Todos ya vivimos situaciones que nos dejaron tan enfadados que sentimos como si la rabia aumentase sin poder ser remediada.¿Quién no notó cómo una simple chispa encendía un fuego que se extendía por todo nuestro ser?Lo peor es que esta furia incontrolable nos llevó a decir y hacer cosas de las que nos arrepentimos profundamente más tarde. El hecho es que no nos sentimos mal sólo por nosotros mismos, sino también por las personas que nos rodean. Sucede que muchas veces lastimamos a nuestros seres queridos con nuestra rabia.
Esto sucede incluso cuando no hay relación con la causa de nuestra irritación. En realidad, esas personas a menudo reciben nuestra ira por tratar de calmarnos."La rabia es como el fuego; no se puede borrar si no está en la primera chispa. Después es tarde. "-Giovanni Papini-
¿Qué es la rabia y cuáles son las implicaciones para aquellos que la sienten? Vamos a empezar por el principio: ¿qué es la rabia? La rabia es una emoción que produce sentimientos desagradables para quien sufre de ella.
Ella hace que el cuerpo pase de un estado de tranquilidad a un estado de gran activación, para responder a través de la defensa o del ataque.
Solíamos sentirla sobre todo en situaciones interpersonales, es decir, cuando nos estamos relacionando con otras personas. Si, en una de esas situaciones, evaluamos que la persona nos está atrapando de forma injustificada e intencionada a alcanzar una meta valiosa, surge la rabia.En este momento, sentimos que nuestros intereses están siendo amenazados y que debemos actuar para defenderlos.
El hecho es que la rabia generalmente comienza con niveles relativamente bajos de incomodidad. Pero si no gestionamos esta irritación inicial de forma eficaz, puede ir aumentando hasta explotar.
Ya se ha demostrado quepresentar una tendencia elevada para responder con rabia en condiciones distintas influye en la salud de forma notable.En primer lugar, genera un conjunto de situaciones desagradables para quien la siente. Pero no es sólo eso, ese es también un indicador de la presencia de trastornos afectivos, como la depresión.
Además, es una variable que se debe tener en cuenta en el tratamiento y la rehabilitación de diversos problemas neuropsicológicos, como aquellos asociados con el daño cerebral traumático o con el alcoholismo, como demuestra un estudio de la Universidad Camilo José Cela. Por otro lado, esto influye en varios problemas físicos.Algunos ejemplos son los trastornos cardiovasculares, el cáncer, las úlceras, el tabaquismo, etc.Cuando estoy invadido por la ira, ¿cómo las personas a mi alrededor lo perciben? La rabia influye no sólo en nuestra propia salud, tanto física como mental, sino que también tiene consecuencias en nuestro ambiente social.
Mirando por el otro punto de vista, ¿cómo nos sentimos cuando alguien se enfada y proyecta su ira hacia nosotros?La respuesta puede variar en función de una serie de circunstancias: si realmente somos nosotros los "culpables" justificados de su rabia o no; las estrategias que la otra persona utilizó para informarnos; se ha actuado de forma medianamente tranquila o si, por el contrario, ha desarrollado conductas altamente agresivas en relación a nosotros. Estos, entre otros factores, van a influenciar las interpretaciones que hacemos de la situación y, en consecuencia, las emociones que van a aparecer.
Con base en eso, tenemos que tener en mente que cuanto más descontrolada es la rabia y cuando los comportamientos provocativos son más agresivos, el otro se sentirá más atacado.Esto hará que la persona también esté irritada y tenga dificultad para controlar. Todos podemos imaginar el resultado de esta situación, ¿no es así? ¿Quién nunca tuvo una discusión por una razón que tanto usted y la otra persona consideraría boba y que terminó en una batalla con heridas serias?
Este tipo de situaciones pueden generar un número considerable de emociones negativas en la otra persona. Comenzando por la tristeza, puede pasar a la propia irritación, incomprensión o impotencia. También puede generar sentimientos de rechazo en relación a la persona que reaccionó con nosotros. De hecho, si actuamos de manera irritada con los demás de forma habitual, podemos hacer que se alejen cada vez más y con que quedamos cada vez más solos. "Una persona que quiere venganza guarda sus heridas abiertas."-Sir Francis Bacon-
¿Existe relación entre mi forma de ser y la rabia que siento? La rabia, además de una emoción, puede ser considerada como una tendencia estable para actuar con irritación en diferentes situaciones. Ella puede formar parte de nuestra forma de ser. Esto quiere decir que hay personas cuya forma de ser es más colérica que la de otras personas.Estos individuos responden con mayores niveles de rabia frente a un mayor número de condiciones y con una mayor activación del cuerpo.
Se observan similitudes con las personas con baja predisposición a la irritabilidad en relación al tipo de situación que les genera rabia. Sin embargo, las diferencias están en el hecho de quereaccionan con una mayor intensidad y con mayor frecuencia con rabia en su vida diaria ante condiciones de perturbación.
Se ha descubierto que ciertas características de la personalidad influyen en el proceso de aparición de la rabia:Hostilidad. La persona hostil presenta actitudes negativas hacia y con los demás, teniendo una tendencia mayor a experimentar rabia ya responder con comportamientos agresivos con el objetivo de lastimar a los demás.
Extroversión. Las personas introvertidas informan que sienten más rabia que las extrovertidas.
Neuroticismo.
Este concepto se refiere a la inestabilidad emocional que la persona puede presentar. Estas personas con un mayor neuroticismo experimentan con más frecuencia sentimientos de rabia. También tienen una mayor tendencia a responder de forma agresiva.Autoestima y narcisismo.Los individuos que tienen una autoestima más baja, combinada con una personalidad narcisista, son más propensos a responder de forma irascible. Además, presentan un menor control a la hora de expresar esa emoción.
Como vimos,la rabia prolongada tiene muchas implicaciones negativas en nuestra vida.Esto hace que sea importante controlarla cuando sale la primera chispa, ya que una vez que el fuego se esparcirá, será más difícil contenerlo. Por otro lado, una vez que el fuego ha desaparecido y bajar de nuevo nuestro nivel de activación, puede surgir una gama de emociones negativas. Entonces nos damos cuenta de las consecuencias de las conductas que realizamos, así como del daño que infringimos a nuestros seres queridos.
Piense que si usted enfrenta la rabia cuando ella es pequeña, si no deja que ella se mezcle con el ego o el orgullo, después no va a tener que curar las heridas grandes y profundas.