Nadie experimenta o permanece en una situación de incomodidad por placer, ni siquiera aquellos que llamamos "masoquistas". En el fondo, todos queremos estar en paz y ser tan felices como podamos, pero no siempre encontramos el camino para lograrlo. En realidad, este camino se vuelve mucho más complejo cuando la persona no se dedica a aprender a gustar de sí mismo. La mayoría de la gente no nació y creció en condiciones ideales.
Son muchos los que tuvieron que enfrentar circunstancias muy adversas desde una edad temprana. Una de las cosas más recurrentes es haber crecido en un ambiente hostil, donde no hubo reconocimiento o evaluación. Cuando usted no tiene gusto de sí mismo, siempre tiene que sumergirse en ese pasado lejano.
Allí están las razones por las cuales usted aprendió a evaluarse negativamente, por las cuales usted no puede dar valor a sus conquistas, ni sentido a sus virtudes. Es allí donde nace la semilla envenenada de querer ser otra persona, vivir otra vida o, de alguna forma, escapar de lo que eres. La buena noticia es que nunca es demasiado tarde para reparar esos daños, aprender a gustar de sí mismo y lograr reconciliarse con su ser. "Usted es imperfecto, de manera permanente e inevitablemente imperfecta. Y tú eres hermoso. " -Amy Bloom-
Así se manifiesta la idea de no gustar de sí mismo
El problema cuando usted no tiene gusto de sí mismo es que usted acaba por no gustar nada.
En realidad, el mundo siempre se convierte en una proyección de lo que cargamos dentro de nosotros. Ahora, no es el mundo que tiene aspectos agradables o desagradables, somos nosotros quienes lo vemos de una forma u otra.
Si usted no tiene gusto de sí mismo, todo lo que tiene que ver con usted acaba siendo desagradable o poco valioso para usted. Lo común es que usted se anime y se desanime con gran facilidad. Usted siempre termina encontrando en cada realidad un aspecto que le lleva a verse con desencanto.
Usted consigue muchas cosas y no termina ninguna porque el entusiasmo acaba. Siempre encuentra una manera de ver algún aspecto negativo. Muy grande, muy pequeño, muy distante, muy cerca ... Cualquier aspecto que, al principio es neutro, es transformado en algo negativo o sin valor. Y usted no lo percibió.
Usted se siente mal y proyecta eso sin darse cuenta. En realidad tienes una herida abierta y estás sufriendo. ¿Qué pasa con tu vida cuando no te gusta nada? La inconformidad no es un hecho, sino un punto de vista. El mundo y la realidad son lo que son. Cada ser humano da un significado a su universo. Nuestra perspectiva de la realidad habla mucho más de nosotros mismos que de las cosas en sí. Cuando usted no tiene gusto de sí mismo, tampoco puede dar significados positivos a lo que ve
, al que oye, al que percibe, al que llega a su vida ...
Uno de los aspectos más preocupantes de todo eso es que sin darse cuenta, se convierte en un hábito para ti
. Su mente comienza a funcionar automáticamente. Funciona como un detective que siempre busca el peor ángulo de todo. Como usted siempre lo encuentra, eso alimenta su idea de que el mundo y la realidad son algo deplorable.Sin darse cuenta, usted eligió este punto de vista para abordar la realidad, pero usted no lo hizo por placer.
Es simplemente una manera de lidiar con los vestigios de un rechazo que ha logrado perjudicar profundamente.Su desagrado con todo a su alrededor es simplemente una manera de procesar el dolor de saber que no le gusta a sí mismo.
Cómo superar el pasado y aprender a gustar de sí mismo Lo que usted es, qué siente y lo que piensa probablemente fue ignorado, descalificado o simplemente rechazado durante su infancia, en su casa o en su ambiente inmediato. Y ciertamente también fue un hecho reiterativo.
Cuando era niño, no podía entender lo que estaba pasando.
Usted creció con la idea de que era "malo", en todo o en parte. Es casi seguro que aquellos que actuaron así con usted tampoco les gustaba de sí mismos. Le proyecta sobre usted su no conformidad. Estaban en una posición similar a la que usted está ahora. Vieron lo que había de mal en su juicio e ignoraron lo bueno. Es una cadena que se vuelve infinita hasta que alguien decida por un fin en ella.
Lo ideal es que sea usted quien marque ese "hasta aquí". Que acabe con esa historia de infelicidad, inconformidad y prejuicio. Por supuesto, todos tenemos aspectos reprensibles. Sin embargo, en esencia, poseemos un valor que nada y nadie puede cuestionar. No somos más ni menos que nadie. Tenemos el derecho de cometer errores y también de ser felices. Es hora de construir una nueva perspectiva.