Cuando un alumno comienza a ser más viejo y la escuela avanza en la enseñanza, el factor motivacional se convierte en uno de los aspectos más importantes del aprendizaje. Los alumnos desmotivados que suelen ser más relajados con los quehaceres también suelen tener otros comportamientos que ya serían complicados de lidiar por sí mismos. Por eso es bastante importante intervenir por lo menos en un comportamiento e intentar fomentar la motivación en los estudiantes. Con el desarrollo social, algunos comportamientos van siendo asimilados, así como valores y reglas que van formando la personalidad de la persona. Ella adquiere un modo de pensar, de sentir y de actuar que son más individuales que en la primera infancia y al inicio de la educación. En esta fase, la rebeldía, la apatía, la falta de perspectiva, el aislamiento o la fuga son factores de riesgo a ser tenidos en cuenta,
que pueden ser mejor combatidos si la motivación también se fomenta en paralelo. Fomentar la motivación en los estudiantes es la clave para mejorar su desarrollo y la calidad de su rendimiento.Compartir
¿Qué tipo de motivación puede ser promovida?La motivación es el ingrediente esencial que toda persona debe tener para obtener éxito y alcanzar sus metas.
Esta es la condición básica, el factor que impulsa la acción
. Tradicionalmente, los autores distinguen dos tipos de motivación: La motivación intrínseca es la que promueve la realización de acciones que son interesantes por sí mismas para la persona. Son aquellas que generan satisfacción por el simple hecho de estar siendo hechas.La motivación extrínseca es más utilitarista.
- Se refiere a la ejecución de actividades que se utilizan como medio o vehículo para conquistar otros objetivos, o evitar algún castigo. Por ejemplo, se habla de la motivación extrínseca cuando un niño hace su tarea lengua portuguesa y la literatura para poder salir a jugar al fútbol con sus amigos. Si conseguimos que el estudiante lea porque encuentra realmente interesante lo que está estudiando y se siente, por eso, realizado, habremos alcanzado el éxito en la búsqueda de la motivación intrínseca pretendida. Pero ese tipo de motivación no es algo generalizado. Por eso la internalización es tan importante. Es un proceso de asimilación de comportamientos, valores y reglas que se van desarrollando, en una relación con lo social, desde la infancia.
- Es un proceso que es impulsado por el ambiente, y que pasa a ser propio de la persona, de forma autónoma. La motivación intrínseca es, por lo tanto, el objetivo al que queremos llegar con la educación
. Es, por sí misma, un objeto de estudio, pues podemos investigar cómo incentivar su desarrollo. El rendimiento escolar y la motivación en los estudiantes
Good y Brophy (1983) afirman que el concepto de motivación, cuando se aplica al contexto escolar, hace referencia principalmente a dos aspectos:El grado de participación del alumno en el aula.
La perseverancia del alumno en las tareas, independientemente de la actividad propuesta.
Los autores concluyen que
- existe una correlación positiva de intensidad moderada (0,34 estadísticamente) entre la motivación y el rendimiento.
- Se trata de una relación bidireccional, pues tanto la motivación influye en el rendimiento como también ocurre la vía inversa. De esta forma, un estudiante motivado tendrá un buen rendimiento, lo que, a su vez, también aumentará la motivación del estudiante, manteniéndola a un nivel alto.
Es interesante destacar que existen diferencias significativas en el rendimiento de los niños en familias con más de un hijo. Un niño puede mostrar una motivación mayor que su hermano o hermana en relación con la misma tarea. El lado positivo es que los que tienen dificultades, como por ejemplo una alteración lingüística, pueden ser bastante motivados a la hora de seguir una meta, precisamente por el ejemplo del desempeño del otro y la voluntad de superación. El lado negativo es que los niños con una inteligencia bastante alta pueden acomodarse con un desempeño mediano que estén obteniendo si están en el lado más destacado de la gangorra de los hermanos.
Teniendo esto en cuenta, es muy probable que los estudiantes con altas capacidades que se conforman, a lo largo del desarrollo, con resultados mediocres, se conviertan en casos de fracaso escolar cuando avanzan en la educación, como en la enseñanza superior. La razón es que estos niños no adquieren e interiorizan el valor del esfuerzo. La percepción termina siendo que las exigencias de las tareas, conforme se vuelven más complejas, son mucho más elevadas que sus capacidades de aprendizaje. Fomento de la motivación intrínseca en el estudiante
El principal problema ocurre cuando los responsables no invierten la dedicación suficiente para fomentar la motivación en los estudiantes. Y es aún peor si la familia no percibe esa situación. ¿Cómo conseguir que un adolescente tenga motivación intrínseca si nunca fue entrenado para ello? Es necesario hacer que los responsables y el afectado perciban lo que significa ese concepto y las consecuencias de no ser motivado. Esto es porque la motivación es un comportamiento y se podría generar una modificación de pensamiento si hubiera una intervención. En este contexto, es posible y deseable, por ejemplo, generar una perspectiva de desarrollar la habilidad de proyección mental de ejecución y alcance de éxito.
Porque si no hay pensamiento dirigido a la motivación, y ni hábito, se debe crear esa necesidad.
Además, es necesario concientizar a los padres oa los responsables de la educación de la existencia de otros patrones, diferentes de los usados hasta entonces. Entre ellos es posible fomentar la autorregulación, haciendo al niño responsable de sus decisiones.
Programa de motivación de McClelland El psicólogo estadounidense David McClelland creó un programa de motivación para aulas que contempla los siguientes puntos: La socialización del gusto por la novedad
El fomento de la curiosidad en el niño Fomento de la autonomía personal, búsqueda de resultados concretos en tareas con metas
Aprendizaje de autoevaluación
Responsabilidad Insistencia de los padres hacia niveles elevados de rendimiento y su evaluación explícita
- Predileción por la educación independiente
- Además, las teorías de motivación existentes coinciden en afirmar que
- el valor que el mismo el estudiante se da a sí mismo en ese contexto es afectado por variables motivacionales afectivas.
- Entre ellas, el rendimiento escolar o su propia percepción de esfuerzo y habilidades.
- Los alumnos con una alta motivación para el éxito (con esfuerzo para destacar, luchar por el éxito y alcanzar sus objetivos predefinidos) consideran que sus triunfos se deben a la osadía y coraje personal. Ellos tienen una mayor autoestima que los niños con una baja motivación.
- Con todas estas consecuencias, es evidente la importancia de fomentar la motivación en los estudiantes desde el inicio de la educación escolar.