La felicidad tal vez sea eso que no sabemos definir muy bien, pero que todos buscamos ansiosamente. A veces hasta generamos un tremendo malestar por las propias exigencias que nos imponemos para encontrarla, para ser felices suceda lo que pase.Si usted pregunta a alguien donde encontrar la felicidad, normalmente recibirá respuestas que hacen referencia al exterior, al que se disipa, al está más fuera de nuestro control que en nuestro interior.
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> o dice la conocida canción. Pero el hecho es que no es así:ni la salud, ni el dinero, ni el amor traen felicidad, y creer que su estado de ánimo depende de estas áreas de su vida es un gran error, que al final lo llevará a ser aún más infeliz. ¿Dónde solíamos buscar la felicidad?
Desgraciadamente nosotros inventamos una infinidad de creencias irracionales.Son exigencias y necesidades que sólo están en nuestras propias mentes, pero que creemos que son verdades absolutas. Sentencias inquebrantables que necesitan definir nuestros caminos. De hecho, cuestionarlas puede causar el mismo vértigo que acercarse a un acantilado empinado. Nosotros las asumimos como mandamientos, nos guiamos por ellas, las hacemos nuestras, e incluso las defendemos aunque nos provoquen sufrimiento.Erroneamente creemos que si estas necesidades y exigencias están cubiertas, encontraremos la felicidad, pero si no alcanzamos nuestras expectativas, nos sentiremos miserables.
Exigencias con las que nadie puede manejar, mucho menos nosotros mismos.
Normalmente estas creencias hacen referencia a la aprobación de los demás, al desempeño perfecto de sí mismo en alguna tarea de relevancia, al dinero, a la salud, a tener una relación amorosa estable y que funcione perfectamente, a ser madre, a ser alguien interesante y carismático , etc. Realmente existen muchos tipos de creencias y cada persona tiene sus propias, pero básicamente tienen que ver con lo que acabamos de mencionar. "El trabajo dignifica", "Su arroz va a pasar del punto", "El dinero trae felicidad", "La salud es la cosa más importante que existe" ...
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Por lo tanto, es ahí que solemos buscar nuestra felicidad, que hace que nos impongamos expectativas poco realistas y, al fin y al cabo, seamos muy infelices. De hecho, las investigaciones confirman que cada vez tenemos más necesidades suplidas y somos más infelices que el año anterior. ¿Qué es la felicidad?
Si cada vez poseemos más y vivimos más cómodamente, con más abundancia, ¿por qué somos más infelices? ¿Qué está fallando?
Lo que está fallando es creer que las cosas externas nos harán felices. Es verdad que conseguir el trabajo de sus sueños, encontrar un compañero que lo ame, o tener dinero da un cierto placer, pero en realidad todo eso es muy a corto plazo. Y es placer, lo que no es felicidad.
El ser humano rápidamente se acostumbra a lo que tiene y cada vez necesita más, de modo que no tiene fin, no se conforma con todo lo que esto implica. Compartir
¿Quién no conoce a las personas multimillonarias que ya han robado? ¿No tienen suficiente? ¿Quién no oyó hablar de alguien que se mata trabajando a pesar de poder trabajar la mitad para vivir?
Cuando percibimos que no somos felices a pesar de tener todo, creemos que la solución es más de lo que ya tenemos: trabajar más horas, tratar de ser más atractiva, hacer más dinero, viajar más, buscar un novio desesperadamente ... y consecuentemente lo tomo y aún más.
Lo que estas personas no saben es que la felicidad está en ellos mismos, en su actitud, en cómo deciden aprovechar la vida y en cómo funciona su escala de valores. Compartir
La felicidad está en cómo usted aprecia y se divierte con lo que usted posee, sea poco o mucho.Hay personas que tienen muy poco y son mucho más felices que aquellos que poseen mansiones y grandes fortunas.
No son pocos los ejemplos de personas que tienen de todo y acaban suicidándose, después de pasar toda una vida tomando todo tipo de medicamentos.
Si quieres ser feliz, empieza apreciando todo lo que hay a tu alrededor y parándose de quejarse por lo que falta. Es prácticamente imposible que todas las áreas de su vida estén completas, pero eso no significa que usted no pueda ser feliz con lo que tiene en las manos.Compartir
El olor de café por las mañanas, la risa de su pequeña hija, bailar una hermosa música con su compañero en medio de la sala, correr con sus perros detrás de las mariposas, mirar las estrellas, una buena conversación en la playa mientras la brisa alcanza su cara, abrir una botella de vino con un baño caliente ...Estas son pequeñas cosas que ciertamente traen felicidad, ¿sabes?