Actualmente, las divergencias en el matrimonio son los problemas que más se repiten en los consultorios de los psicólogos. La infidelidad, los celos, la dependencia emocional y la difícil convivencia, acaban con la relación. Si miramos hacia atrás, percibimos que eso no sucedía hace algunos años. Antiguamente, a pesar de las adversidades, el matrimonio duró toda una vida.
Esto sucedía porque la mujer dependía casi totalmente del hombre; se cuidaba de la casa, de los hijos y no trabajaba fuera. Afortunadamente, hoy, las cosas son muy diferentes. El problema es que esto llevó a muchas parejas a terminar sus relaciones, y los problemas psicológicos derivados de esta ruptura son muy comunes. Según algunos estudios, actualmente el matrimonio no dura más de diez años
, debido a la correría del día a día ya la falta de comunicación.
Aunque no existe una boda perfecta, damos algunos consejos que pueden ayudarle en esta tarea.No exija nada
Si desea un matrimonio duradero, sea tolerante con su pareja.
A veces, somos muy exigentes con el otro, como si fuésemos su dueño. En realidad, nadie es dueño de nadie.
Tenga conciencia de que somos humanos y cometemos muchos errores. Trate de ser comprensivo y empático con su compañero, no exija que sea como usted desea. Esto no quiere decir que no podemos sugerir que se comporte de otra manera; pero
existe una gran diferencia entre sugerir y exigir.
El diálogo es esencial para que todo fluya mejor, y para que el otro acepte cambiar lo que no nos gusta. A nadie le gusta ser presionado, pero si estamos convencidos de que el cambio es necesario, podemos cambiar nuestro punto de vista. Olvidar el pasado
El pasado ya no existe, por lo que no tiene sentido sufrir por algo que ya ha terminado.
Si no podemos olvidar lo que pasó, todo lo que obtendremos será dolor y sufrimiento.
Si tu pareja ha sido infiel y te has perdonado, olvídate. Recuerde que cometió un error, pero usted optó por perdonar, así que no tiene sentido quedarse quitando el pasado. Olvídate y sigue adelante. No olvides que el otro es tu pareja
Muchas veces, nos olvidamos de que elegimos a esa persona para amar y vivir juntos por el resto de la vida.
Nos dejamos llevar por los impulsos, por las emociones negativas, y acabamos discutiendo y hasta ofendiendo al otro.
No olvide que los insultos pueden ofender a la persona amada, y si esto sucede regularmente, puede acabar con su matrimonio. No grite, no sea irresistible ; un diálogo tranquilo y cariñoso logra armonizar su relación.
Juega con los problemas cotidianos
Los cabellos en el desagüe de la ducha, la pasta de dientes abierta o el armario desordenado no se convertirán en un gran problema si tenemos buen humor.Muchas veces dramatizamos problemas que no tienen la menor importancia
y la convivencia puede volverse insoportable.
Es verdad que puede ser incómodo tratar con la tapa del inodoro levantado, pero no deje que esto acabe en una seria discusión.
Simplemente no vale la pena! Hay muchas otras cosas que cada uno de ustedes hace bien. Recuerde el inicio del artículo: no exija, sugiera. Después de todo, fue usted mismo quien eligió a su pareja.
No sean dependientes
La convivencia en el matrimonio puede ser muy divertida y agradable. Sorprenda a su pareja con algo que usted sabe que le gusta y le dejará feliz. No hay que ser en una fecha especial, lo importante es que haga una buena cena, llévelo para ver un show del grupo que más le gusta, aunque no sea su preferido, etc. A veces, podemos ceder un poco y participar en las actividades que nuestro socio le gusta.
Podemos incluso experimentar. ¿Quién sabe no empezamos a gustar también? Por otro lado, no debemos depender de nuestro socio para hacer lo que nos gusta.
Si nos gustan cosas diferentes, podemos divertirnos por separado.
Construir un buen matrimonio es fácil y, al mismo tiempo, difícil. Muchas veces nos dejamos llevar por los sentimientos negativos y perdemos el respeto, la honestidad y la empatía. Practique estos cinco consejos diariamente y su boda va a evolucionar positivamente.