Sería bueno ir a la farmacia y comprar algunos comprimidos de resiliencia. Uno por día sería suficiente para inyectar la energía necesaria para aprender a reaccionar ante la adversidad, o simplemente al estrés diario que el trabajo y hasta la vida, siempre repleta de cosas buenas y malas, nos traen.
La resiliencia ha adquirido importancia en los últimos años dentro de las ciencias sociales y en el área de la salud mental. La realidad es que este es un concepto acuñado por la física, y nos habla sobre el poder que algunos materiales tienen que recuperar su estado original contra ciertas circunstancias que pueden deformarlos e incluso fragmentarlos. ¿Cómo aplicamos esta propiedad en el ámbito humano y psicológico? ¿Podemos volver a nuestro estado original a pesar de las pérdidas, traiciones, o fracasos?
La verdad es que no. Nunca volveremos a ese estado, a esa época en que éramos inmunes a todo y aún no habíamos conocido los riesgos de la vida. Sin embargo, la resiliencia puede enseñarnos no sólo a aprender de estos efectos, sino a enfrentarlos y superar el rechazo, la humillación o cualquier situación negativa, que, ciertamente, todos hemos tenido que asumir.
1. Todos pueden vencer la adversidad Ciertamente usted conoce algún caso. Niños que crecieron en contextos familiares desfavorecidos o en familias con graves problemas personales (malos tratos, alcoholismo, pobreza).
No todos los que tuvieron que pasar por estas situaciones en la infancia
alcanzaron la madurez mostrando los efectos psicológicos de un pasado tan oscuro.
Hay quienes han logrado superar la adversidad para desarrollar no sólo el sentido de la supervivencia, sino de la esperanza, la adaptabilidad y la autoestima.¿Cómo es posible? Tenemos que aprender a separar los contextos de nuestra propia realidad interior. ¿Usted merece un futuro de desesperación y sufrimiento? ¿No vale tanto o más que cualquiera? ¿Por qué no aprender a ser feliz dejando de lado el pasado? Después de vivir en la oscuridad, ya conocemos las sombras para poder encontrar fuerzas y enfrentarlas.2. Aprenda a desarrollar su competencia emocionalLas personas que pudieron desarrollar la resiliencia de forma adecuada son emocionalmente competentes, pero ¿qué significa? Significa que ellas tienen autonomía para decidir lo que es bueno y mal para ellas. Significa que tienen buena autoestima y saben lo que quieren.
Las personas resilientes saben lo que es pasar por un evento traumático o complejo, donde hay que ser fuerte para sobrevivir
, para permitir que los días pasen y no temer el futuro. Se sabe que todos tenemos capacidad suficiente para enfrentar las adversidades y superarlas.
¿Por qué no se merece? 3. El camino hacia la resiliencia
¿Cómo podemos obtener acceso a ese camino para salir fortalecidos? Primero tenemos que tener clara una cosa.
La resiliencia es ordinaria, no extraordinaria.Esto es, todos podemos desarrollarla. El ser resiliente no significa ser "inmune" al dolor, a las angustias oa las preocupaciones, por el contrario. El dolor emocional debe ser asumido y comprendido.Tenemos que ser realistas sobre lo que nos sucede, teniendo una visión positiva de nosotros mismos. Saber manejar las emociones, aceptando el dolor, pero definiendo metas y objetivos para el día siguiente.