Educar con sentido común

Ser un buen educador no es una tarea fácil. Educar no es algo que aprendemos en la escuela o en la vida, sino que enfrentamos cuando nos convertimos en padres o madres.

Los niños no vienen con un manual de instrucciones que nos dice qué hacer en determinadas situaciones. ¿Cómo actuar cuando están ansiosos, con rabia o tristes? Normalmente lo que pasa es que repetimos lo que hemos visto en casa durante nuestra vida. Creemos que esto es correcto porque nuestros padres actuaban de esa manera. Desgraciadamente,

no siempre la forma en que nuestros padres nos educaron es la más correcta. Pero los tiempos van cambiando y, como padres, tenemos que adaptarse. Formas de educar

Hay muchas maneras de educar, pero para mostrarle una visión general sobre el tema, podemos clasificarlas en tres grupos:

1- Educación autoritaria o controladora

En la educación autoritaria los padres creen que con el uso del miedo o intimidación harán que los niños obedientes

. Realmente una educación autoritaria puede hacer que los niños obedezcan, pero actuarán de esa forma por miedo y no lograrán entender el por qué de los límites y de las reglas. Así, les enseñamos que podemos resolver los problemas con agresividad.Creamos hijos con baja autoestima, que creen que no son amados por sus padres. En muchos casos, acaban volviéndose agresivas y son rechazadas por su comportamiento inadecuado

.Compartir2- Educación permisiva

La educación permisiva es lo opuesto a la educación autoritaria.

Los padres dan mucho amor y cariño a los hijos, pero no son capaces de establecer límites claros , confunden a los niños con reglas evasivas que no se cumplen porque ellos mismos acaban cediendo.Los padres superprotegen a los hijos por miedo a lo que pueda suceder con ellos. Esto impide que los niños desarrollen sus habilidades, que se vuelvan responsables y maduras.

CompartirComo en el caso anterior, los niños educados de forma permisiva

tienen una baja autoestima porque se sienten incapaces de resolver sus problemas sin ayuda de nadie. 3- Educación democrática

La educación democrática utiliza el sentido común. Ella toma en cuenta que los niños no nacen sabiendo cómo funciona el mundo y es preciso explicarles. Las reglas y los límites no son impuestos por los padres simplemente porque es así que debe ser, sino porque tienen una lógica y un por qué los niños necesitan asimilar.

Gritar o agredir al niño no es una forma de educar o enseñar absolutamente nada. Es necesario conversar para que ella entienda que puede fallar y reparar su error. Demuestre que la acepta y la ama incondicionalmente como ella es, pero sin ser superprotector. Algunas técnicas para ser educadores democráticosComo ya dijimos,

los padres democráticos dialogan, aceptan incondicionalmente y, sobre todo, respetan a sus hijos

. Somos adultos y tenemos que controlarnos, aunque en muchas situaciones esto es muy difícil. Sugerimos aquí algunas técnicas que usted puede utilizar con sus hijos.

El castigo negativo El castigo negativo consiste enretirar del niño algo que le dé placer o felicidad, si ha violado alguna regla o excedido un límite definido.

Por ejemplo, si su hijo debía arreglar su habitación y no cumplió el acuerdo, tome algo que le gusta (un juguete, un programa de televisión, ir al parque, etc). No sirve aplicar un castigo negativo gritando y amenazando al niño, porque ella se pondrá nerviosa y no entenderá lo que está pasando. Es necesario hablar de forma serena y explicar que en la vida existen consecuencias cuando no cumplimos algunas reglas.

El refuerzo positivo Así como usamos un castigo negativo por una desobediencia, debemos recompensar un comportamiento correcto

. Si el niño ha cumplido una regla o ha hecho algo correctamente debe ser recompensado. Es muy importante que haya un acuerdo previo entre padres e hijos antes de recompensar o castigar.

El refuerzo positivo motiva al niño a continuar comportándose correctamente. Puede utilizar un sistema de fichas, donde va marcando puntos para cada conducto correcto. Estos puntos pueden ser intercambiados por premios, elogios, abrazos y cariños.Hipercorrección

La hipercorrección puede ser aplicada cuando el niño tiene un comportamiento inadecuado y queremos que ella repare su error y aprenda algo nuevo con eso. Por ejemplo, si juega toda su comida en el suelo, debe recoger la comida y ayudar a los padres a limpiar toda la cocina (platos, mesa, suelo).

Exposición y asociación para superar los miedos

Si somos muy superprotectores con nuestros hijos ellos se volverán miedosos y eso no es algo positivo. Para ayudarlos a superar los miedos, necesitamos enseñar a nuestros hijos a lidiar con ellos

; podemos asociar esos miedos con cosas divertidas.

Por ejemplo, si su hijo tiene miedo de la oscuridad y no puede dormir solo, usted puede jugar con él ocultando una barra de chocolate en la habitación oscura que tendrá que encontrar. Para dejar el juego divertido, el padre y la madre van dando pistas mientras esperan por él desde el exterior de la habitación. El niño asocia la oscuridad con bromas y algo apetitoso, mientras enfrenta el miedo y percibe que no pasa nada mal en la habitación oscura. Éstas son algunas técnicas que usted puede comenzar a utilizar para educar a su hijo. Sin embargo, lo más importante es cómo lo harás: siempre con amor y aceptación, con mucha paciencia, respetando el ritmo del niño y controlando tus emociones.