Es común decir que las personas interesantes son tan escasas como diamantes puros que se deslumbran sólo al mirar hacia su dirección. No es necesario ir tan lejos ni ser tan exagerado. Estamos seguros de que usted también cuenta con algunos cómplices de aventuras. Compañeros de momentos inolvidables y fieles constructores de emociones positivas. Los que nos hacen crecer por dentro y sonreír por fuera. En la vida, existen creadores hábiles de intereses más egoístas y personas de corazón humilde, de mente curiosa. Debemos defendernos de esos primeros y aprender cada segundo, cada día. Compartir Todos nosotros tenemos nuestros secretos y nuestras virtudes. Y todos somos, sin duda alguna, interesantes a nuestra propia manera. Pero
entre ser interesante y ser interesado, existe un océano de tormentas y mares agitados.¿Cuántas veces has tenido que lidiar en tu día a día con personas interesadas?
Ellas están presentes en muchas relaciones cotidianas, desde sociales hasta personales. Y no, no se trata de ir cortando vínculos, de ir cerrando puertas para esos tipos de personalidades.Se trata sólo de saber manejar las emociones que ellas causan en nosotros, de imponer límites, de hacer ver, de vivir en paz y saber decir "basta" cuando sea necesario.
Las personas interesantes que me enseñan a ser mejor La vida debería ser un continuo intercambio de afectos, conocimientos y experiencias.
Así todos ganamos, sumamos y no nos faltará nada. Sin embargo, no puede ser siempre de esa forma. Las personas interesantes no sólo deslumbran con su originalidad, con su ser auténtico y cautivante. Ellas saben acoger, respetar y permitir que se establezca un intercambio adecuado de sentimientos y emociones.
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La conexión con personas interesantes ocurre en el mismo instante, incluso sin saber muy bien el por qué. Aparecen en nuestras vidas y sentimos una unión casi inmediata
en términos de ideas, pasiones y pasatiempos. Nuestros mundos chocan y ambos ganamos. En términos generales, podemos definirlas de la siguiente manera:Las personas interesantes añaden sus piezas en los rompecabezas de nuestros valores y pasiones. Estas conexiones establecen una serie de emociones positivas.
Expanden nuestra mente, nos traen más conocimiento, cambian nuestro punto de vista y nos enriquecen. El cambio no es solamente unilateral,
- el beneficio es mutuo
- . Nosotros también contribuimos, ofrecemos, recibimos y establecimos un aprendizaje continuo a través de las vivencias, experiencias que fortalecen aún más la amistad o la relación.No es fácil encontrar una o varias personas que encajen perfectamente con nuestras líneas de pensamiento, pasiones e intereses. En realidad,
- las personas interesantes, en lugar de"encajen", muchas veces lo que hacen es desafiarnos, nos ofrecen cosas nuevas, y así crecemos.
Todos necesitamos esa magia que de vez en cuando llega al exterior y que nos hace salir de la dirección que siguen nuestras vidas para explorar nuevas formas de conocimiento. Son personalidades muy estimulantes, que al mismo tiempo también comparten los mismos valoresy, de ese modo, nace un equilibrio sutil.Cómo tratar a las personas interesadasConvivimos todos los días con personas interesadas
y, obviamente, no siempre es fácil y no siempre deseamos romper esa relación. Puede ser que sean siempre nuestros padres que acaban aguzando ese egoísmo implícito, o hasta aquel compañero de trabajo que siempre nos manipula con sus sutiles intereses ... De las personas interesadas no se escapa; se debe hacer frente marcando límites y definiendo territorios personales. Porque toda persona interesada tiene como esencia el egoísmo, y su única virtud será la de exigir de los demás que vivan y "bailen" como deseen. Compartir
Quien está acostumbrado a buscar siempre el beneficio propio en sus relaciones corre el riesgo de acabar viviendo en absoluta soledad.
Y sin lugar a duda, por razones de equilibrio interior e incluso de salud, debemos rodearnos de personas interesantes en lugar de las interesadas, aunque muchas veces es difícil escapar de ellas. ¿Qué podemos hacer? ¿De qué manera debemos tratarlas?
- No ceda en los pequeños actos o acabará resultando en grandes renuncias.-
Nunca diga "sí" a algo que no desea hacer , por insignificante que sea. Al hacerlo, al decir "no", es común que la otra persona se siente sorprendida e incluso ofendida. Sin embargo, debemos dejar claro desde el principio cuáles son nuestros límites. - Es común que las personas interesadas acaben lanzando mano de chantaje emocional.
"Si no lo hace, es porque no me gusta".
No permita eso, el chantaje emocional es un tipo de abuso implícito y, como tal, debe hacerlo verlo. "Si me gusta de mí, no me lo pedirá".Debe estar atento a cada palabra ya cada acto.
Las personas interesadas suelen ser muy sutiles en sus acciones, de ahí la necesidad de estar alerta para no dejarse llevar por sus voluntades, por sus egoísmos disfrazados que, a veces, viven "envueltos en papel de regalo". Recuerde que las mejores cosas de la vida no son cosas, son momentos. Aquellos que compartimos con personas que nos enriquecen, seres interesantes que no vulneran nuestras emociones, sino que nos enriquecen para que podamos crecer y volar más alto.Compartir