Esta semana tuve el placer de participar en un gran evento benéfico en mi ciudad. Entre otras cosas, hubo dos desfiles de moda de dos empresas de la ciudad. No con modelos como se ve en la TV. Pero con personas comunes de todas las edades. Los niños sonríe y se divertían mientras los padres vibraban. Las mujeres entre 20 y 30 años estaban tensas, preocupadas por las fotos, en estar impecablemente perfectas.
Pero dos de las modelos del primer desfile llamaron la atención (no sólo la mía): dos mujeres por encima de los 40 con una energía y vitalidad que contagia a todos alrededor. Una de ellas conozco más cerca. Y veo en ella una alegría de vivir, una sonrisa en el rostro, una voluntad de ayudar a las personas ... Aquella persona que se acerca y te deja feliz, entiende? Que pasa una energía de paz que, en el mundo de hoy, es difícil encontrar. De las más simples, las más refinadas. Siempre alegre, servicial, dispuesta y agradecida.
Y esta es la palabra: Gratitud. Estar siempre celebrando la vida y mirando las cosas con los ojos del bien. Y eso no se aprende de un día para otro. Es obvio. Pero, vale la pena intentarlo.
Como el desfile fue en el comienzo del evento, dio tiempo de observar todo alrededor. Muchos estaban allí con este espíritu de gratitud. Comprendían el motivo real del proyecto. Otras sólo quisieran algunas fotos con políticos y personas de la "alta sociedad" para entonar o hacer negocios.
Trabajé en el evento para una amiga, que estaba allí con el mismo objetivo que yo: las entidades que serían beneficiadas merecían lo mejor de nosotros. Un hotel muy importante en la ciudad cedió el espacio para el evento: limpio, organizado y ordenado. Diversas latas de basura estaban dispersas por el lugar.
Una hora salí para fumar (sí, todavía mantengo este pésimo hábito - por el momento) y vi gente comprando botellas carísimas de bebida y vaciando en las plantas, comiendo y esparciendo platos, vasos, servilletas ... todo por el suelo.
Definitivamente, el dinero no viene junto con educación y respeto al prójimo
Mi madre es de la época en que se cargaba en el coche una bolsa de basura para colocarlo hasta llegar a casa y jugar en el lugar correcto. Y pasó eso para mí. Si no encuentra basura, lleve hasta la punta de cigarrillo enrollada en el papel en la bolsa para volcar en la basura cuando llegue a casa. Y siempre fuimos muy simples (financieramente). Sin embargo, las personas que estaban allí entendiendo el real motivo del proyecto volcar sus basuras en los lugares correctos y hasta recogían el de los otros.
Sin criticar, reclamar o decir nada. Sólo lo hacían. Para estas personas, así como para mí, la amiga a la que fui a ayudar y la persona que cité arriba, es algo muy normal. Siempre fui medio aversión a eventos "chiques", aunque cariños. Justamente porque antiguamente sólo veía el lado malo. Yo sólo conseguía ver a los maleducados, los hipócritas, los ingratos ... Yo era un juez del mundo. Pésimo hábito.
Yo no entendía que independientemente del motivo de estar allí, el dinero que pagaron para estar allí va para una buena causa. Asociaciones de mujeres y niños en estado crítico, mujeres con cáncer ... Y al final hice mi parte estando allí y dando lo mejor de mí. Y esta es la responsabilidad de cada uno de nosotros. Dar lo mejor de ti. Si su vecino no lo hace, es un asunto de él y él tendrá que lidiar con eso un día. Seamos más como la señora que cité anteriormente: sonríe al mundo, ayude a las personas, llene de cosas buenas, cercándose de buenas personas. Sea agradecido por ser así y por tener la posibilidad y el discernimiento de mejorar cada día.
Es lo que el Universo te espera. Que seas feliz y dé lo mejor de ti. Si la gente no reconoce lo que usted hace por ellas, usted descubrirá que eso no importa. Usted sabe lo que hizo y otras puertas se abrirán. Sea agradecido por su día, salud, oportunidades ... Sea agradecido por el amor que recibe de las personas que están a su alrededor. Esparza amor y gratitud. No espere nada a cambio. Hazlo por ti. Y quien está a su alrededor le acompañará. Tenga certeza.
Así es como el mundo se convertirá en un lugar mejor. Una persona que cambia a la vez. No importa el tiempo que lleve. No pierda la esperanza. Sea la energía que ilumina todo a su alrededor, independientemente de la edad que tenga. Olvidar aquella historia de que sólo los jóvenes tienen energía, luz ... sólo es una cosa conquistada con el tiempo. La edad, definitivamente, está en la cabeza.
Sea luz por donde pasar! Namaste