Con certeza, algunas veces, usted ya debe haber visto a muchas parejas discutir varias veces en su día a día, incluso faltando con respecto uno con el otro. Usted concuerda conmigo que, ante semejante situación, nos preguntamos:por qué ellos continúan juntos?
Las cosas no siempre son lo que parecen en una relación. Bien sabemos que: "no todo lo que reluce es oro".
En la intimidad, las personas suelen ser muy poco parecidas a lo que, de hecho, vemos en su día a día. Por ejemplo, si observamos una pareja, la persona que parece ser la más dependiente puede ser la dominante dentro de la relación y cumplir el papel contrario de lo que percibimos como espectadores. Es verdad que cuando tenemos problemas o percibimos situaciones negativas, nuestra parte racional reacciona evitando tales experiencias simplemente para sobrevivir a eso. Pero actualmente ya son muchos los estudios que demuestran la rabia
y el miedocomo una forma de vínculo.Incluso, teniendo en cuenta los resultados de estas investigaciones, podemos afirmar que, en algunas ocasiones, la rabiapuede ser más poderosa para mantener parejas infelices juntos que la pasión propiamente dicha.
Cuando tenemos una relación, buscamos características que la constituyan como una experiencia armoniosa, pero este argumento sentimental no siempre es obtenido. A partir del supuesto de que una relación difícil es construida y mantenida por ambas partes, hoy les contaremos cuáles son las 7 razones que llevan a las parejas infelices a continuar juntos. 1. El sentimiento de culpa. Hay personas que permanecen en una relación por la presencia del sentimiento de culpa que surgiría si dejan al compañero / a. Normalmente, suelen ser situaciones que despiertan un sentimiento de pena en relación a la otra persona.2. Juegos de poder.Cuando existe, en una relación, una distribución desigual de trabajos o de cualquier otra situación dentro de la misma, la persona que no es tan activa dentro de la relación suele depender del otro, dejándose llevar emocionalmente. En esta situación, la persona en cuestión se sentirá perdida sin el otro, lo que mantiene el papel de mando dentro de la relación. 3. No expresar lo que verdaderamente siente o piensa.
A pesar de la imagen que las otras personas nos pasan, no todo lo que vemos es "lo que parece".Tome la prueba de ello con usted mismo.
Usted se acordará de una infinidad de momentos en los que se ha sentido muy enfermo o emocionalmente devastado, pero ha mantenido la compostura y neutralidadpara no perder su empleo, una relación o simplemente para no perjudicar a la persona que usted tiene, o ha tenido a su lado, oa usted mismo.
Si en una relación no estamos sintiendo y actuando de acuerdo con nuestros valores, o nuestro socio no está actuando positivamente, podemos sentirnos frustrados y con rabia de nosotros mismos, simplemente por consentir tal situación. Cuando esta rabia está proyectada para nuestro socio, podemos sentirnos aliviados temporalmente, pero después de esa explosión volveremos a actuar como de costumbre, generando así un círculo vicioso. Así,
ocultar, disimular o no decir lo que pensamos o sentimos nos hará mantener una relación, a veces, "irreal". 4. Las parejas llegan a supuestos "acuerdos", pero no los expresan formalmente. Hacer acuerdos que se subenten entre dos personas, pero que nunca llegan a ser conversados formalmente, puede hacer que la relación peligrosa cuando el propósito de estos acuerdos silenciosos es permitir y / o evitar hábitos como la infidelidad, el exceso de gastos, un mal comportamiento ... Por eso, es fundamental, una buena comunicación verbal y no verbal en una relación, con ambos siendo transparentes y verdaderos en todo momento. 5. Si hay malos tratos, es porque hay una persona dentro de la relación que cree merecerlos. En la mayoría de los casos, los adultos son participantes voluntarios en las relaciones, sin importar que sean poco saludables, ya que
pueden existir recompensas ocultas para ambas partes . Las razones más comunes para justificarse continuar en una relación así, suele ser los hijos, las finanzas, el tiempo invertido, la vergüenza de separarse, la religión de ambos ... De la misma forma, si nos encontramos en una relación en la que existen los malos tratos emocionales, puede ser que uno de los miembros pueda creer que merece ser maltratado.
Esta situación podría cambiar si este individuo internalizara el mensaje de que no merece sufrir un abuso emocional por parte de su pareja.Con esta nueva forma de sentir y pensar, aprenderá a decir no y desarrollará una autoestima sana, necesaria para superar la situación. Al final, esta persona será consciente de que ninguna situación negativa, malentendido o daño cometido, justifica su infelicidad. 6. Esperanzas y tiempo.
Las cosas pueden cambiar, es cierto, pero no suele ser lo habitual, principalmente cuando la situación de malestar ya existe por mucho tiempo. Hay muchas personas que prefieren apegarse a las esperanzas y al paso del tiempo, como justificación para continuar su relación. Pero la verdad es que si ellas llevan mucho tiempo siendo infelices, el cambio será más complicado si no hay un compromiso para alterar la situación y una actitud activa de ambas partes para que eso ocurra. 7. Sentimiento de miedo e inseguridad frente a la posibilidad de dejar la relación. En muchas ocasiones, las personas deciden mantener la relación que ellas ya tienen, aunque no sean felices, por temor a tomar una decisión equivocada o por la inseguridad de no saber cómo será la vida sin el otro.Las personas emocionalmente sanos saben emplear positivamente sus propias herramientas.
Cuando es consciente de todas las características y situaciones emocionales que pueden llevarnos a arrastrar y mantener una relación negativa, podemos ser capaces de superar el miedo de estar solos con nuestras propias frustraciones e inseguridades. Conocerlo es estar consciente de sus barreras y, lo mejor, sentirse libre para amar y ser amado.