Camina curando nuestros dolores y nos ayuda a abrir la mente, a ventilar nuestras ideas ya salir de la rutina del día a día. Es una actitud simple, pero liberadora en el ámbito personal, tanto a nivel físico y psicológico. El hecho es que caminar o hacer otro tipo de ejercicio físico diariamente ayuda a quedarse más activo ya recuperar una vida productiva y emocionalmente realizadora. Así, por ejemplo, caminar puede ayudar a dejar de perpetuar un estado de ánimo desanimado o depresivo, que limita las opciones de estímulos de la persona que se siente mal.
En este sentido, gracias a la estabilidad ya la perseverancia de un comportamiento tan sano como caminar
, la persona se libra de los pensamientos negativos y de las emociones dolorosasa las cuales, al final, se ha sometido por las situaciones de estrés constante que normalmente vivimos . La mejor receta para sentirse mejor: dar un paseo diario
Tener como costumbre caminar todos los días durante al menos una hora es uno de los mejores "remedios" tanto para el cerebro que está en estado depresivo o ansioso, como para el cuerpo que se siente quejido, inestable y dolorido.
Así, de preferencia y en la medida de nuestras posibilidades, los paseos deben ser por entornos naturales, pues la paz y el contacto con la naturaleza nos ayudarán a desconectar del alboroto ya establecer un contacto tranquilo con nuestras emociones y pensamientos. Nuestras mentes y nuestros cuerpos sufren con la rutina y el estrés al que nos sometemos diariamente.
Como consecuencia de la inactividad, el cerebro se vuelve lento, pesado, perezoso, depresivo y ansioso.
Así, empezamos a percibir que no tenemos buena memoria, que no tenemos ganas de hacer nada que salga de lo cotidiano, que no hay actividades suficientemente interesantes o gratificantes que nos hagan salir del sofá de la sala, etc. Caminar representa la liberación personal y mental, la "aceleración equilibrada" de nuestras mentes y el contacto con nuevos estímulos que puedan resultar gratificantes.
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Caminar es una buena forma de ventilar la menteFuimos proyectados para moverse, por lo que la mente y el cuerpo agradecen tanto por el movimiento.
A través de un ejercicio tan simple conseguimos ventilar la mente y aclarar nuestras ideas, haciendo el cerebro más creativo y eficaz.
A través de los paseos nos damos la posibilidad de relativizar nuestros problemas y conectarnos con nuestro yo más profundo, aquel a quien, en el torbellino que nos envuelve en el día a día, no damos atención. Como es evidente, estos beneficios no se logran de un día para el otro, siendo necesario realizar esta actividad durante al menos una semana. De esta forma conseguiremos:
Despreocupar nuestro cerebro y restablecer su neuroquímica sana y equilibrada.
Esto ayuda a reactivar con eficacia el lóbulo frontal y el sistema límbico, comandado por nuestros pensamientos y emociones.
- Como consecuencia de esta reestructuración funcional, el estrés va desapareciendo y nos quedamos más relajados, seguros y confiados con lo que nos rodea.
- Nos liberamos y nos expandimos socialmente , pues gracias a esta simple actitud abrimos nuestro campo de movimiento y de relación personal. Es decir, dejamos de sentirnos atrapados o enclaustrados. Retomamos el contacto con nuestra naturaleza
- cada día, reservando la dedicación al cuidado de sí mismo ya la satisfacción de las necesidades personales.Quien ya ha experimentado en la propia piel no tendrá duda:
- caminar ayuda a sentirse mejor ya ventilar la mente , pues nos reserva un tiempo diario para disfrutar y conectarse con nuevos estímulos gratificantes.
Por eso,la mejor receta para levantar el ánimo es caminar.Si usted todavía no ha experimentado, hágalo; y si usted ya conoce los beneficios, nunca deje de practicar esta enriquecedora actividad física.