Todos los días se abre un abanico de opciones delante de nosotros y necesitamos tomar la mejor decisión. Estas opciones todavía parecen suaves y son totalmente automáticas, como por ejemplo: abrir los ojos, levantar, cepillarse los dientes, tomar el desayuno; son decisiones casi impositivas, pero qué sucede cuando las elecciones implican renuncias grandes? ¿Sabe aquel momento en que su corazón quisiera pulsar en dos lugares al mismo tiempo?
¿La decisión que tome puede acarrear grandes cambios en su vida para siempre?
Estas elecciones llegan llenas de ansiedad, miedo, culpa, dudas, y lo que podría ser el comienzo de su luna de miel con usted misma pasa a ser una gran pesadilla, y de repente usted se ve perdida, en medio de un bosque oscuro , sin conseguir dar un paso adelante o atrás.
El hecho de que toda elección requiere una renuncia es innegable, entonces ¿cómo usted puede tomar la decisión convencida de su verdad y de que está viviendo lo mejor?
Primero, muchas veces, aunque su corazón quiera mucho, usted acaba tomando muchas de las decisiones que necesita basadas en las opiniones ajenas, en la reacción de felicidad y tristeza del otro, siendo así la primera actitud es: se disipa de su. ego y analice lo que realmente quiere. Existe una voz interior que habla con usted todo el tiempo, y esa voz no usa palabras, ella es su intuición y ella le guiará hacia el mejor camino. Mientras usted se quita, preguntando a todas las personas lo que creen que usted debe hacer, y así escuchar todo tipo de opiniones, usted será más confuso, ansioso y triste. Entonces, si hoy usted necesita tomar una decisión importante, elija un lugar tranquilo, escuche su corazón pulsar y deje venir las sensaciones al pensar en la toma de decisiones.
Busque conocer mejor, saber lo que realmente le gusta, lo que hace vibrar su corazón de emoción, de lo que no le gusta ni oír hablar. Autoconocimiento es un gran revelador de destino, que facilita su acceso al camino de los sueños, y así usted puede enumerar los puntos para optar por la mejor elección.
Una vez hecha la elección, no mire hacia atrás, no viva de "si" "debería" "podría", todo lo que no fue. Entonces si has hecho tu elección y estás ahora en este nuevo camino, aprovecha para recoger todas las flores que el camino te dé. No cree escenarios que no existen, ni hipótesis de cómo usted se hubiera hecho de la otra manera. El pasado en el pasado está, y es allí donde debe quedarse.
Cada vez que la vida presente a ti dos caminos, acepte este desafío con amor. Este es el signo de la abundancia en su vida, las infinitas posibilidades de que todo puede suceder, entonces acoja ese proceso con amorosidad y entienda que sea cual sea la decisión que usted tome, ella ya estaba marcada en el rumbo de su destino para que usted llegaba exactamente donde necesita llegar. Cada paso, cada persona, cada minuto está bien sincronizado con el cronómetro de Dios, entonces nada puede ir mal, porque hasta lo incorrecto se vuelve correcto cuando estamos dispuestos a vivir nuestra mejor versión!
Haga su elección!