En la era de la globalización, desconectarse de la rutina y especialmente del trabajo parece una tarea imposible.Encontrar un equilibrio entre el tiempo que dedicamos al trabajo y el tiempo libre de que disponemos puede parecer irrelevante.
Irrelevante en el sentido de que no dedicamos mucho tiempo a pensar explícitamente en ello.Pero lo cierto es que no hacerlo puede llevar a una acumulación de estrés que, a largo plazo, se transforma en ansiedad, con efectos preocupantes sobre nuestra salud.Paradoxalmente, cuando nos agarramos mucho al trabajo, saboteamos nuestra vida a causa de esa obsesión.
Si la mente está cansada, se vuelve menos eficiente y tiene un rendimiento menor.En ese punto, cuanto más trabajamos, menos resultados obtenemos. La frustración aumenta y las decisiones importantes se retrasan o se vuelven menos asertivas."Cuando no logramos encontrar tranquilidad dentro de nosotros mismos, de nada sirve buscarla en otro lugar."
-Franzos de la Rochefoucauld- Pero es importante desconectarse no sólo del trabajo, sino también del bombardeo tecnológico en que usted vive todos los días.
Hoy en día tenemos una percepción diferente de las relaciones sociales, que genera la necesidad artificial de permanecer siempre conectados. Esta necesidad de estar siempre disponible despierta la inseguridad en las personas cuando se ven obligadas a separarse de sus aparatos. Por lo tanto, esta conducta puede acabar afectando nuestro bienestar emocional.Desconectarse de las nuevas tecnologías
Pocas personas son verdaderamente conscientes de la importancia del tiempo libre. A menos que seamos especializados en el arte de la relajación, nuestro trabajo se desarrollará con mayores o menores niveles de tensión. Por eso es importante organizar mejor el tiempo de trabajo y destinar un espacio para el descanso.
De lo contrario el trabajo puede convertirse en un vicio, y como todos los vicios, tendrá consecuencias negativas. Por lo tanto, es importante saber si se desconecta.Las nuevas tecnologías han potenciado y mejorado nuestra comunicación y el flujo de información, pero también han contribuido a deteriorar nuestra calidad de vida y nuestra salud. Esta es la conclusión a la que llegaron muchos estudios realizados en áreas como la medicina y la psicología.Es claro que la comunicación instantánea es una enorme ventaja, pero también es verdad que crea una cierta esclavitud.
Las nuevas tecnologías, y en particular las redes sociales virtuales, son absorbentes y dificultan la tarea de establecer límites entre el personal y el profesional.Nuestra salud y el trabajo
Desde el punto de vista de nuestra salud, los síntomas característicos de una necesidad urgente de desconectarse incluyen fatiga crónica, falta de energía y agotamiento.
Nuestra concentración disminuye y todo junto se refleja en una deficiencia en las actividades que realizamos. La persona que está en esta condición tiende a somatizar su estado psicológico en forma de enfermedades dermatológicas, gastrointestinales, o dolores de cabeza persistentes. En este caso, la única fórmula eficaz para resolver tales problemas es el descanso. El tiempo libre es el escenario perfecto para desconectarse del trabajo y ocuparse de actividades que lo relajen y que sean estimulantes para su cerebro.
Para saber si es el momento de desconectarse, usted debe comenzar por evaluar sus hábitos de sueño,
lo que es lo mismo que decir que usted debe considerar si ha dormido en cantidad y calidad suficientes.Mejorando este aspecto, su vida tomará otro rumbo y usted sentirá una recuperación en poco tiempo. Tanto a nivel orgánico y psicológico, los beneficios son enormes porque habrá menor acumulación de estrés y un estancamiento en el agotamiento que deteriora su salud. Además,podrá restaurar sus energías y recursos, de modo que mejore su rendimiento ante las exigencias profesionales y sociales.
Es fundamental en nuestras vidas disponer de tiempo libre para dedicar al descanso, a la diversión ya realizar actividades que nos gusten.Fomentarsólo las tareas rutinarias es perjudicial para nuestra creatividad y nos predispone animalmente
de forma negativa ante cualquier otro esfuerzo.Consejos para desconectarnosPara desconectarse, puede tener en cuenta lo siguiente:Rir y divertirse al máximo debe quedar en la parte superior de las tareas a realizar.Estos son los ingredientes fundamentales para sacar el mejor de nosotros mismos. Trabajar durante nuestro tiempo de descanso puede producir una falsa sensación de productividad, pero en realidad lo que estamos haciendo es agotar nuestra creatividad, nuestra motivación y nuestra energía.El trabajo y el tiempo libre son igualmente importantes.La crisis económica de muchos países genera en nosotros un temor de perder nuestro empleo y esto nos lleva a trabajar más. Sin embargo, tenemos que poner límites en el tiempo que dedicamos al trabajo. Por eso, las horas que dedicamos demasiado al trabajo deben ser compensadas con tiempo libre durante los fines de semana.
Debemos aprender a delegar funciones, así como a priorizar actividades.
Especialmente cuando desempeñamos cargos directivos, es nuestro deber confiar en nuestro equipo de trabajo. De otro modo, asumir una carga laboral difícil de aguantar a largo plazo. Es importante planificar nuestro tiempo de descanso, sobre todo cuando está fuera de casa.
- Para poder disfrutar mejor de nuestro tiempo libre, lo ideal es no andar con dispositivos móviles como el celular y el ordenador, ya que estropean todo.Cuando la mente se desvincula de la presión y del exceso de trabajo ella puede crear libremente. Adicionalmente, es también en este momento que tenemos ideas más claras y una mayor tranquilidad para resolver cualquier problema.