Quiero hablar de átomos, de muerte, de espacio, de filosofía, de política, de sexo, de viajes a Asia, a Nueva York oa la Luna, quiero que usted me cuente todas las mentiras que ya dije a lo largo de su vida, en lo que piensa mientras besa a alguien, quiero que usted hable con emoción.
No quiero que me haga críticas, que me diga lo que tengo que hacer, que me juzgue o me haga sentir culpable. No intente manipularme, ni me haga interesar por mí para luego desaparecer sin decir nada. No deseo personas así en mi vida.
No quiero gente tóxica en mi vida
Muchas personas pasan por nuestra vida en diferentes momentos, algunas se quedan y otras se van. A veces una persona, al desaparecer de nuestras vidas, deja un agujero que es difícil llenar porque nos transmitió emoción, y otras veces una persona desaparece y nos sentimos tranquilos y aliviados. Estas últimas son las personas tóxicas.Aprender a identificar a las personas que son tóxicas requiere tiempo y experiencia, y también se basa en un conocimiento de nosotros mismos que nos permite valorizarnos y someterse a las críticas de otra persona. Pero, ¿cómo identificar a una persona tóxica?
Las personas tóxicas no son honestas Una persona tóxica generalmente intenta ejercer poder o se hace víctima para manipular a los demás. De esta forma
consiguen hacer lo que quieren y que usted haga lo que desean
. Por eso, es importante tener una autoestima elevada, no permitir la manipulación o que esa persona afecte nuestra emoción. Las personas tóxicas son entrometidasUna persona tóxica le encanta criticar y hablar de los demás por la espalda, por lo que son capaces de utilizar cualquier historia que le contenga para causar daño y perjudicar a los demás.
Evite contar algo para una persona tóxica y no permita que mora o hable mal de usted o de otras personas.
Las personas tóxicas necesitan aceptación en todo momento La necesidad de ser amada o aceptada es característica de una persona tóxica. Son personas que necesitan reconocimiento y aceptación continuas porque crean conflictos y son egoístas.
Piensan en sí mismas y no en los demás.
Las buenas relaciones nos hacen ser personas más felices y saludables Un increíble estudio fue realizado por la Universidad de Harvard analizando a varias personas durante toda su vida para saber qué es lo que hace una persona feliz y sana. El estudio fue llamado "Estudio de Desarrollo de Adultos".
Se analizaron 724 personas desde la adolescencia hasta la vejez, alrededor de los 75 años
. Se hicieron preguntas años tras año sobre su trabajo, su vida familiar y su salud. El problema es que el estudio mostró ser enorme y pasó por problemas de financiamiento y de personas que resolvieron abandonarlo. Al final del estudio quedaron unas 60 personas con vida, bordeando los 90 años.
Después de decenas de conversaciones grabadas, estudios analíticos y de sus cerebros escaneados, la conclusión fue muy clara, según afirma Walker (cuarto director del estudio):las buenas relaciones nos hacen más felices y saludables.
Quiero a las personas que transmitan emoción Me gustan las personas que me transmiten energía, que confían en mí, que me apoyan en mis decisiones y no juzgan, que me hacen ver el lado positivo de las cosas, que me animan cuando estoy mal y me transmiten su entusiasmo.
Me gustan las personas que transmiten su emoción por las cosas que hacen, por la vida, que se apasionan y que se ríen y lloran.
Estas personas con quienes, después de algunas conversaciones, usted desea abrazar el mundo y hacer millones de cosas.Una persona con energía positiva sonríe para la vida, siempre está donde desea estar
, sabe cuidar de su cuerpo y de su mente, aprendió a relativizar sus problemas ya sacar lecciones de sus errores, da alegría y amor a los demás, sabe aprovechar sus momentos de soledad y también las oportunidades. Me gusta este tipo de persona.