Según Arthur Schopenhauer, "la suerte baraja las cartas, y jugamos". Puede que usted haya recibido una mala mano, pero sin duda usted podrá vencer el próximo partido. Esto sucede porque la actitud, la sabiduría, la experiencia y la paciencia pueden ser determinantes.
Ser afortunado no es ganar en la lotería o estar lleno de amuletos en el cuerpo o en casa, va más allá de eso. La única cosa que puede ayudarnos a "tener buena suerte" no es un trébol de cuatro hojas, sino ir en busca de nuestras metas y objetivos. El filósofo Francis Bacon decía: "El molde de la fortuna de un hombre está en sus propias manos". No se puede creer que los problemas se van a resolver solos, y tampoco podemos cerrar los ojos y ciegamente creemos que la suerte va a solucionar todo.
El viento siempre puede soplar a su favor, por más que usted piense al revés. La suerte es como si fuera una semilla. Dependiendo del lugar donde la cultivamos, tendremos diferentes frutos. Si la cultivamos en suelo fértil y la regamos periódicamente, las posibilidades de su germinación son mayores, y así podremos cosecharlas. Si, por el contrario, la dejamos en una tierra arenosa, sin agua y sin cuidado, será casi imposible que algo bueno crezca allí. Seis secretos para tener suerte
1 - Prepárese:
los afortunados son aquellas personas que trabajan para alcanzar sus sueños, no son personas que "fueron tocadas por una varita mágica". Haga lo que sea necesario para cumplir sus objetivos, cree las circunstancias adecuadas para alcanzarlos, cree metas intermedias, etc. Si usted está buscando un empleo, por ejemplo, no será "la suerte" que va a decidir su contratación, sino la forma de conseguir una buena entrevista en una empresa interesante. Si estás preparado, puedes conseguir el trabajo que siempre has soñado. 2 - Cambia de estrategia:
a veces puede ser necesario cambiar la forma en que vemos o actuamos para poder "tener suerte".Seguro que usted conoce a muchas personas que, por más que intentan, no pueden cambiar su destino. No se trata de buena o mala suerte, sino de saber actuar de forma adecuada o en el momento exacto para cambiar de rumbo o de dirección. En lugar de acumular fracasos, inove. 3 - Deje que sea ayudado:
la soledad no es buena para los que están buscando "la suerte". Según un dicho popular, ella también es una pésima consejera. Tener alianzas con otras personas, pedir ayuda, permitir que colaboren con sus proyectos o al menos que den sus opiniones, también es una manera de tener suerte. Cuanto más manos estén dispuestas a ayudarle, más fácil será para que obtenga el éxito en sus proyectos. 4 - Trace una ruta:
cuando usted está conduciendo en la carretera en busca de la buena suerte, es necesario que sepa cuál es la dirección exacta para llegar al destino. Séneca dijo: "No hay viento favorable a quien no sabe dónde desea ir". Planee un camino o una ruta y siga,así será más fácil "llegar a un puerto amigo". 5 - Sea perseverante y va a conseguir: otro dicho popular que se adapta perfectamente a la búsqueda de la suerte (si, en ese punto ya podemos afirmar que la suerte es algo que se busca y no que cae del cielo). Los proyectos que realmente valen son largos, cuestan caro y son difíciles.
Si usted es perseverante, esforzado y no ahorra en el tiempo, podrá transformar todos sus sueños en realidad. Elabore un plan y siga al pie de la letra, dé lo mejor de sí para alcanzar su meta, cueste lo que cueste. 6 - Reconozca lo que es bueno: muchas veces nos enfocamos en lo que nos gustaría tener y no en lo que ya tenemos. Si crees que tienes mala suerte es porque no has echado un vistazo a tu alrededor.
Su familia, su novio, su empleo, su casa tal vez no hayan salido de un cuento de hadas o de un sueño, pero si usted cuenta con todo eso, ya puede considerarse una persona de suerte.