¿De dónde viene el placer por el miedo en las personas? Podemos analizar las palabras del célebre investigador y psicólogo Arthur Westermayr, "desde el comienzo del pensamiento humano, el miedo ha sido considerado con desprecio". Si esta afirmación es correcta, ¿por qué tanta gente le gusta ver películas de terror y sentir miedo?Tal vez no exista una respuesta genuina y totalmente cierta para entender el placer que tantas personas encuentran en ese tipo de sentimiento. Sin embargo, vamos a tratar de localizar la raíz de esta singular emoción, que suele ser enemiga pero de vez en cuando es solicitada. Vamos a empezar!
Películas de terror: el placer del miedo controlado
Vamos a empezar refiriendo al testimonio de la socióloga Margee Kerr, que también trabaja de forma permanente en una atracción llamada de la Casa del Terror
en Pittsburgh, Estados Unidos. Para ella, el secreto está en control. ¿A qué se refiere Kerr con el control? La respuesta es simple.Siempre que el cerebro humano vive el miedo en un ambiente que realmente está exento de peligro, la reacción fisiológica puede ser divertida, de ahí viene el placer que se siente en ese tipo de situación.A esta declaración, Kerr añade que el hecho de superar una situación de estrés aparente elevado crea en nuestro cerebro un pozo de autoconfianza y una sensación positiva envidiable. Un cóctel que permite a nuestro cerebro aprovecharse de hechos que a priori deberían ser negativos. ¿Qué es el miedo en la verdad?
¿Sabemos lo que es el miedo? Una corriente psicológica comúnmente aceptada lo explica como una serie de emociones relacionadas con un proceso psicológico que señala posibles peligros, estrés o situaciones singularmente negativas.En realidad el miedo es
una serie de sistemas que se activan de manera fisiológica y conductual en un sentido concreto tras pasar por una situación única y amenazadora de forma muy rápida. Después de una primera vista, nuestro cerebro ya tiene conciencia del tipo de miedo que despertó en nosotros. Obviamente, si nuestro cerebro interpreta el tipo de miedo que enfrentamos como una situación controlada, puede ser agradable
. Es decir, películas de terror, una atracción de un evento, una fiesta de Halloween ...
Ahora, si nuestro cerebro siente un miedo relacionado con una situación no controlada, como la posible muerte de un ser querido, un asalto, etc., esté seguro de que no habrá ningún placer verdadero y el terror real y descontrolado puede tomar posesión de nuestra mente y de nuestro cuerpo. Condicionamiento para sentir miedo¿Es posible que una persona se condicione para sentir miedo?
Si analizamos el experimento "Conditioned Emotional Reactions" que Rosalie Raynery y John Watson realizaron en 1920, podemos concluir que sí.En el ejemplo citado, los investigadores crearon una fobia en un niño de aproximadamente nueve meses de edad
. Publicaron el estudio en que describían paso a paso todo el proceso a través del cual condicionaron el miedo. Se trata de un experimento que actualmente no sería aceptado por el hecho de que nadie tiene el derecho de condicionar esa emoción en otra persona, y menos aún en un menor de edad. Esto quiere decir que nuestros cerebros pueden estar perfectamente condicionados para experimentar el miedo ante un estímulo que entienden como anticipador de una situación amenazadora. Este miedo, repetimos, cuando es experimentado dentro de un cuadro de control, es extraordinariamente gratificante para muchas personas. Por eso hay tantas que gustan de las películas de terror.Reacciones psicológicas ante el miedo
Las reacciones positivas o negativas al miedo pueden ser comprendidas a partir de las reacciones psicológicas que se producen en nuestro cerebro. Según los estímulos recibidos, somos capaces de interpretar y entender esa emoción.
Dentro de nuestro sistema límbico, en la profundidad de nuestro lobo temporal, encontramos la amígdala. Esta estructura subcortical es la encargada de delimitar si se trata de un "miedo-placer" o de un "miedo-real".
Ante una situación en que se produce esa emoción, podemos reaccionar de diferentes formas. Tal vez correr, atacar, huiremos ... sea como sea, nuestro cuerpo reaccionará liberando adrenalina y elevando el nivel de cortisol y azúcar en la sangre. Esa enorme descarga de nuestro organismo es positiva? En realidad, si usted está en un entorno controlado y su mente está segura de que no existe peligro alguno, será un gran placer para todo el cuerpo, que aprovechará para consumir las sustancias que liberó sin interferencia de ninguna amenaza real.
Así que usted ya sabe: si todo está bajo control, el placer del miedo puede ser una herramienta más para mejorar su humor. Una manera de permitir que su cerebro realice un banquete de sustancias sin que nada, ni nadie, el irrita. Claro, hasta el próximo momento en que el monstruo aparezca.