¿Por qué no deberíamos hacer una tempestad por una infidelidad?

Según diversos estudios antropológicos y psicológicos, y de acuerdo con una perspectiva evolucionista, la infidelidad en el mundo animal es mucho más común de lo que imaginamos. Y nosotros, como seres humanos, también pertenecemos a ese mundo animal, por lo que los resultados de estos estudios nos afectan de algún modo. A continuación, reflexionar sobre este tema. La influencia de las creencias irracionales en el amor

Vivimos en sociedades extremadamente artificiales, en todos los sentidos, y sufrimos mucho por ello.

A lo largo de nuestra vida, nos han presentado una serie de ideas y creencias que rigen nuestra manera de actuar en el mundo. Muchas de estas ideas son irracionales, carecen de lógica o son falsas, pues no corresponden a la realidad.

Las ideas hiper-románticas son un ejemplo de creencias irracionales.

Nos enseñan que tenemos una mitad de la naranja, que necesitamos un compañero para estar completos, que la persona que ha sido infiel a nosotros es una mala persona, y que la infidelidad o el abandono es un hecho dramático o terrible. Todos estos mensajes, junto con ciertas películas y canciones de amor, van siendo grabados en nuestra cabeza, y nosotros creemos hasta hacer nuestras ideas.

El problema es que cuando ocurre algo de este tipo, nos sentimos increíblemente mal y lo vivimos como si fuera un hecho terrible e insoportable, que nos puede llevar, incluso, a caer en las redes de una depresión ya conducirnos a serios problemas.

Para deshacer esas ideas falsas,

tenemos que ser realistas y apegarnos al natural . De esta manera, sufriremos mucho menos si alguna vez nos encontramos con esa adversidad.

Tenemos que reflexionar sobre lo real:

casi todos los seres vivos son poligámicos y no monógámicos como nos empeñamos en ser. El 26% de las mujeres y el 35% de los hombres confiesa haber sido infieles alguna vez en su vida, y eso es mucho más común de lo que imaginamos. Por lo tanto,no deberíamos calificar algo que es natural como muy grave o terrible, sino como una pequeña adversidadque no debería significar un mundo, ni siquiera causar un término si los demás aspectos de la pareja funcionan correctamente.

Normalizar el acto de ser infiel Tenemos que abrazar la idea totalmente real de que nadie pertenece a nadie y nadie necesita a nadie. Si incorporamos esta idea a nuestra filosofía vital, nos daremos cuenta de que el impacto emocional de una posible infidelidad se reduce de forma notable.

Personalmente, creo que es peor el engaño o la traición que la infidelidad en sí

, pues quien engaña cree que lo que está haciendo es incorrecto y toma la decisión de ocultarlo, sin dejar que el otro miembro decida con libertad, que hacer con esa situación. Al margen del engaño o de la mentira, si no queremos sufrir tanto a causa de una infidelidad, debemos ser conscientes de que todos somos infieles por naturaleza, pero nos controlamos por cultura.Es verdad que ser fiel al compañero es algo hermoso y admirable y hay muchas parejas que son fieles durante toda la vida y viven felices, pero eso no quiere decir que no sea el resultado de la capacidad de autocontrol que tenemos.

Todo tiene una explicación ... Desde un punto de vista biológico, el hombre necesita varias parejas sexuales para asegurar que sus genes no desaparecen, y la mujer busca la obtención de bienes, la subsistencia complementaria y la variedad en el ADN.

Gostemos o no, esta tendencia sigue palpitando en nosotros como un instinto de supervivencia

, como hace el miedo para protegernos del peligro o el asco para evitar intoxicaciones.

Después de los cuatro primeros años de pasión, caímos en la monotonía, y la rutina y el desgaste despiertan el apetito por algo nuevo. Sin embargo, muchas veces el amor es capaz de derrotar los instintos.Es posible mantener la llama encendida y es importante que hagamos esto,

teniendo relaciones sexuales de manera regular, innovando en la medida de lo posible para no caer en el aburrimiento, y manteniendo un contacto cercano: dar las manos, abrazar, dormir juntos ... son pequeños detalles que nos mantienen más unidos a nuestro compañero. Recomendados para usted