8 Señales que muestran su crecimiento emocional

El hecho de añadir más velas a la torta de cumpleaños no es indicador de que nuestra madurez ha aumentado. También no significa haber crecido emocionalmente o de haber desarrollado habilidades con aquellas cosas que nos hacen perder el equilibrio. "La seriedad no es signo de madurez. La madurez es saber reírse de la vida, pero tomarla en serio cuando es necesario "

CompartirLa mayoría de las personas tienen una tendencia a castigarse por los errores cometidos antes de felicitarse por el éxito alcanzado, siendo, de esta forma, muy exigentes consigo (más que con cualquier otra persona) y centrándose únicamente en los fracasos, y no en los aciertos.

Esto puede ocurrir debido a la sociedad en la que estamos insertos o en la época en que vivimos.

Solíamos desmotivarnos rápidamente cuando algo no sucede de la forma en que esperábamos. No valoramos lo que hacemos bien. No tenemos suficiente paciencia para seguir adelante y no prestamos atención a los pequeños cambios.

De vez en cuando,

vale la pena parar toda la carrera del día a día y hacer una lista de todo lo que conseguimos realizar. Este no es un ejercicio de arrogancia, sino una forma de darnos cuenta de nuestro crecimiento emocional. Las señales del crecimiento emocional

Dejar ir lo que le hace mal:

Es muy importante aprender a quitar de nuestra vida lo que nos hace mal, lo que no nos ayuda a seguir o nos ata al pasado. Esta habilidad es fundamental para tener éxito en cualquier cosa que emprender. Reconocer a las personas tóxicas ya es un gran paso. Aprender con los errores: ¿Quién dijo que errar debe convertirse en un castigo para toda la eternidad? Podemos sacar muchas enseñanzas de los errores. De nada vale buscar siempre el perfeccionismo obsesivo.Es importante errar y saber qué cosas no repetir. Esto cambia completamente nuestras perspectivas y nos ayuda a emprender nuevos proyectos; esta vez, más ambiciosos y con mayor probabilidad de éxito. ¿Por qué? Porque la experiencia nos guía.

CompartirEvitar las quejas:

Este es, sin duda, una de las principales señales de haber crecido emocionalmente. Las personas que pasan todo el día se quejan y criticando sólo aumentan la negatividad y el pesimismo a su alrededor. Aprender a "no llorar por la leche derramada" hace a una persona más madura. Si usted actúa y resuelve los problemas en lugar de quedarse quejándose, eso significa que está creciendo.Celebrar las conquistas ajenas:

Aplaudir y sentirse feliz verdaderamente cuando otra persona conquista algo es sinónimo de madurez. Esto significa que usted no la envidia, que entiende que se ha esforzado mucho y que usted es capaz de reconocer el trabajo de los demás. Tener relaciones menos conflictivas: No significa que todo será "amor y paz", pero que usted no quedará todo el tiempo peleando y discutiendo. Ya pasó esta fase de querer llevar el mundo adelante a cualquier costo. Usted aprendió a ponerse en el lugar del otro, tratando de llegar a un acuerdo antes de confrontar, entendió que las peleas son una pérdida de tiempo y que lo mejor es buscar una solución en conjunto. Además, usted se dio cuenta de que es mejor tener tranquilidad que razón. No tener miedo de pedir ayuda: Hace algún tiempo (cuando usted todavía no había crecido emocionalmente), consideraba que solicitar ayuda era una forma de demostrar debilidad y que por lo tanto usted no debería hacerlo. Sin embargo, ahora usted entendió que éste es una señal de confianza en el otro, por ejemplo.No es posible hacer todo solo siempre; es bueno ser humilde y reconocer cuando no sabemos algo o necesitamos ayuda.Saber lo que usted desea:

La incertidumbre del futuro ya no es una regla, sino la excepción. Siéntete más consciente de lo que quieres alcanzar en tu vida y en qué momento. Al estar más seguro de sí mismo, usted establece las reglas de su destino y puede predecir qué esperar mañana. No te importa lo que otros dicen:

Algunas veces te has golpeado con lo que se ha dicho, pero ahora estás en otra fase. Sólo interesan las opiniones de aquellos que quieren ayudarle o desean verlo bien. Es decir, las "críticas constructivas" de los que lo rodean (porque, además, usted ya se alejó de las personas tóxicas).