Dicen que intentar olvidar es recordar para siempre, y esto es verdad. Pretender librarse de sus sentimientos es una aventura que puede terminar en tragedia. Un suicidio emocional, una verdadera locura ...
La verdad es que tratar de olvidar un pensamiento es diferente de olvidar un sentimiento o una emoción. Para controlar los pensamientos es preciso acostumbrarnos a pensar en otras cosas, imaginar o decir "PARE" cuando algo venga a la mente. Sin embargo, tratar de suprimir nuestras emociones y lo que implican es negar la realidad y todos los recuerdos que nos enfrentan. En otras palabras,
intentar inhibir o deshacerse de lo que sentimos revela todo lo que queremos evitar. "Ya no la amo, es verdad, pero tal vez la ame.El amor es tan corto y el olvido tan largo.
Porque en noches como ésta la sostengo en mis brazos, mi alma no se contenta de haberla perdido.
- Pablo Neruda -
Querer olvidar es engañar a sí mismo
Muchas veces, querer olvidar es alimentar inconscientemente un vínculo con esa persona
. Sin embargo, usted puede estar tratando de olvidar una sensación, no una persona.
Cada emoción y cada recuerdo nos hace mirar nuestro yo más profundo, aquel que renunciamos y evitamos mirar el día a día. Por eso es tan complicado entenderlo; nuestra conciencia y nuestras palabras no pueden expresar lo que el alma siente.
Estas situaciones exigen un intenso trabajo interior que seguramente nos incomodará. Debemos ser conscientes de que podemos tener una mezcla de sentimientos, podemos enfadarnos con nosotros mismos y con el mundo, sentir rabia, celos y todo tipo de emociones que nuestra moral condena.
Esto es normal, así que tenemos que tratar de asumir estas emociones con naturalidad.
No podemos hacer que nuestra mente evite nuestras emociones; es algo realmente imposible y peligroso.Lo que debemos hacer es aprender a manejar nuestras emociones, nuestros comportamientos, y promover nuestro bienestar. Trabajar en este sentido no significa tratar de sentirse bien a cualquier costo, pero tratar de entender lo que nuestro corazón siente.
Es decir, es imposible huir del sufrimiento y la única manera por la cual podemos hacer que desaparezca es vivenciarlo hasta que se agota ... Compartir Recordar lo que nos marcó
No intente evitar el dolor, la solución es intentar comprender para recordar sin dolor.
El corazón se vuelve sano solamente cuando conseguimos guardar en la memoria los buenos momentos. Lo que duele no es recordar aquellos momentos, sino la pérdida de alguien querido o de un sentimiento que desapareció y ya no podemos encontrar.
Teniendo en cuenta el esfuerzo psicológico para comprender que la gente viene y va, vamos a percibir que lo importante son nuestros recuerdos, pues eso siempre permanecerá con nosotros.
Cuando sea capaz de entender esto, percibiremos que son nuestras experiencias que moldean nuestra vida y nos transforman en personas mejores. Cada uno de nuestros sentimientos se convierte en una parte importante de nosotros mismos que no podemos borrar, pues todo lo que no queremos perder quedará para siempre en nuestro corazón.
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