Dolor de cabeza y estrés: dos aliados del sufrimiento

El dolor de cabeza más común actualmente es la provocada por el estrés, que se destaca como el enemigo más común, familiar y persistente de las personas. Después de un día de trabajo nos sentimos cansados, con la cabeza pesada y sin vitalidad.

De acuerdo con varios estudios realizados por la Clínica Mayo, este tipo de dolor de cabeza asociado al estrés afecta de forma recurrente y puntual al 78% de las personas . Este dolor puede ser muy limitante y causa un aumento de la tensión en la región del cuello, hombros y mandíbula, lo que intensifica el sufrimiento. El estrés diario nos deja tensos como las cuerdas de un violín afinadas con el dolor y la angustia. Es una música que resuena en nuestras cabezas como golpes sordos cargados de sufrimiento.Compartir desde el punto de vista psicológico es muy interesante analizar este tipo de dolor.

Estamos ante uno de los síntomas más comunes del estrés, cuya anatomía emocional tiende a movilizar no sólo la química del cerebro, sino el equilibrio de los músculos, vértebras y nervios craneos, aumentando así la tensión y trayendo como consecuencia el dolor.

Veamos en detalle su origen y cómo combatir a ese enemigo tan conocido. El dolor de cabeza y el eco de las emociones acumuladasNuestro cuerpo canaliza y recibe el impacto de cada una de nuestras emociones, sean ellas positivas o negativas

. Lejos de ser un acto sutil, la íntima relación entre dolor de cabeza y estrés es el resultado de un engranaje muy complejo, donde los neurotransmisores, el metabolismo, los nervios y el propio corazón detonan un mecanismo que a menudo es difícil controlar. Para enfrentar cualquier tipo de dolor, es necesario impedir que ella tome las riendas de nuestra vida: es aconsejable controlar sus desencadenantes desencadenantes y enfrentarla con firmeza y coraje.

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De acuerdo con un estudio realizado en la Universidad de Maryland, los dolores de cabeza relacionados con el estrés tienen un impacto mayor en el sexo femeninoy, a pesar de ser una de las enfermedades más comunes, es una de las más olvidadas y difíciles de tratar. Sin embargo, nada mejor que conocer a su enemigo para enfrentarlo con sus mejores armas, aquellas que sean más adecuadas a sus características y necesidades. Para este tipo de dolor de cabeza

no siempre un analgésico resuelve; necesitamos conocer otras estrategias y, sobre todo, usar la prevención.El mecanismo que origina el dolor de cabeza por estrés

Todavía no sabemos exactamente cómo se origina el dolor tensional asociado al estrés. Durante mucho tiempo los investigadores creían que era debido principalmente a la contracción de los músculos de los hombros, cuello, cuero cabelludo y mandíbula. El estrés y la ansiedad suenan como una sensación de alarma para nuestro cerebro ante un peligro inminente del que necesitamos escapar. Nuestro instinto nos prepara para la fuga, pero lo racional nos impide y nos obliga a quedarnos quietos. Esto provoca una gran tensión.

Las últimas conclusiones a las que llegaron los expertos indican que esa tensión muscular provoca la liberación de ciertos neurotransmisores, que a su vez, activan los caminos del dolor. Es curioso cómo

la sensación de sufrimiento aumenta justamente cuando llegamos a casa o cuando llega el fin de semana.

Nuestro cuerpo, nuestro cerebro, ya no recuerda más de "cómo relajarse" y puede mantener e incluso aumentar el dolor. Cómo afrontar el estrés para aliviar el dolor de cabeza

  • Como hemos observado anteriormente, es necesario buscar nuestros propios métodos de acuerdo a nuestras necesidades. Con ayuda médica y estrategias apropiadas para hacer frente y para combatir el estrés diario
  • podemos gestionar este tipo de dolor, tan común actualmente.
  • Le invitamos a reflexionar sobre dos aspectos simples, que tal vez puedan ayudarle: Concientización: coloque un límite hasta donde usted puede ir cada día. Un error grave es llenar nuestra agenda de tareas, y tal vez sea el momento de establecer prioridades:

"no voy a preocuparme por lo que no es importante, no voy a dejar que me afecte, no voy a dejar que esa persona me incomoda, a las 18 horas termino y voy a descansar ...

Comenzar y terminar el día de la misma manera: con tranquilidad. Puede parecer tonto, pero algo tan simple como levantarse media hora antes y disfrutar de un momento de relajación, silencio y meditación puede ayudarnos a enfrentar el día con más equilibrio. Algo que, a su vez, debemos repetir al final del día: dos horas antes de dormir, relájese y dé un tiempo para usted mismo.Para concluir,

se trata de encontrar un camino para el equilibrio interior

  • . Cuando estamos en paz y en equilibrio, nos permitimos estar presentes y nos liberamos del estrés que acelera nuestro corazón y tumultua nuestra vida. El dolor de cabeza es sólo el primer aviso que el estrés y la ansiedad pueden causarnos. Debemos evitar este estrés, que a pesar de ser común, es muy peligroso.