en la falta de una buena explicación para el rompimiento de las parejas, podemos inventar una que nos proteja.Cada pareja es un mundo distinto y con muchas particularidades.
Peculiaridades que cambian con el tiempo, tratando de adaptarse a una realidad en mutación. Una realidad en la que los socios pueden mentir sin querer el uno al otro, de forma gradual y sin percibir los cambios, hasta un día se den cuenta de que la persona con quien duermen todas las noches es un extraño.Motivos por los cuales las parejas se separan
El número de divorcios actualmente es enorme.
Además, a todas esas separaciones habría que sumar las que son realizadas por parejas que no estaban casadas. Es un dato que esconde muchos sentimientos y detrás del cual encontramos una variedad de razones. A veces, por miedo a la reacción de nuestro compañero, nos escondimos detrás de frases banales como "El problema no es usted, soy yo", "Ya no estoy enamorado / a" o "Me enamoré de otra persona". Pero en el fondoexisten motivos que no nos atrevemos a poner en palabras.
Continúe leyendo este artículo para ver algunos de ellos.Ausencia de comunicaciónTanto en relaciones amorosas que acaban de empezar como en relaciones duraderas, es bastante común que exista un gran temor de expresar los sentimientos. Un miedo que aparece principalmente cuando uno de los compañeros empieza a sentir miedo de ser vulnerable. Así, surge la sensación de que comunicar su dolor o su alegría transmite informaciones a su "socio-rival"
para que él gane todas las disputas.
Por otro lado, tenemos miedo de lastimar o de ser heridos al decir la verdad. De esta forma, al mantener silencio sobre lo que necesitamos, evitamos que empiece la guerra de afrenta y dolor. Así, vamos acumulando y acumulando y acumulando ... y todo el mundo sabe lo que sucede cuando ya no cabe nada más. Mostrar indiferencia
Walter Riso argumenta en su "Guía práctica para no sufrir en el amor" que una de las mejores maneras de acabar con el amor es la indiferencia. Yo diría que más que el amor, la indiferencia es el ácido más corrosivo que puede existir en cualquier tipo de relación. Ella manda un mensaje claro: "No me importa contigo. No me importa lo que usted piensa, lo que siente o lo que hace.Además,
la indiferencia muchas veces se mezcla con el orgullo.
¿Por qué? Piense, ¿qué suele hacer cuando alguien te muestra indiferencia? La reacción más normal es que usted también se muestre indiferente. Es decir, "si usted no habla conmigo, tampoco voy a hablar con usted". Por eso, la indiferencia no sólo es peligrosa por sí sola, como también nos hace ser muy obstinados.Falta de compromisoTenemos que entender esto en un contexto social. La mayoría de los jóvenes, cada vez más, tienen la sensación de que la vida es muy larga, de que aún queda mucho para que ellos vivan, para experimentar antes de elegir a la persona con la que van a compartir el resto de su vida. Por eso, la falta de compromiso en el siglo XXI está ligada al miedo a perder experiencias, al hecho de tener que dar explicaciones muy temprano.
En las personas con una edad más avanzada, la situación es más compleja y los miedos suelen ser otros. Muchas de esas personas pueden haber pasado por relaciones anteriores en las que se sintieron traicionadas, después de montar toda su vida en torno a la relación. Ellos temen el compromiso porque alguien ya la traicionó antes. Por otro lado, hay otras personas que ya empiezan una nueva relación con hijos mayores o menores, por lo que las decisiones que tienen que tomar ya no afectan directamente a ellas, sino también a sus hijos, si es una elección equivocada.Una tercera persona
El amor no es necesariamente eterno, ni tampoco fijo. Así como todo lo que sucede a nuestro alrededor cambia, nuestros sentimientos también cambian. En realidad, el propio amor cambia. Ya no se trata de amar más o menos, sino con diferentes matices.
Así, muchas parejas terminan la relación porque tenían que hacerlo, porque se quedaron agotados.Ellos fueron terriblemente bellos, sin perder un pingo de verdad por no ser eternos, y murieron para dar lugar a otros. Comprender eso es poner una venta para no ver ni asumir nuestra propia naturaleza.Las razones por las cuales el amor termina según la ciencia
Varios científicos de la Universidad de Western en Ontario (Canadá) seleccionaron a 6.500 personas (tanto hombres como mujeres) para participar en un estudio y descubrir las verdaderas razones por las que el amor entre las parejas acaba .El estudio consistió en hacer varias entrevistas a cada persona del grupo seleccionado. Finalmente, los investigadores llegaron a la conclusión de que las principales razones por las que las parejas suelen terminar son las siguientes:
La falta de sentido del humor
El humor es esencial en cualquier ámbito de nuestra vida, sea personal, profesional y, por supuesto, en las relaciones amorosas.
Una persona que nos hace reír y que tiene sentido del humor nos conquista, nos divierte y nos hace sentir plenos y felices.
Aprender a sonreír y compartir con nuestro socio puede unirnos mucho,mientras que ser muy serio y perder el sentido del humor puede afectar nuestra relación de forma negativa. Una persona que está siempre triste o seria nos transmite negatividad.La falta de confianza
Otra de las razones por las que las parejas terminan, de acuerdo con el estudio realizado, es la falta de confianza.
Pueden ocurrir muchas cosas en una relación, pero si descubrimos que la otra persona no fue honesta o ha mentido sobre algo, perdemos pronto la confianza.
Una vez perdida la confianza en nuestro socio, es muy complicado recuperarla,
pues va a existir mucho temor y una gran cantidad de dudas entre la pareja. Superar esta situación es un obstáculo muy duro.
La falta de intimidadLa falta de intimidad con nuestro socio es una de las razones por las que las parejas suelen terminar la relación, ya que el hecho de no querer tener momentos de intimidad con nuestro socio es una forma de indiferencia, y la indiferencia, como dijimos anteriormente, acaba poco a poco con cualquier relación.
Dentro de la intimidad, en el caso de las parejas englobamos las relaciones sexuales. En el inicio de las relaciones el deseo sexual suele ser fuerte, pero llega un momento en el que la rutina se instala y este deseo es afectado. Es afectado por la prisa, por las preocupaciones y por las otras ilusiones que compiten con la persona amada.