Una de las grandes paradojas del ser humano es querer ser especial y, al mismo tiempo, tener miedo de brillar. ¿Quién no quiere ser reconocido y admirado? Todos tenemos la necesidad de que otros vean nuestras virtudes. Y es una ventaja si, además de verlas, ellas ganan destaque. Sin embargo, muchos se sienten intimidados cuando reciben atención. Casi todos, en realidad. Y eso sucede porque
ganar destaque significa alejarse del grupo, no permanecer en el rebaño. En otras palabras, ser "diferente". De ahí viene, la mayoría de las veces, el miedo de brillar. "Su luz no apaga a los demás, pero los hace brillar más."
-Amparo Millán-
Entonces,
la primera cosa que usted debe hacer es establecer una distinción entre ser aprobado y destacarse . Cuando usted gana aprobación, gana las palmaditas en el hombro o la excitación que atestigua que estamos siendo aceptados y valorados por un grupo. Sin embargo, al destacarnos y brillar, no necesariamente ganamos aceptación. Usted puede incluso ser rechazado.A veces la cuestión no es tan extremista.
El miedo a brillar puede venir de una autoestima debilitada. En estas circunstancias, el reconocimiento de los demás asusta. Al permanecer anónimos, deseamos secretamente ser deseados y necesarios. El miedo a brillar y la culpa
El éxito de los demás normalmente hace que la gente se siente mal. Es inevitable. Forma parte del paquete.
Un triunfo excepcional impacta a los demás e incluso hará que muchos se sientan inferiores , aunque no tengan la intención. Una persona insegura interpreta el éxito de los demás como una amenaza. Es como si el éxito de una persona resalta el hecho de que la otra no lo logró.Sabemos todo esto intuitivamente. Nosotros presentimos que el éxito da lugar a una hostilidad latente o explícita.
El miedo a estas reacciones influye en el miedo a brillar. Usted no quiere crear una tensión con los demás, especialmente si son importantes para usted. Existen mecanismos inconscientes que a menudo traen castigos para aquellos que se destacan, quienes tienen más poder o brillo.
La familia y el miedo a brillar
La familia es el primer núcleo de socialización y muchas veces es el lugar donde el miedo a brillar nace
. Esto ocurre principalmente cuando la familia es disfuncional o estimula la falta de autoestima, la envidia o el sentimiento de inferioridad. Si un miembro de una familia así alcanza el éxito, esto puede parecer una traición.Es evidente que esto no sucede en el campo del consciente. Se infiltrar a través de comportamientos como prohibir las realizaciones o forzar a alguien a poner sus talentos al servicio de los demás. Entonces,
la idea de que destacarse puede traer consecuencias negativas se introduce . De la misma forma, los padres educan a sus hijos con algunos principios implícitos. Uno de ellos, muchas veces, es sufrir por el sufrimiento de los hijos. Quien tiene padres así se sentirá terriblemente equivocado cuando alcanza una conquista que le deja muy feliz. ¿Cómo sentirse bien, sabiendo que sufren? De ahí el miedo a brillarCuando usted se destaca, usted también se expone
Podemos agregar a lo que dijimos anteriormente que hay casos en que usted siente miedo de brillar porque hay un enorme miedo de ser diferente.
Existe miedo de ser señalado, cuestionado o rechazado. Además, si se expone significa afrontar la opinión de los demás. Y la exposición significa enfrentar las opiniones de los demás, lo que no siempre es constructivo para lo que es nuevo o diferente.
Esto generalmente sucede porque damos un valor excesivo para la mirada de los otros. Por eso, damos mucho más importancia a los atributos que los demás aprueban, en vez de priorizar las características que nos hacen únicos. Por lo tanto, implícitamente, los objetivos muchas veces pretenden atender a opiniones generalizadas, y no necesariamente nos hacen más felices. El miedo a brillar casi siempre implica culpa y miedo al rechazo.
Muchas personas renuncian a destacar sólo para mantener el cariño de su familia, sus amigos o su pareja. Al no "traicionar" a los demás, acaban traicionándose a sí mismos. Esto se suma a la infelicidad conjunta ya la limitación del desarrollo. Eso es incorrecto. Cuando somos mejores, también podemos ayudar a otros a ser.