¿Qué son los nootrópicos y cómo potencian nuestra inteligencia?

Los nootrópicos también se conocen como "fármacos inteligentes" por los beneficios que prometen, que no son pocos: aumentar el rendimiento mental y actuar como potencializadores cognitivos. Su popularidad en los últimos años ha disparado a tal punto que miles de personas ya incluyen en su desayuno esa píldora dorada con la que ser más productivo en el trabajo. Para contextualizar un poco los nootrópicos, basta recordar la serie "Limitless". En ella, Bradley Cooper tomaba una droga experimental llamada "NZT-48". Después de consumirla, su mundo se volvía más vívido, sus sentidos se agudizaban y su potencial cognitivo pasaba al 200%, a tal punto que era capaz de aprender varios idiomas con fluidez, ser un genio en las finanzas en Wall Street o recordar todo lo que hubiera visto, leído y oído.

"Supuestamente, el cerebro humano es algo parecido a un cuaderno que la gente compra en la papelería: poco mecanismo y muchas hojas en blanco"

-Alan Turing-
Algo así nos permitiría - aparentemente - ser más productivos que Stephen King escribiendo libros, memorizar un documento a la mitad del tiempo o activar las estructuras neurológicas capaces de despertar el genio musical o matemático que existe en cada uno de nosotros. Y digo "aparentemente" porque la realidad es otra,

una realidad sin duda más adecuada, más limitada y menos reluciente pero aún así, interesante. La industria farmacéutica, por ejemplo, invierte cada año cantidades millonarias en el desarrollo de nuevos nootrópicos, y lo hace por una razón muy simple:

la demanda se multiplica. La presión profesional es cada vez más elevada, sabemos de ello, hay que estar alerta, hay que mejorar la concentración, ser más ágiles mentalmente, más creativos, más productivos ... Todo el mundo desea dar más de sí mismo sin tener que recurrir a sustancias peligrosas y es ahí donde entran en acción los nootrópicos o las "drogas inteligentes".

Actualmente se sabe que estos fármacos son muy consumidos por los universitarios, pilotos militares, programadores de informática o creativos de empresas de publicidad que buscan en ellos un recurso aparentemente inocuo con el que expandir su mente, enfocar la atención y dar el mejor de sí mismo en sus objetivos.

Pero ... los nootrópicos realmente funcionan? Los nootrópicos: un descubrimiento accidental que dio lugar a "drogas inteligentes". Hay quien llama a los nootrópicos de "la droga del futuro", un producto de una sociedad acelerada que desea ir más allá de sus propias posibilidades. Sin embargo, este término incomoda, no agrada y no es aceptado porque - en general - no tienen efectos colaterales y no son "psicoestimulantes". Por eso se clasifican de una forma mucho más inspiradora: "potencializadores cognitivos". Por otro lado, hay quienes también se aventuran a decir que los nootrópicos serán muy pronto nuestro menú evolucionista, y que gracias a ellos llevaremos nuestro desarrollo cerebral a otro nivel.

Por más curioso que parezca, este es justamente el propósito de grandes empresas y conocidas entidades. De hecho, Silicon Valley, capital mundial de la industria tecnológica, ya lleva años trabajando con los nootrópicos, a punto de descubrir nuevos mecanismos por medio de los cuales intensificar sus propiedades, sus efectos, su duración y hasta su aplicación.

No sólo servir para mejorar la atención y la creatividad, pero también es posible vivenciar sueños lúcidos o alcanzar un nivel de relajación similar al que se alcanza después de varios años de meditación. Sin embargo, sabemos que para muchos de nuestros lectores algunos datos pueden parecer pura ciencia-ficción y por eso hay que ir paso a paso. Veamos primero su origen.

De los inductores del sueño a los activadores de la atención Estamos en los años 60 y, en un laboratorio belga llamado "Union Chimique Belge", el neurofarmacólogo rumano Corneliu Giurgea trabaja en la síntesis de diversos compuestos químicos con un propósito muy específico: inducir el sueño. Sin embargo,

acabó descubriendo un tipo de molécula muy especial que le permitió crear el primer nootrópico de la historia

: el Piracetam. Esta droga, lejos de reducir la excitabilidad neurológica y propiciar el descanso, hacía en realidad justamente lo contrario: poner la mente en alerta y mejorar funciones cognitivas como la memoria y la concentración.

Esto era posible gracias a la modulación química de los neurotransmisores como la acetilcolina y el glutamato, y además, sin efectos colaterales muy adversos.

El Piracetam de Corneliu Giurgea no tardó en ser comercializado, permitiendo que poco a poco llegaran otras propuestas, como el Oxiracetam, el Aniracetam, el Pramiracetam y el Fenylpiracetam.

El mecanismo de acción de los nootrópicos varía entre ellos. Sin embargo,

la mayoría de ellos tienen efectos en la vasodilatación, es decir, mejoran el flujo sanguíneo hacia el cerebro , proporcionando más oxígeno, más nutrientes y glucosa, la fuente de energía esencial que el cerebro utiliza para garantizar largos períodos de concentración .De forma similar, y como dato curioso para reflexionar, se sabe que el Valle del Silicio trabaja con los nootrópicos combinándolos con el biohacking, es decir, buscan "hackear" ciertas funciones cerebrales a través de diversos químicos para potenciar así las funciones del pensamiento.

