Probablemente usted ya escuchó el términoataque de pánico, o sabe de algún compañero de trabajo, amigo o familiar que sufre de esas crisis. Pero, ¿qué pasa con aquellos que presencian alguno de esos momentos? Cuando vemos a alguien sufriendo palpitaciones, espasmos o temblores, sudando, sofocando, presionando el abdomen y el pecho, sintiendo náuseas, mareos o en confusión; ¿Cómo podemos ayudar?Veamos algunos consejos muy simples para saber cómo ayudar a alguien que está sufriendo un ataque de pánico.
1) Si no sabía que la persona tenía esos ataques de vez en cuando, si es la primera vez que sucede, o si la persona sufre otros problemas médicos, como el asma y la diabetes, llame a un servicio de emergencia.
2) Un acontecimiento como éste suele ser muy angustiante para quien desea ayudar.Respire profundamente y trate de mantener la calma, tanto por usted como para poder transmitirla a la persona.Mantenga un tono de voz pausado, caliente y firme, acompañado de un lenguaje corporal que no presente movimientos bruscos.
3) Evite dar órdenes a la persona y pregunte si hay algún medicamento que suele tomar durante las crisis. 4)
No discuta la irracionalidad del miedo con comentarios como "Es sólo su imaginación", porque la persona vive la situación como si fuera real , amenazadora e incontrolable, y si se siente incomprendida la dejará aún más angustiada. Si ella insiste en que morir, diga que la crisis durará sólo un momento y luego pasará. Aunque quiera cogerla por el brazo, para que ella se dé cuenta de que le importa, es mejor no tocarla.5) La persona puede quedar paralizada o huir, puede incluso encerrarse en una habitación. Puede, quizás, sentarse en el suelo y dejar de moverse. En caso de que esto ocurra, pasado un tiempo, pida que se apoye en algo e intente levantarse. 6) Aléjate a continuar, diciendo que va muy bien a cada paso que da.
Haga preguntas simples, como cuál es el color del cuarto donde está, como son los azulejos de las paredes, de modo que vaya transfiriendo la atención de su miedo a otras cosas.
7) Escúchala, déjala hablar y pida que se relaje. Es importante que ella vuelva a ganar control sobre sí misma.8) Ayúdala a concentrarse en la respiración, inspirando y expirando lentamente, mientras usted cuenta las respiraciones en voz alta. Primero cada 2 segundos, después cada 3, hasta llegar a 5. Esto va a ralentizar el ritmo cardíaco de la persona.
9) Invite a que se refresca; humedecer la nuca, el cuello y la cara alivia bastante, especialmente cuando hay un sudor excesivo.
10) Acompañe todo el tiempo, hasta que el ataque de pánico termine.
Si no está con sus remedios y usted se da cuenta de que no pudo relajarse, incluso después de 15 minutos, llame a su médico. Muchas veces, llevar a una persona que está pasando por un ataque de pánico al hospital puede dejarla aún más angustiada; por lo que lo mejor es preguntar si quiere ir.
Diferentes estudios afirman que combinar la medicación con alguna terapia, enfocada en modificar conductas personales, ayuda bastante. Así, el paciente aprende técnicas sobre cómo enfrentar el ataque de pánico, que permiten identificar pensamientos automáticos, alarmas falsas y reconocer que, a pesar de ser desagradables, no representan un peligro real. Este método es muy útil en la ayuda, ya que se acerca a una respuesta más profunda a la siguiente pregunta: ¿cómo ayudar a alguien que está sufriendo un ataque de pánico?