Incentivar la autonomía de los hijos

Pocos seres nacen tan dependientes como los humanos. Necesitamos un largo período de tiempo para ser capaces de caminar, alimentarnos y poder relacionarnos correctamente con todo lo que nos rodea.

Muchas veces escuchamos a los padres hablar del deseo de que sus hijos tengan independencia, pero por otro lado también vamos muchos padres superprotectores. Es fundamental, sin embargo, para un desarrollo adecuado, que los padres alienten la autonomía de sus hijos.

¿Qué entendemos por educar con autonomía?

Obviamente, cuando hablamos de la educación de los hijos, no podemos exigir el mismo grado de autonomía en todas las etapas de desarrollo, ya que la exigencia debe ser coherente con el momento cognitivo del niño .Veamos en líneas generales:

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Entre un año y medio y tres años ,se puede empezar a trabajar la autonomía, aunque restringida al hecho de poder caminar y moverse sin ayuda . En el lenguaje se debe exigir que empiece a pedir lo necesario (agua, pis.). De los tres a los cinco años,el lenguaje se desarrolla bastante, y partir de ahí

animaremos modelos de comportamiento autónomo para que el niño sea capaz de comunicar sus deseos y necesidades a las personas fuera de la familia. En otro nivel, usted puede comenzar a exigir que coma solo, duerma solo, vista ropa simple y adquiera modelos básicos de higiene. También es el momento de realizar pequeñas tareas como recoger sus juguetes. -Entre los cinco y los ocho años , la responsabilidad comienza a girar en aspectos más escolares y de relaciones sociales. Se consuela la autonomía lograda en los hábitos alimentarios, de sueño y de higiene y cuidado personal. Y se empieza a exigir de él la autonomía a la hora de jugar y establecer su tiempo libre, de hacer los deberes.

En casa, se pueden ampliar sus tareas domésticas básicas: arreglar su habitación, ayudar a colocar y sacar la mesa. De los ocho años hasta la adolescencia , el niño comienza a conocerse a sí mismo, sus habilidades y errores y empieza a anticipar consecuencias.Es hora de comenzar la educación con responsabilidad total para las tareas escolares, la planificación del ocio y tareas domésticas. Modelos para fomentar la autonomía de los hijos Aunque a veces es una tarea agotadora, es necesario encontrar modelos que permitan que el niño sea independiente y responsable.

Básicamente podemos sugerir los siguientes: -

Metas realistas

: como vimos, cada edad presenta una serie de tareas en las que se puede pedir autonomía, pero también cada niño tiene sus propias restricciones. -Perseverancia

: en cualquier tarea relacionada con la educación de los hijos, es necesario ser constante en lo que se está pidiendo que hagan. -Tareas como juego

: principalmente en las primeras edades, es necesario alentar en lugar de imponer, y el juego puede ser una de las mejores herramientas. -Crear rutinas

: especialmente para la independencia en los hábitos alimentarios, el sueño y la higiene, es necesario que la rutina esté presente para dar a su hijo seguridad en lo que debe hacer. -Reflexión sobre errores y aciertos

: según el niño crece, crece también la importancia de la comunicación. -Apoyo emocional

: ayudarles a superar sus miedos, recuperarse de sus frustraciones cuando algo no va bien y elogiarlos cuando lo hacen, es fundamental. En suma, la autonomía es un aspecto importante de la personalidad a ser incentivado para que el niño se desarrolle adecuadamente.