Las frases de Isabel Allende son cargadas de pasión y compromiso, como sus libros y como ella misma.Son legados repletos de superación personal, amor y resistencia férrea, lo mismo que aprendemos con sus personajes maravillosos, como en 'Eva Luna' o 'La Casa de los Espíritus'.
Además del campo literario, el trabajo personal de Isabel Allende es igualmente notable. Esta reconocida autora chilena es una gran activista social y una de las feministas más inspiradoras de América Latina. De la misma forma, debemos enfatizar también su carisma como ponente y comunicadora, unas de las personas con una mente muy clara y un corazón literario dedicado a inspirar orientar y concientizar. Periodista, narradora infatigable y siempre comprometida con la voz de las mujeres, sin duda llama la atención el tejido psicológico excepcional subyacente en la mayoría de sus obras.
Casi siempre nos inclinamos en sus libros por simple curiosidad y acabamos conmovidos en pocas páginas por su humanidad sincera, donde el humor, la tragedia, la fantasía y la propia vida en toda su desnudez nos abrazan por completo para dejarnos no sólo una, pero decenas de lecciones. Nunca es demasiado recordar alguna de esas frases de Isabel Allende. Aquellas que nos llevan de vuelta a sus libros y, a su vez, imprimen un aprendizaje o una pincelada maravillosa sobre la que reflexionar.Frases de Isabel Allende
Isabel Allende
posee una gran variedad de libros publicados, los cuales alcanzaron 65 millones de copias vendidas, traducidas a más de 30 idiomas. Cada uno de nosotros tendrá nuestros favoritos, pero cada uno de ellos es valioso a su manera, duro en su esencia e inspirador por sus personajes, siempre tan humanos, tan mágicos, pero a su vez cercanos.
Las frases de Isabel Allende que vamos a analizar a continuación son extractos de su bibliografía, pequeñas muestras que nos invitan a una reflexión. 1. La muerte es el olvido "La muerte no existe, la gente sólo muere cuando nos olvidan; si puedo recordarme, estaré siempre contigo.
-Eva Luna-
Isabel Allende enfrentó la experiencia de la muerte en más de una ocasión.
Fue especialmente difícil, por ejemplo, la pérdida de su hija Paula. Decir adiós no es fácil para nadie, perder a alguien que amamos es una prueba para la cual nadie está preparado y, sin embargo, pasamos por eso, reaciamente, con rabia y dolor inmenso. Sin embargo, además del dolor en sí, todavía tenemos una breve respiración, una luz a partir de la cual mantenemos viva la persona amada: nuestro recuerdo.
Este impulso vital es lo que nos conecta con quien ya no está presente, permitiendo que permanezca entre nosotros, en la otra mitad de nuestros corazones diariamente, cada segundo para que, al respirar, dona un poco menos. Siempre, a través de nuestra imaginación y de nuestra memoria, tenemos la oportunidad de resucitar.
2. Inspiración y creatividad "Usted me explicó que de la quietud nace la inspiración, y del movimiento surge la creatividad".
-El Amante Japonés- Esta es una de las frases más bellas de Isabel Allende, y también correctas, del libro "El Amante Japonés". En esta obra conocemos a la joven Alma Velasco y al jardinero japonés Ichimei, dos personajes muy bien perfilados con los que nos sumergimos en una historia interesante en un momento social muy concreto. Así, Ichimei nos adentra, con su oficio y cultura, en este
arte tranquilo y meditado que es la jardinería, donde inspiración y creatividad, movimiento y calma siempre andan de la mano. 3. La felicidad es tener coraje
"Me arrepiento de las dietas, de los platos deliciosos rechazados por la vanidad, tanto como me arrepiento de las situaciones de hacer el amor que dejé pasar por ocuparme con tareas pendientes o por la virtud puritana".
-Afrodite-
Vivir con intensidad no es dejar pasar los días como alguien que pasa las páginas de un libro una a una, sin aprovechar sus líneas, la historia que nos cuenta. Existir es sentir, atreverse, saltar las dietas, experimentar, correr en la lluvia sin miedo de mojarse, amar sin miedo de perder, y vivir sin miedo de que todo termine mañana. Al final, lo que realmente debe darnos miedo es una vida no vivida. 4. Nuestros demonios
"Todos nosotros tenemos demonios en los cantos oscuros del alma, pero si los llevamos a la luz, los demonios disminuyen, se debilitan, se callan y por fin nos dejan en paz". La Isla bajo el Mar-
Esta es otra de las frases más notables e inspiradoras de Isabel Allende. ¿Cómo negarla?
Todos poseemos más de un demonio escondido en algún rincón, impidiendo nuestras voluntades, nuestros sueños, nuestros objetivos.
Son esas áreas todavía inmaduras de nuestro ser que necesitan ser ventiladas, curadas y reparadas. Lejos de dejar estas presencias hacia el destino, debemos ser capaces de lidiar con ellas cara a cara para poder realizarnos como personas. 5. Se responsabilice por sus emociones.
"Cada uno es responsable de sus sentimientos, y la vida no es justa. -La suma de los días-
Más tarde o temprano, se llega a la conclusión simple pero enfática de que la vida no es justa. En momentos es caprichosa, entonces implacable, más tarde nos da un período de perfección para después quitarnos ese pequeño pedazo de nuestro ser que nos da sentido. Así, y en un escenario donde muchas circunstancias están más allá de nuestro control, nos queda asumir la responsabilidad por lo que somos, por lo que sentimos.
La manera en que enfrentamos cada uno de estos problemas determinará la calidad de nuestras vidas.
La responsabilidad emocional es la clave para el equilibrio
y el bienestar en una realidad que es casi siempre compleja. Para concluir, es cierto que hay muchas otras frases de Isabel Allende que deberían aparecer en esa lista. Todos tenemos nuestras favoritas, aquellas que a veces anotamos en los márgenes de nuestras agendas o nuestros cuadernos. Sin embargo, las reflejadas aquí son una pequeña muestra de la humanidad, psicología y delicadeza emocional que caracterizan a esa escritora inolvidable.