar a estos adultos irresponsables.

Si usted asume su papel de educador, dona a quien donar, sus hijos lo verán como una referencia y usted mantendrá su autoridad.

Si alguien encuentra mal - muchos -, no es problema suyo. Su problema es su hijo. Su obligación es educarle, no hacer sus voluntades, no dejar que él lo desaten y no validar sus actitudes equivocadas e incoherentes.