"A lo largo de mi vida, entendí el amor como una especie de esclavitud consensual.
Pero no es así: Existe libertad sólo cuando existe amor. Quien está totalmente entregado, que se siente libre, más ama.
Y quien ama se siente libre. En el amor, cada uno de nosotros es responsable de lo que siente, y no se puede culpar al otro por eso.
Nadie pierde a nadie, porque nadie es dueño de nadie.
Y esta es la verdadera experiencia de libertad: tener lo más importante del mundo sin poseerlo.
- Once Minutos, de Paulo Coelho -
El amor no es control o exigencia, es libertad y confianza. Sin embargo, la esclavitud emocional es mucho más común de lo que nos gustaría admitir.
Conocemos muy bien la teoría, pero no la ponemos en práctica. Es decir, quien se atreve a decir a su pareja que no necesita de él para vivir, pero que lo escogió? Prácticamente nadie.
Esto sucede porque no somos realmente conscientes de lo que significa decir a alguien "no puedo vivir sin ti". A medida que pronunciamos estas palabras o expresiones similares, estamos presionando a nuestro socio.
Sin duda es una presión muy sutil, porque nuestra intención no es responsabilizarnos por nuestra felicidad o por nuestra vida. Sin embargo, estamos desequilibrando la balanza del amor con esas expectativas.Compartir
A veces no nos enamoramos, nos esclavizamos
La verdad es que el amor y la dependencia no pueden coexistir, porque el amor se transforma en una prisión emocional. Aunque la relación continúe, el amor será ofuscado por la dependencia. Sin embargo, tardamos tanto en percibir que no construimos una relación armoniosa, que acabamos pidiendo el destino que algo cambie para poder ser felices.
CompartirCreemos que el amor es un cuento de hadas, con príncipes y princesas, donde todo termina bien. Sin embargo, "felices para siempre" sólo existe en las películas.
En ese sentido, creemos que lo correcto es conformarse con la seguridad que sentimos como tenemos a alguien a nuestro lado. En verdad, los únicos que pueden traer felicidad y estabilidad para nuestra vida somos nosotros mismos.
Somos frutas enteras y no mitades de la naranja "Nos hicieron creer que cada uno de nosotros es la mitad de una naranja, y la vida sólo tendrá sentido cuando encontremos la otra mitad. No hemos sido informados de que nacemos enteros, que nadie merece cargar la responsabilidad de completar lo que nos falta ... "
- John Lennon -
CompartirEl amor es saludable cuando no exigimos nada de nadie.Amar es compartir; es un intercambio de cariños y cuidados.El amor durará el tiempo que sea cuidado . Por eso, es muy importante reflexionar sobre lo que esperamos de nosotros mismos, de nuestra relación y del otro.
Amar a sí mismo no es un privilegio reservado para pocos, sino un trofeo que está al alcance de todos. Podemos incluso adorar a nuestro compañero, pero siempre de una forma que nos permita crecer como persona, madurar la relación y cuidar de nuestra autoestima.Tener esto en mente significa respetarse plenamente y tener la garantía de una relación sana, que no traerá sufrimiento a la pareja. En el amor, no todo está permitido, principalmente exigencias y limitaciones.
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