Así hablaba Confucio siglos atrás. Sin embargo, con el paso del tiempo, se descubrió quela lectura es mucho más que una simple fuente de conocimiento. Filósofos, escritores, científicos y psicólogos, entre otros especialistas, ya escribieron sobre las magnitudes de la lectura. Años de estudio y prueba después de la prueba, los expertos nos han mostrado que la lectura es mucho más que el acceso a un mundo meramente informativo, divertido o imaginativo.
Es un acto que enaltece su alma. ¿Quieres descubrir por qué? La lectura según Ángel Gabilondo Tal vez usted conozca a Ángel Gabilondo como un ex ministro de Educación del Gobierno de España, pero mucho antes de eso, fue y es un renombrado profesor de Filosofía en la Universidad Autónoma de Madrid. Para Gabilondo,
la lectura es tan importante como comer o mantener nuestro cuerpo en forma.
De acuerdo con el filósofo, una buena selección de libros es tan importante como una sabia elección alimentaria. Ángel Gabilondo cree que la lectura es tan importante como vivir. El acto de leer crea, recrea, y aún es capaz de transformar la realidad. Tanto es así que los griegos y romanos la consideraban una actividad que debía hacerse todos los días. Como la lectura es saludable, por Emili Teixidor
Emili Teixidor es un autor literario que escribió obras como La lectura y la vida
. Para este escritor,
como el pan que alimenta nuestro cuerpo, las letras hacen lo mismo con el cerebro. Cada palabra escrita da vida a nuestra mente.Además, él estima otros beneficios quizás más prosaicos, pero también necesarios. Por ejemplo, la lectura favorece las capacidades de concentración, ya que parece ser una actividad en la que nuestra mente encuentra un campo fértil para desarrollarse. Tejedor estima que la lectura, al exigir concentración, mejora las habilidades humanas de supervivencia.
Nuestros antepasados cazadores necesitaban toda su atención a los detalles para poder comer. Y el acto de leer facilitaría el mantenimiento de esta atención.
La lectura y la ciencia Sin embargo, también existen estudios que exploraron a fondo los efectos de la lectura. Ellos descubrieron que la lectura activa el hemisferio izquierdo del cerebro, haciendo que algunas áreas alcancen una activación intensa.
Esto sucede tan naturalmente que afecta el desarrollo intelectual, existiendo más neuronas en las mentes que leen, según afirma Stanislas Dehaene, un neurólogo del Collège de France.
Otros estudios demuestran que las personas analfabetas escuchan peor que las que leen. Esto proviene de la investigación llevada a cabo por el neurocientífico Alexandre Castro-Caldas, la Universidad Católica de Portugal.
Al leer, nuestro cerebro activa las mismas áreas que serían activadas si estuviéramos haciendo la acción literaria en el mundo real. O sea, él recrea lo que usted piensa. Esto sigue el estudio de la psicóloga Nicole K. Speer, de la Universidad de Washington. De esta forma, las acciones registradas en el texto se integran en el conocimiento personal con un peso similar al de una experiencia pasada. Además, el psicólogo Raymond Mar, de la Universidad de Toronto, demostró que las personas lectoras son más empáticas. En realidad, aquellos que consumen novelas todavía aumentan esa habilidad social en comparación con aquellos que se enfocan en literatura especializada o no leen nada.
Otros estudios sobre la lectura Dentro de la Universidad de Oxford se realizó un estudio cuya conclusión es impresionante.
Aquellas personas que leen por puro placer tienden a tener más éxito profesional. En realidad, aquellos que leyeron durante su adolescencia aumentan sus posibilidades en la madurez. Otro detalle singular está asociado a las enfermedades neurodegenerativas.
La lectura es un excelente ejercicio para retardar y prevenir el avance de la enfermedad de Alzheimer.
Así lo dice el Dr. Pablo Martínez-Lage, de la Sociedad Española de Neurología. Si todas estas razones no pareciera suficiente para usted, simplemente lea. La lectura enaltece el alma, entretiene, divierte y crea mundos imaginarios llenos de pasión y encanto.
Entonces, si usted no lo hace por su bienestar psicológico y físico, lea por el simple hecho de divertirse. Es tan simple.