¿Qué relación existe entre la educación y las ideas políticas?

Un tema recurrente en los debates sobre la educación política de las personas es el efecto que las escuelas y otras instituciones educativas tienen a la hora de influir en las opiniones políticas de los alumnos. Uno de los objetivos teóricos de la educación es crear individuos activos políticamente. Ahora, hasta qué punto la educación y las ideas políticas están relacionadas? ¿Cuál es la naturaleza de esa relación?

A lo largo de este artículo, vamos a tratar los efectos que la educación formal tiene en la vida política. Obviamente, la educación implica mucho más que lo que sucede en la vida puramente académica, pero ese es un gran factor a tener en cuenta. En ese sentido, los efectos políticos que vamos a observar en este artículo son: la implicación política, la actitud política y el conocimiento político. A continuación hablaremos de los efectos de la educación a través de tres tipos de variables: (a) variables externas que afectan la educación y las ideas políticas, (b) variables directas, (c) variables indirectas.

Variables externas que afectan la educación y las ideas políticas

Cuando hablamos de variables moduladoras, externas o terceras variables en el contexto de la estadística, nos referimos al factor externo que causa una correlación entre dos variables.

Por ejemplo, el número de hospitales y arrestos de una ciudad guardan una correlación: aquellas ciudades que tienen más hospitales generalmente tienen también más prisiones. Esto se debe a una tercera variable que afecta a las otras dos: el tamaño de la población. En el caso de hablar sobre la educación y las ideas políticas, hay factores externos que afectan a estas dos variables explicando parte de su correlación. Dentro de estos factores, los más relevantes son: las capacidades cognitivas, la personalidad y el nivel socioeconómico.

En el caso de las capacidades cognitivas la relación es bastante obvia. Una capacidad verbal superior, un buen raciocinio abstracto, una buena memoria, junto con otras capacidades, ayudan a progresar tanto en la educación formal y en relación con la capacidad política

. Al contrario, lo que también puede suceder es que las capacidades cognitivas de raciocinio sean reprimidas, de modo que se desarrolla un contexto en el que no hay el cultivo de las ideas políticas. En relación a la personalidad, es importante entender que ciertas actitudes pueden afectar la educación y las ideas políticas. Por ejemplo, todas aquellas predisposiciones para aprender, para la curiosidad de investigar, andan junto con un mayor éxito académico, y también con mayores nociones de política.Otro aspecto clave es el nivel socioeconómico, ya que la vida política y la educación formal superior son dominios socialmente restringidos.

Muchas personas no pueden estudiar académicamente por no tener los recursos necesarios para ello. De la misma forma, aquellas personas con un bajo status económico no suelen dedicar tiempo para la vida política. Sea porque fueron expulsados ​​de la misma directamente o porque dedican la mayor parte de su tiempo a intentar sobrevivir estando insertados en un contexto de condiciones de trabajo precarias.

Variables directas de la educación que afectan a las ideas políticasDentro de la gran variabilidad que existe en la educación formal, percibimos que

dependiendo del modo en que se organiza la educación, se producen diferencias en la capacidad política.

Esto nos muestra que ambas variables tienen una relación directa entre ellas. ¿Cuáles aspectos concretos afectan esa relación? Los más relevantes son: los contenidos del currículo escolar y los valores educativos. Los contenidos del currículo escolar pueden tener una influencia directa en los conocimientos políticos que los alumnos adquieren. Por razones obvias, la instrucción directa de conceptos políticos genera futuros ciudadanos con una mayor capacidad de análisis del contexto político. Además, la naturaleza de estos contenidos afecta en gran medida a la postura política del alumno. Es decir, una educación politizada que destaca las ventajas del liberalismo probablemente generará personas más de acuerdo con esa corriente.

Una educación con valores base como el diálogo, el debate y una visión crítica de los hechos es esencial para formar alumnos con una actitud política. Aquellas instituciones que se basan en estos principios encuentran correlaciones positivas entre los alumnos y el interés político. Si los individuos reciben una educación restringida y jerarquizada, acaban acostumbrados a los dogmas y con la autoridad que van contra una actitud crítica en el análisis político.

Variables indirectas entre la educación y las ideas políticas Es probable que el nivel de formación que una determinada persona alcance termine condicionando diversos aspectos de su vida: no suele ser igual comenzar una carrera de trabajo después de terminar la educación obligatoria y hacer lo mismo después de haber terminado el doctorado. Muchos de estos cambios que son causados ​​por la educación van a dirigir también la actitud política de las personas. Por otro lado, las variables indirectas más importantes entre educación e ideas políticas son: la posición social, el autoconcepto y la naturaleza de las oportunidades encontradas. De algún modo, cuando la sociedad observa a los individuos, atribuye valor a las posiciones de cada uno. Esto ocurre porque la sociedad tiene un gran número de estereotipos que provocan una categorización con diferente valorización para aquellos que tienen un nivel académico alto o bajo. Esta posición social relativa va a hacer que cuanto mayor sea el nivel educativo, mayor sea su influencia política. En ese sentido, todo lo que aprendemos a lo largo de nuestra vida académica influye en la forma en que nos vemos, como nos miramos. Este autoconcepto va a crear una pre-disposición para que nos categorizamos dentro del grupo de personas que tienen un nivel educativo simular al nuestro. Así, aquellos grupos en los que los sujetos tienen un mayor éxito académico son más aceptados socialmente dentro de la vida política.

Por último,

un nivel educativo mayor también suele ofrecer un mayor número de oportunidades. De este modo, en función de las oportunidades individuales de cada uno, habrá más o menos posibilidades de realizar actividades de carácter político. La relación existente entre la educación y las ideas políticas puede ser contemplada desde muchos puntos de vista, pero todos ellos no tienen en cuenta una información esencial para lograr que en nuestra sociedad existan personas activas políticamente y con alta competencia.

El principal objetivo debería ser alcanzar un punto en que la política no se encuentre restringida a un nivel social o económico. De este modo, es más probable que los sistemas políticos sean de hecho representativos, y caminen para hacer realidad los intereses generales del pueblo en su conjunto.