Todos nosotros ya sentimos celos de alguien en menor o mayor grado, pero también hemos sido víctimas de la envidia de las personas o de los celos enfermizos de un novio.En algunos casos, estos celos desmedidos pueden convertirse en una amenaza para nuestra integridad física y mental. Los expertos llaman a esos celos enfermizos de Síndrome de Otelo, y afirman que las personas celosas pueden tener personalidades enfermizas y ocultar otros tipos de problemas psicológicos. Los celos de los niños
Los celos entre hermanos es muy común. Aunque existen diferencias individuales, los niños se sienten emocionalmente frustrados al pensar que sus padres dan más atención o les gusta más de sus hermanos. A veces, esta situación puede causar incomodidad y confusión en el hogar, debido al comportamiento agresivo de los niños. En estos casos, los padres necesitan saber manejar la situación y equilibrar el trato entre los hermanos, sin preferencias, alabando los aspectos positivos de cada uno y, siempre que sea posible,
aumentando las actividades en común, ignorando las manifestaciones de "birras" o negativismo y actuando con calma ante las crisis de celos, para evitar confusiones y peleas. Los celos en el trabajoDe acuerdo con varios estudios, casi el 90% de las personas ya han sufrido celos de sus colegas en el ambiente de trabajo.
Análisis recientes muestran que las mujeres son más competitivas y tienen más celos y conductas desafiantes contra las otras mujeres, sobre todo si son bonitas y atractivas
. En ese caso, los celos son aún más grandes. Las mujeres son las más afectadas, pero los hombres también sienten envidia y celos de las habilidades de los colegas. Estas personas transfieren a los demás la responsabilidad de sus fracasos, no pueden mantener el control sobre su propio desempeño y ven en las demás cualidades que no tienen. No saben manejar sus emociones y creen que sus colegas son personas con cualidades y habilidades que les gustaría tener, pero no se esfuerzan por aprender. Su autoconcepto es un confuso rompecabezas, formado por sus deficiencias, debilidades e inseguridades que esconden detrás de la rivalidad y el desafío.Como dijimos anteriormente, esta es una característica más común en las mujeres, en el contexto del trabajo. Las otras mujeres son sus "víctimas" preferidas.
Los celos del compañero Los celos son muy comunes entre las parejas. Se considera normal, siempre que ninguno de los dos se sienta coaccionado o atacado por un comportamiento excesivo o patológico del compañero. Sin embargo, en algunas ocasiones, la situación puede llegar a ser compleja. El exceso de desconfianza trae mucho sufrimiento y debilita la relación. Las personas con celos patológicos pueden imaginar que su compañero tiene otra persona, buscan señales de esa traición, persiguen y controlan la vida del otro y tienen un miedo obsesivo de ser abandonados. ¿Qué hay detrás de esas personalidades? Son muy inseguros, no confían en sí mismos y poseen una baja autoestima, que les hace creer que serán abandonados. Este sentimiento de fragilidad interior proyecta en el compañero sus miedos y ansiedades.
Ellos quieren ser "todo" para el otro, demostrando así falta de comprensión de la realidad, y confunden amor con posesividad
. Es un tipo de celos diferente de los anteriores, pero igualmente perjudicial para las personas de su convivencia.