La vida es una fantástica colección de instantes. Por eso, la actitud de aprovecharlos y hacerlos bonitos, la habilidad de enriquecer momentos, es una de las que más nos acerca a nuestro mejor estado de ser, en paz y con bienestar. Durante la mayor parte de nuestra vida estamos corriendo detrás del reloj, por obligaciones y actividades que a menudo son estresantes. Estas circunstancias de vida, si no se gestionan adecuadamente, acaban provocando un malestar generalizado. Las insatisfacciones crónicas, el estrés en el trabajo y la ansiedad nos llevan a un estado de ánimo que jamás elegiríamos para nosotros. Cualquier persona puede pasar por momentos de estrés, sentirse agonizada, cansada y también triste. Las situaciones que deberían ser puntuales en nuestra vida son cada vez más comunes y frecuentes. De algún modo ese estrés nos envuelve y termina siendo una trampa de la que no logramos escapar. Esto llega a tal punto que, un hermoso día, levantamos de la cama y pensamos:
"¿Cómo es eso de aprovechar la vida, cómo podemos enriquecer nuestros momentos diarios?". Estos momentos que, por ser pequeños y que suceden de manera muy natural, a menudo se dejan de lado y olvidamos la receta para hacerlos más sabrosos. ¿En qué consiste en enriquecer momentos? Enriquecer momentos es una habilidad de regulación emocional desarrollada por diferentes enfoques de la psicología
, como la Psicología Positiva o la Terapia Comportamental Dialéctica para el Trastorno de Personalidad Limítrofe de la psicóloga Marsha M. Linehan.
Decimos que es una habilidad de regulación emocional porque abarca todos los comportamientos y pensamientos dirigidos alobjetivo de potenciar el bienestar y reducir las diferentes emociones negativas, como la rabia, la ansiedad o la frustración. Hacer el momento más hermoso es una habilidad muy útil para enfrentar las obligaciones y situaciones cotidianas a partir de un enfoque más positivo.
¿Cómo hacer que las obligaciones cotidianas sean más agradables? 1. Vivir el momento presenteEn primer lugar, enriquecer momentos haciéndolos más bonitos es una habilidad que requiere una capacidad al menos mínima para distanciarnos del pasado y del futuro.
En ese punto, la práctica del
Mindfulness
puede ayudarle. Se trata de ser capaz de parar durante un minuto, observar el entorno y aceptar lo que está viviendo cuando está haciendo sus actividades cotidianas. Ser capaz de vivir el momento presente es el primer paso para recuperar esa receta perdida de la que estábamos hablando. En esos momentos en que puedas parar y prestar atención, intenta conocer en profundidad tus sentimientos, su entorno y las sensaciones que te traen los movimientos que realizas o los estímulos que inciden sobre ti. Como ejemplo, podemos pensar en el agua de la ducha golpeando la piel durante el baño. 2. Cambios ... ¿quién dijo miedo? La influencia del ambiente sobre nuestro comportamiento y nuestras emociones ya ha sido ampliamente estudiada por la Psicología Ambiental. Para entender esta influencia, primero debemos preguntarnos y tratar de entender cómo está organizado el ambiente en que realizamos nuestras tareas y obligaciones. Diferentes estudios explican cómo los ambientes más organizados, con luz natural y objetos familiares que nos recuerdan de buenos momentos, potencian nuestro bienestar y mejoran nuestro rendimiento.
"El propósito de la vida es ser vivido, saborear la experiencia al máximo, para llegar con interés y sin miedo a nuevas y ricas experiencias."
-Eleanor Roosevelt-
Introducir o poner al alcance de su campo de visión imágenes que recuerden sus metas o sus éxitos también ayudará a enriquecer momentos y potenciar la sensación de bienestar. También podemos colocar en lugares llamativos frases motivadoras o frases que recuerden por qué estar donde estamos, el motivo de un día de haber elegido ese camino que estamos siguiendo. De este modo, usted mejorará su motivación y aumentará su capacidad de esforzarse y su persistencia. Por otro lado, es útil también sacar de su ambiente objetivos o fotos que lo empujan hacia sentimientos negativos. Si detectamos objetivos que no nos transmiten buenas sensaciones, o incluso que traen mal recuerdos, nuestro bienestar disminuye. Tomarlos de nuestro campo visual va a potenciar el bienestar.
Es necesario siempre recordar que dedicarse a tareas rutinarias y aburrentes será más fácil si las mismas se realizan en un ambiente que le invita a quedarse, que transmite serenidad , en un lugar en el que usted se sienta en casa.
3. Haga sus instrumentos de trabajo o de estudio con los mejores materiales Puede ser muy positivo cuidar de los materiales o instrumentos por medio de los cuales usted trabaja:
este es un detalle de cariño que podemos tener con nosotros mismos.
Si usted tiene que estudiar, es mejor hacerlo con anotaciones que sean agradables a la vista, coloridas o con imágenes claras y nítidas. Trabajar o estudiar a partir de los mejores materiales posibles mejorará su rendimiento y su motivación. Hay personas que piensan que invertir en eso es una pérdida de tiempo, pero en realidad es exactamente lo contrario. Por otro lado, si usted ha pasado de la fase de los estudios y está trabajando, su trabajo debe ser hecho con los materiales que más le guste. Asegúrese de contar con todos los elementos necesarios para poder desarrollar sus tareas de manera eficaz.Tener los materiales que nos agradan y que hacen nuestro trabajo más fácil ayuda a enfocar y ser positivo
en relación al trabajo que se debe hacer.
Por ejemplo, si utiliza la agenda, las carpetas y el equipo, pueden hacer que la tarea sea más placentera si son bonitos, si, al mirarlos, tiene ganas de usarlos. Para ello, se puede colocar una imagen motivadora en el fondo de pantalla. Una imagen que le trae emociones positivas. Si usted puede escuchar música mientras trabaja, no tenga dudas, haga esto! La música mejora el rendimiento y el estado de ánimo, potenciando la creatividad. "Cuando usted está entusiasmado con lo que está haciendo, siente la energía positiva. ¡Es muy simple! " -Paulo Coelho-
4. Cuide cada detalle de sus hábitos cotidianos Las comidas suelen crear momentos de interacción muy agradables y por eso son oportunidades estupendas para convertirse en momentos ricos. Para potenciar su bienestar general, puede ser muy útil cuidar de los detalles a la hora de las comidas. Hacer un plato que te parezca atractivo, una mesa bien colocada, colocar flores o velas sobre la mesa ... Aunque los detalles sean sólo para ti, harás que disfrutes al máximo cada instante.
Todos estos pequeños detalles son percibidos por su mente, y le permiten ir llenando la mochila de emociones positivas y motivación. En ese sentido,
enriquecer momentos permitirá tener el control sobre su rutina. Además, es verdad que cuidar de cada detalle requiere un cierto esfuerzo, pero es un esfuerzo que vale la pena porque tiene un impacto positivo directo tanto en usted mismo y en las personas que lo rodean.