¿Quién no tiene un amigo o conocido que siempre parece estar feliz? De feto, parece tan feliz que, a veces, su actitud positiva irrompible puede irritarnos. Muchos piensan que él no tiene el derecho de mostrar tal actitud, porque, en realidad, no todo es tan positivo para manifestar ese grado de alegría, ¿verdad? La verdad es que todos buscamos la felicidad. Esa es nuestra finalidad, pero, secretamente, evaluamos como incorrecto ver a alguien tan feliz.Sin embargo, ¿pensaríamos de la misma manera si estuviéramos en su lugar?
Esa persona se muestra así porque la CAPACIDAD DE SER FELIZ RESIDE EN SI MISMA.
La felicidad es un estado y no un fin.Si usted tiene sus necesidades básicas proporcionadas y no es feliz, indicamos algunas posibles causas de su miseria emocional: cinco creencias que le están manteniendo alejado de su felicidad.Lo que nos aleja de la felicidad
1. La creencia de que la vida es justa
La vida no siempre es justa, pero tampoco es injusta en todas las ocasiones. Es verdad, nada parece suficientemente positivo para estar feliz por eso ... pero nunca habrá algo totalmente positivo ni algo totalmente negativo.
No pierda más tiempo y energía deseando algo imposible: que el mundo sea justo. Mejor invertir sus esfuerzos para hacer de su día algo mejor y ser justo consigo mismo y con los demás.2. La creencia de que el riesgo va a ir mal
Puesto que somos bebés, la vida consiste en arriesgarse.
Aunque no estamos de acuerdo, nos arriesgamos en algún momento de nuestros primeros meses: levantamos y andamos, a pesar de la inseguridad que sentíamos al realizar esa tarea. Sólo así empezamos a dar pasos hacia nuestro futuro.Mantener a sí mismo en el camino fácil le protegerá a corto plazo, pero no le permitirá avanzar en la vida, y eso causará su frustración y apatía a largo plazo. Por otro lado, las personas felices son como el bebé que se levanta y anda:desvían del camino pues, aunque eso sea difícil en ese momento, abrirán un abanico de posibilidades que, lejos de mantenerlas frustradas, ayudará a desarrollarlas, y aumentará sus posibilidades de ser felices. 3. La creencia de que tenemos el control sobre todo
No hay control sobre todo: la vida es un mar de sorpresas, algunas malas, pero otras buenas! No hay motivos para asustarse. No pierdas fuerzas tratando de controlar todo porque nunca sabemos cómo va a suceder algo. Es lo que da sentido a nuestras vidas, no saber lo que viene después y, así, seguir caminando y descubriendo. 4. La creencia de que sufrir es malo. Imagínese que algo no funcionó. Usted va a sufrir, y muchos sufren por usted estar sufriendo. Pero, ¿sabes de una cosa?Sufrir no es malo. La naturaleza es imprevisible, por lo que hay que adaptar para sobrevivir.
Sufrir es normal. ¿No sería alarmante que le sucediera algo y usted no sufriera por eso? Si no sufrimos, caeríamos varias veces en el mismo error, porque no aprenderíamos que tal error trae consecuencias negativas y no avanzamos, empacaríamos y no nos adaptaríamos a los cambios.
5. La creencia de que los demás son mejores que túTodos tenemos virtudes y defectos, pero creemos que los demás son mejores que nosotros ... que tonto! Lo que sucede es un mecanismo puramente adaptativo. Cuanto mejor, mejor nos adaptamos, más fuerte seremos y sobreviviremos. Por eso, nuestro cerebro se fijará en lo que los demás hacen bien para que seamos conscientes de que podríamos hacer ese algo mejor;Conozca su cerebro y engañe, venza el combate!
Como seres humanos, todos tenemos la misma capacidad para experimentar la felicidad, el dolor, la necesidad y la comodidad.
Utilice esas capacidades comunes enfocándose en sus fuerzas y huyendo de la necesidad de aprobación por parte de los demás.Todos nosotros estamos aprobados, cada uno de nuestra manera.