Los lazos que se establecen entre individuo y grupos fortalecen la competencia adaptativa ante crisis y transiciones vitales. Por eso, el simple hecho de hablar y compartir nuestros problemas con los demás se transforma en un instrumento valioso para reclamar y recibir ayuda
adaptada a nuestras necesidades.Los grupos de apoyo: hablar es un remedio para curar Los grupos de apoyo están formados por personas voluntarias que comparten algún tipo de problema, donde se intercambian relatos y recursos. En el modelo de competencia, los principios que los inspiran son los de cooperación, igualdad y ayuda mutua.
Ante situaciones difíciles, poder crear nuevos lazos sociales permite sustituir o compensar los recursos naturales que cada persona tiene y que tal vez no estén funcionando con eficacia. La búsqueda de un profesional genera un lazo potencial que puede ayudar a fortalecer ciertos aspectos: en este sentido se observó que ciertas personas obtuvieron grandes beneficios simplemente hablando, escuchando y compartiendo su experiencia con otros que pasaron por una situación similar.
En los grupos de apoyo se fomenta un diálogo muy particular: en ellos sus problemas tienen lugar, así como sus fracasos, preocupaciones, sentimientos, etc. Así, los miembros de un grupo se dan cuenta de que sus reacciones son normales y compartidas por otras personas que pasan o pasan por ese punto. De esta forma, suelen emerger creencias y actitudes más positivas, de forma que el nivel de amenaza percibida cae. Por este motivo, podemos comprobar que hablar es un remedio natural.
Preparar el relato de un trauma es un elemento esencial para poder superarloAlgunas personas buscan la terapia cuando un evento o un conjunto sucesivo de eventos son vivenciados como traumáticos, de forma que dejaron un agujero que dificulta que vivan en el momento actual. En estos casos es común que las personas que pasaron por una experiencia así se sintieran incapaces de expresar el evento reprimido en su conciencia subliminal. Una parte del trabajo terapéutico con "personas traumatizadas" requiere expresar el acontecimiento en palabras, construir una narrativa e integrarla en la experiencia dentro de la personalidad.
Definitivamente consiste en reconstruir el significado que se le dio al evento traumático, permitiendo organizar los conceptos y, por lo tanto, los esquemas cognitivos.Los beneficios de hablar más de una lengua Hablar más de un idioma no es sólo positivo a la hora de relacionarse con los demás, pero de esa habilidad también nacen beneficios para su salud mental. Algunas de las ventajas de ser bilingüe o poliglota son las siguientes:
Mejora los niveles de percepción.
Retrasa el deterioro natural de algunas capacidades cognitivas importantes, como la memoria.
Ayuda a procesar ciertas palabras más rápido.Ejerce un efecto protector contra el Alzheimer.Ayuda a tomar decisiones más acertadas
y nos hace más ágiles a la hora de resolver problemas.
El diálogo también es interior Todavía sigue existiendo el mito de que las personas que hablan consigo mismas están un poco locas. Pero en el fondo todos hablamos con nosotros mismos, nos damos palabras de ánimo o nos reprobamos. Así, todo lo que decimos a nosotros mismos repercute directamente en cómo actuamos o en cómo nos sentimos.
- Así como un grupo puede proporcionar poder a sus miembros a través de los mensajes que se comparte allí, nuestros diálogos internos también tienen el poder de influir en nuestro bienestar.
- El psicólogo Rafael Santandreu, en su libro El arte de no amargar la vida, habla de cómo en varias ocasiones el diálogo interno surge de la necesidad de evaluar lo que sucede con nosotros.
- Así, es una buena idea tomar conciencia de la responsabilidad que tenemos sobre nuestras emociones y tratar de debatir con ejemplos aquellas frases que nos decimos y que no son verdades. "No sólo lo que nos sucede nos afecta, sino también lo que decimos sobre lo que nos sucede."
- - Epíteto -
- Así como muchas actividades y acciones naturales nos conducen al bienestar, cómo hacer ejercicio o leer, hablar también es una fuente potencial de bienestar. Hablar es un remedio natural cuando expresamos nuestras necesidades, cuando somos asertivos, cuando ofrecemos ayuda, cuando queremos decir a alguien que lo escuchamos, cuando tenemos que tomar una decisión ...usted alguna vez paró para pensar en todo lo que es capaz de lograr con las palabras? ¡Piense en eso!
