Los libros son espejos

Esta frase, del libro "La Sombra del Viento" de Carlos Ruiz Zafón, nos muestra el mundo interno y personal de la lectura. Por eso la diversidad de los gustos literarios. Por ejemplo, las personas empáticas generalmente prefieren las novelas; las personas más impulsivas, la narrativa de guerra, y las personas imaginativas les gusta todo lo que tiene que ver con el género de ficción.Lo que llevamos dentro se refleja en nuestra lectura. Por eso, un mismo libro nunca significará lo mismo para dos personas.

Compartir a los amantes de la lectura no hay nada como llegar a casa y apagarse con un buen libro.Leer abre la puerta a nuevas vidas, nuevas culturas y nuevas formas de sentir.

Además, produce un efecto relajante, ya que reduce los niveles de cortisol liberados por nuestro cerebro. El acto de leer regularmente nos trae grandes beneficios a nivel cognitivo. Mejora nuestra capacidad de abstracción, imaginación, concentración y memoria y nos ayuda a prevenir enfermedades cerebrales degenerativas. Nuestro cerebro funciona como un músculo, y leer el ejercita.

Adquirir el hábito de la lectura es como construir un abrigo contra las vicisitudes de la vida. Un hogar que nos abraza y nos hace sentir que no estamos solos, gracias a lo que otros nos muestran a través de sus historias. Relatos que poco a poco vamos haciendo nuestros. De ahí la afirmación de que los libros son espejos. "No lea, como hacen los niños, para divertirse, o como los ambiciosos, con la finalidad de instrucción. No, lea para vivir ".-Gustave Flaubert-

Los libros son espejos que favorecen nuestra concentración

Cada vez que empezamos a leer, el hemisferio izquierdo de nuestro cerebro se pone en acción, trabajando a toda velocidad para activar diferentes áreas. Según el neurólogo Stanislas Dehaene del Collège de France, la capacidad de lectura modifica el cerebro. Por otro lado, la psicóloga Nicole K. Speer, de la Universidad de Washington, afirma que al leer recreamos lo imaginado, de tal forma que se activan las mismas zonas cerebrales de cuando observamos algo que está sucediendo en la realidad o incluso cuando lo hacemos.
Leer anima a nuestro cerebro a progresar.

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La lectura es uno de los instrumentos, y sin duda los más valiosos, que el cerebro tiene para progresar. Ejercitar la mente a través de la lectura favorece la concentración. A pesar de que, después de su aprendizaje, la lectura parece un proceso que ocurre de manera natural, en el fondo no lo es. El humano lector surgió a partir de su constante lucha contra la distracción, ya que el estado natural del cerebro antes de las letras sin significado es el de la dispersión. Esto ocurre porque, de acuerdo con la psicología evolutiva, no estar alerta podía costar la vida de nuestros antepasados.

Si un cazador no atendía a los estímulos que lo rodeaban, era devorado o moría de hambre por no saber localizar las fuentes de alimentos. Por lo tanto, permanecer inmóvil concentrado en un proceso como la lectura se considera un paso más en nuestra evolución. Sin embargo, la evolución ha permitido darnos momentos de descanso y relajación sin tener que estar alerta para amenazas constantes. Para incentivar la concentración desde la infancia es especialmente importante incentivar el hábito de la lectura.Veinte minutos por día de lectura en voz alta permitirá que los niños empiecen a desarrollar su capacidad de atención y concentración

: dos de las habilidades que más necesitará a lo largo de sus vidas para aumentar su probabilidad de éxito."La lectura trae plenitud al hombre, seguridad al discurso y precisión a la escritura".

-Francis Bacon- La lectura influye en el éxito profesional Durante más de 20 años, un equipo de la Universidad de Oxford analizó los hábitos y actividades de casi 20 mil jóvenes con el propósito de saber qué actividades preveían éxito profesional al cumplir 30 años.

Sólo la lectura pareció tener un impacto significativo en el éxito profesional: ninguna otra práctica, como practicar deportes o ir al cine, tuvo ningún efecto.La capacidad de lectura modifica el cerebro

, afirma el neurólogo Stanislas Dehaene, profesor de Psicología Cognitiva Experimental del Collège de France. Así, hay más masa gris en la cabeza de un lector y más neuronas en los cerebros que leen.
Gustavo Flaubert, escritor francés, no podría ser más preciso cuando dijo que

"la vida debe ser una constante educación"

. El mundo sigue girando, entonces lo mejor para nuestros intereses personales es apostar en el aprendizaje continuo como medio para permanecer actualizados y preparados para las nuevas circunstancias. Así como cuidamos de nosotros mismos y vamos cada vez más a la academia, deberíamos mantener o incentivar el interés por algunos de los procesos cognitivos que también son, de cierta manera, entrenables. "Los libros son espejos donde las palabras son sólo piedras puestas atravesando la orilla de un río. Si están allí es para que podamos llegar al otro margen, el otro margen es lo que importa. -José Saramago-