Escribo porque no tengo otra manera de besarlo

Escribo porque siento su falta, porque usted se fue y sólo dejó un mensaje como despedida. Yo escribo porque ya no sé si alguna vez me amó, porque necesito que las palabras en el papel me digan cómo me siento. Yo escribo porque en este momento, no tengo otra manera de besarlo.

Escribir sobre lo que pensamos es lo mismo que hablar de lo que sentimos. Esto nos ayuda a reflexionar sobre muchos hechos que nos causan sufrimiento y encontrar la curación. El amor es uno de esos hechos que nos trae muchas tristezas y alegrías. "Todas las cosas deben ser dichas cuando llega el momento correcto, de lo contrario, continúan encadenadas para siempre dentro de nosotros".

-Haruki Murakani-CompartirDicen que se necesita un tiempo de seis meses a un año para superar una ruptura, el final de una novela. Pero en realidad, todavía quiero besarlo, porque hay personas que son difíciles de olvidar. En esos casos, lo que debemos hacer es utilizar todas nuestras armas emocionales para superar la tristeza, y una de ellas es la escritura.

La escritura como una forma de curar las heridas Como Walter Risa dice en su "Guía práctica para no sufrir de amor",

"No todo desamor es malo y no todo amor es sostenible". Esto porque muchas veces, una ruptura es liberador. La incertidumbre sobre el amor del otro es mucho peor que la certeza de un desamor.

A medida que crecimos y nos volvemos adultos, aprendemos lo que queremos y lo que no queremos del amor. Sin embargo, una ruptura es un rompimiento y muchas veces deja marcas invisibles. En estos casos, es hora de utilizar nuestra inteligencia emocional. "Yo diré lo que siento y hablaré sobre mí hasta la última página, y no pediré perdón". • La inteligencia emocional, un concepto creado por Daniel Goleman en los años 90, es nuestra capacidad de identificar, comprender, expresar y regular nuestras emociones y las de los demás de forma eficaz y productiva. Una de las formas de realizar esa identificación y comprensión es a través de la escritura.Escribir a la mano, dejando que ella se mueva y muestre a través de las palabras cada uno de nuestros sentimientos, sabiendo que nadie nos va a juzgar, puede ayudarnos a curar las heridas.

Las palabras escritas que curan las heridas físicasEn la revista "Psychosomatic Medice" se publicó hace algunos años un estudio realizado por la psicóloga Elisabeth Broadbent, titulado "La escritura expresiva y la cicatrización de heridas en personas mayores". En este estudio, afirma que la escritura funciona como un cicatrizante para historias tristes o sentimientos profundos de la persona.

El experimento fue realizado con 49 participantes entre 64 y 97 años, que fueron sometidos a una biopsia que dejó una herida en los brazos. Ellos fueron invitados a escribir veinte minutos al día y cada cuatro o cinco días su herida era fotografiada hasta la curación total.La mitad de la gente escribía sobre sus experiencias traumáticas y emociones y la otra mitad escribía sobre su día a día sin mencionar los sentimientos.

Después de once días, el 76% del primer grupo tenía la herida cicatrizada contra el 42% del segundo grupo.

La razón de este resultado, según este estudio, es que el estrés y la depresión están asociados a una cicatrización más lenta de las heridas " . (...) "Hasta ahora sólo se ha investigado cómo reducir el estrés en personas mayores a través del ejercicio físico". (...) "Una alternativa viable puede ser la escritura expresiva, que es corta, fácil de administrar y barata".

Cuando se trata de amor, hay una herida invisible que daña el corazón, y ese dolor puede ser aliviado por la escritura. Por lo tanto,

se recomienda dejar ir, escribir sin pensar y dejar que las palabras fluyan de su cerebro al papel, liberando poco a poco su tristeza.

Yo escribo porque no puedo besarloEscribo para decir que te amo y que nunca te olvidaré, para besarlo porque ya no puedo llegar cerca de tus labios. Escribo porque hay dos platos y dos vasos sobre la mesa y su olor está impregnado en mis sábanas. Yo escribo porque al escribir cada palabra derramo una lágrima que diluye la tinta, pero también su recuerdo.

"Escribir es mi manera de golpear y abrazar. ¿Por qué escribir si no es para juntar los pedazos? " -Eduardo Galeano-

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