Cuando hablamos en realidades, nos estamos refiriendo a aquellas que podemos percibir objetivamente a través de nuestros sentidos y que pueden depender o no de nuestra interpretación subjetiva. La diferencia entre el hecho real y nuestra interpretación puede determinar cómo nos sentimos. Por lo tanto, podemos sentir o pensar de formas distintas ante una determinada situación. Cada persona puede interpretar el mismo hecho de maneras diferentes. Lo que usted ve es en realidad un producto creado por su cerebro, que filtra infinitas informaciones, para que usted construya su visión sobre la situación.
La relación entre pensamiento y emoción
Los pensamientos y las emociones están relacionados de forma determinante
. Nos sentimos de una determinada forma, dependiendo de "cómo pensamos y en qué pensamos". La forma en que interpretamos y procesamos los hechos externos es responsable de los cambios fisiológicos y reacciones corporales que ocurren dentro de nosotros. Llamamos esas reacciones de emociones y podemos evaluarlas como agradables, desagradables o neutrales.Muchas veces no podemos distinguir correctamente una emoción de un pensamiento
y, a pesar de estar íntimamente ligados, son entidades diferentes, que vale la pena saber diferenciar si queremos tener el control sobre nuestro humor. La diferencia va más allá de su definición, porque afecta la manera en que la reconocemos y la tratamos. En la psicología existen muchos sesgos cognitivos o errores de pensamientos que son muy comunes, pero no percibimos que tenemos que lidiar con sus consecuencias.
Un error de pensamiento puede ser definido como una interpretación tendenciosa de lo que está realmente sucediendo . Es decir, estoy viendo mi construcción de realidad, basada en mis creencias y no en mis sentidos. Esta interpretación puede ser completamente diferente de lo que está sucediendo.Estos errores de pensamientos provocan emociones exacerbadas, comentarios fantasiosos o sin lógica. La persona que logra mirar al mundo con una visión más realista y mantiene consigo mismo un diálogo más racional tendrá emociones más saludables y funcionales.
CompartirLa nieve no es roja
En las terapias muchas personas dicen "entiendo lo que estás diciendo, pero para mí la realidad es lo que siento y cómo me siento".
Esto es un error de pensamiento: confundir sentimientos con realidades . Este argumento, por más surrealista o infantil que pueda parecer, puede provocar pensamientos equivocados y comportamientos disfuncionales.La verdad es que la realidad es lo que es, ni más ni menos
. Sin embargo, puedo crear una realidad subjetiva según me convenga, tanto para bien y para mal, y para pagar un precio muy alto por todo esto. Muchas veces, cuando me dicen la frase "si siento, es así", doy el ejemplo de la nieve roja o cualquier otro ejemplo que tenga que ver con algún color. ¡Pocas personas pueden argumentar sobre el color!Yo digo entonces que ese argumento usado es como si de repente dijera que "percibí que la nieve es roja y no blanca, porque siento que es así; entonces para mí la nieve es roja ". Evidentemente, quien oyera eso diría que estoy loca. Por lo tanto,
por más que siento que la nieve es roja, en realidad es blanca. Es lo que hacemos con los hechos que suceden en nuestra vida. A veces, tenemos una mirada ingenua o muy duro, pero es difícil ver la realidad como es realmente.
CompartirPodemos percibir claramente todo esto en la anorexia nerviosa; los pacientes sienten que tienen más peso de lo que realmente tienen. Ellos se sienten así y actúan de acuerdo con eso. Sin embargo, su altura y peso, comparados con la población en general, son normales.
Aproveche las realidades
Vivir significa pasar por momentos buenos y malos.
Percibe lo que está sucediendo en su vida y se obliga a mirar hacia fuera, "limpiando las lentes de sus gafas" para ver bien. De lo contrario, nos acostumbra a ver de forma tendenciosa y no vemos la diferencia entre lo que es y lo que pensamos ser. Para ello, necesitamos detectar estos errores de pensamiento que aparecen de vez en cuando. Hoy hablamos de confundir pensamientos con realidades, pero hay mucho más: personificar una situación, jugar de adivinar, generalizar un evento específico, etc.
Una vez que haya identificado estos errores, es necesario esforzarse para no distorsionar la realidad y percibir las cosas como son. Por ejemplo, cuando pienso que "es verdad que, a causa de mis experiencias y creencias acumuladas, estoy sintiendo que puedo caer en depresión si me rechaza", percibo que el hecho de mantener ese sentimiento no significa que debe ser siempre así. En realidad, lo que usted hace no tiene mucho que ver con lo que va a suceder conmigo después. Yo reajo según mis creencias interiores.
Gradualmente,a medida que vamos practicando, nos volvemos más realistas y nos adaptamos al mundo como el agua se adapta a los recipientes
. El resultado es una vida más tranquila, más plena y feliz, donde las realidades que percibes son mucho más fieles que antes, y no una vida llena de emociones patológicas que nos acaban bloqueando.