  • Parece que la puerta para el salto evolutivo del cerebro humano está empezando a abrir su manija ...
  • ¿Cuáles son los efectos de los nootrópicos? ¿Son tan beneficiosos como parecen?

El objetivo de las industrias farmacéuticas con los nootrópicos es doble. Por un lado, y como ya sabemos, la búsqueda de la mejora de los procesos cognitivos básicos, algo que en la mayoría de los casos, logran hacer. El segundo aspecto es que funcionen como neuroprotectores y que sus posibles efectos secundarios sean mínimos, por no decir inexistentes. Pero uno de los mayores problemas que los especialistas de la salud están descubriendo es que tanto los estudiantes universitarios como los empresarios y demás personas con un estilo de vida caracterizado por el estrés,adquieren los nootrópicos a través de Internet, sin preocuparse por su procedencia o, lo que es peor, la forma en que deben ser consumidos.

Veamos un ejemplo. La cafeína es un nootrópico natural, así como los ácidos grasos omega 3. Si consumir 10 tazas de café en una noche, es muy probable que tenga cefaleas, mareos y presión arterial alta. De la misma manera, el estudiante que compra un nootrópico por Internet sin conocer su composición y forma de administración, con el único fin de pasar la prueba de después de mañana, posiblemente sentirá antes los efectos adversos de esa mejora en la atención y la memoria.

Por lo tanto, es necesario saber que los nootrópicos ayudan, pero no son un milagro.

Además, estos beneficios se percibir si se consumen adecuadamente y con orientación médica. Por otro lado, y por curiosidad, cabe señalar que los laboratorios rusos crearon una nueva familia de nootrópicos derivados todos ellos de la corticotropina

, la hormona del estrés y los agonistas de los receptores GABA como el Phenibut o el Tolibut. Estos fármacos tienen últimamente una gran demanda por su efecto ansiolítico y reductor del estrés, pero cabe decir que sus efectos colaterales son sin duda los más peligrosos del mercado, ya que a largo plazo provocan dependencia.

Cómo usar los nootrópicos Los expertos dicen que hay algunos cuidados básicos que hay que seguir a la hora de consumir algún tipo de nootrópico:

Encuentre el nootrópico que mejor se adapte a sus necesidades

Es necesario consultar a un especialista que oriente a cada persona sobre las opciones que existen en el mercado. Cada persona tiene un tipo de neuroquímica

, y en general, es común comenzar con dosis muy bajas, experimentando unos y otros hasta encontrar el adecuado. Al sentir cualquier tipo de malestar, como cefaleas o mareos, es necesario interrumpir inmediatamente el uso de este tipo de nootrópico.De forma similar, es necesario recordar que estos fármacos no son de acción inmediata.

El cerebro debe acostumbrarse a ellos; de hecho, su efecto comenzará a ser notado después de algunos días o semanas.

Sólo funcionan si van acompañados de una dieta adecuada, evitando el sedentarismo

  • Si queremos modular nuestra química cerebral para que funcione al mejor nivel,
  • será necesario obtener una serie de nutrientes adecuados para activar el mecanismo de acción de estas drogas inteligentes. Por lo tanto, una dieta equilibrada rica en frutas frescas, vegetales, ácidos grasos omega 3 y omega 6 es fundamental para que los nootrópicos puedan actuar.
  • De forma similar, si llevamos una vida sedentaria tendremos un metabolismo más lento, menos eficiente y, además, la función hepática tampoco conseguirá procesar de la mejor forma los componentes de los nootrópicos.La actividad física y la alimentación variada y pobre en grasas saturadas es fundamental para que estos fármacos cumplan su objetivo.
  • "La verdadera señal de inteligencia no es el conocimiento, sino la imaginación."
  • -Albert Einstein- Tipos de nootrópicos Es importante señalar aquí que

no todos los nootrópicos son fármacos.

Muchos de ellos no están sujetos a recetas médicas porque tienen componentes naturales, y porque es muy fácil encontrarlos en las tiendas de productos naturales. A pesar de eso, antes de comenzar a consumir estimulantes cognoscitivos es siempre mejor consultar a un especialista. Para ello, es necesario definir cuál es el objetivo, porque como vimos, la oferta de nootrópicos es bastante amplia, y todo indica que será aún mayor en los próximos años.

  • Nootrópicos para mejorar el estado de ánimo.

Nootrópicos para mejorar la concentración.

Nootrópicos para combatir la ansiedad.
Nootrópicos para mejorar la memoria.

Nootrópicos para mejorar el descanso, la recuperación y el sueño.

Nootrópicos con enfoque anti-edad o longevidad. Para concluir, cabe recordar sólo que los nootrópicos no son suplementos alimenticios . No es recomendable hacer uso de los mismos de forma liviana, especialmente porque cada vez la oferta es más amplia y la eficacia de los mismos menos confiables. Por lo tanto, aun sabiendo que todos deseamos optimizar las propias capacidades cognitivas para adecuarse a las demandas actuales del mercado de trabajo, será siempre mejor buscar antes otras estrategias, otros caminos. Sin embargo, seguiremos atentos a la evolución de estos potencializadores cognitivos y de su impacto en nuestro futuro. Referencias bibliográficas:

Ruiz Franco, J. (2005). Drogas Inteligentes. Editorial Paidotribo.

  • Evan Brand (2016) The Everything Guide To Nootropics. Berkley Books