Entre los factores psicológicos que nos impiden tener una respuesta sexual adecuada, encontramos la ansiedad de ejecución. Así, en términos coloquiales, podemos decir que la ansiedad de ejecución surge cuando nos preocupamos demasiado con nuestro desempeño personal en el contexto de una relación sexual.
La ansiedad de ejecución es un tipo de ansiedad que aparece y se mantiene por las expectativas en relación a una situación particular. Por ejemplo, imagine un estudiante que va a hacer una prueba oral. Él tiene grandes expectativas de éxito, quiere sorprender a los profesores y obtener el mejor resultado posible. Para ello, tendrá que ser perfecto. Sin embargo, la presión sobre su rendimiento es tanta que acaba fracasando. Sin esa presión él habría alcanzado la nota que estaba buscando. En el campo de las relaciones sexuales, el miedo o la ansiedad de ejecución puede impedir a la persona disfrutar de una relación sexual.
Por otro lado, las consecuencias secundarias pueden ser variadas, desde la disminución de la autoestima hasta la ruptura de los canales de comunicación con su pareja. Como consecuencia de todo esto, la disfunción sexual aparecerá. ¿Qué entendemos por ansiedad? La ansiedad es una experiencia universal que forma parte de la condición humana.
Constituye un sistema de alarma ante una amenaza. Es una emoción acompañada de cambios psicosomáticos y comportamentales junto con un sentimiento de incomodidad. En principio, la ansiedad puede ofrecer una serie de ventajas adaptativas:
El aumento de la activación permite enfocar la atención sobre un posible peligro. Prepara el organismo para esa confrontación: lucha o fuga.
- Permite la memorización de acontecimientos o estímulos que causaron miedo.
- Permite la formación de respuestas condicionadas al miedo.
- Permite que ciertos esquemas cognitivos sean modificados.
- Los eventos de la vida diaria pueden causar una ansiedad que no siempre es patológica.
- Por ejemplo, una cierta ansiedad antes de una prueba puede ser hasta beneficiosa. Sin embargo, cuando la intensidad o la duración son excesivas, enfrentamos una ansiedad patológica.
Una forma de ansiedad patológica es la ansiedad de ejecución. Es patológica porque su intensidad nos impide desarrollar correctamente lo que nos proponemos. Así, si la ansiedad nos impide tener una relación sexual satisfactoria, estaremos hablando sobre la ansiedad de ejecución en las relaciones sexuales. La respuesta sexual y sus disfunciones
Aunque la respuesta sexual tiene requisitos biológicos básicos, se vive en un contexto interpersonal, intrapersonal y cultural.
La función sexual implica una interacción compleja entre factores biológicos, socioculturales y psicológicos.
En muchos contextos clínicos, el origen del problema sexual no se conoce con precisión. Sin embargo, el diagnóstico de disfunción sexual requiere la exclusión de problemas que pueden ser explicados por un trastorno mental no sexual, por los efectos de una sustancia, por una condición médica o por un conflicto significativo en la relación, violencia de pareja u otros factores que causan estrés. Las disfunciones sexuales incluyen la eyaculación retardada, la disfunción eréctil, el trastorno orgásmico femenino, el trastorno de interés / excitación sexual femenina, el vaginismo, el trastorno del deseo sexual hipoactivo en el hombre y la eyaculación precoz. Las disfunciones sexuales son un grupo de disturbios heterogéneos. Se caracterizan por un cambio clínicamente significativo de la capacidad de la persona para responder sexualmente o experimentar placer sexual.
La ansiedad de ejecución en las disfunciones sexuales El ejemplo más claro de ansiedad de rendimiento se encuentra, ciertamente, en la disfunción eréctil . Esta ansiedad es desencadenada por lo que Abraham y Porto llamaron factores generadores de ansiedad. Estos factores son los siguientes:
Miedo al fracaso.
Un sentimiento de miedo de no corresponder adecuadamente a lo que la alianza espera.
La obligación de buenos resultados. Es la necesidad de una respuesta eréctil muy consistente, duradera y de recuperación rápida.
Altruismo excesivo.
Esto significa estar más atento a la satisfacción del compañero, perdiendo la concentración en su propio erotismo.Auto-observación.
- Consiste en preocuparse por el propio pene y observarse para ver cómo reacciona.Cuando un hombre experimenta la disfunción eréctil o la erección, las primeras dificultades para tener relaciones sexuales satisfactorias probablemente aparecen de repente. A partir de ahí, el hombre comienza a preocuparse por el asunto.
- Las preocupaciones pueden referirse a aspectos como: "¿Y si no puedo mantener mi pene erecto?", "¿Y si no puedo satisfacer a mi pareja?", "¿Qué sucederá si no puedo hacer la penetración? "
- ...Estas preocupaciones generan las hormonas del estrés, como por ejemplo el cortisol.
- La preocupación está en la base de la ansiedad de ejecuciónLas hormonas del estrés generadas por la preocupación son incompatibles con las hormonas que provocan la respuesta sexual
. De esta forma, ocurre un círculo vicioso. El hombre siente cada vez más presión en las relaciones sexuales para obtener una erección y satisfacer a la mujer. En ese sentido, está condenado al fracaso.
La anticipación del próximo encuentro sexual despierta la misma ansiedad, junto con el recuerdo de los fracasos anteriores. Muchas veces, esta anticipación anula el deseo y lleva a la persona a evitar las actividades sexuales, incluyendo cualquier demostración física de cariño que pueda constituir el inicio de un encuentro sexual. La otra persona puede sentirse menos amada, poco atractiva, frustrada ... No entiende que evitar la situación temida ayuda a la persona a evitar la humillación de otro fracaso, a sentirse con más control y menos culpable por estar "fallando". Sin embargo, esta no es la solución.
La ansiedad de ejecución en disfunciones sexuales puede ser tratada de forma satisfactoria.
La psicología clínica propone técnicas eficaces para combatirla. Si este es su caso, usted puede buscar un psicólogo especializado. Esto le ayudará a resolver su problema, mejorar su relación sexual y de pareja.