No me gustan las personas que predican la importancia de reconocer sus limitaciones, pero creen que son mejores que los demás. También no me gustan las personas que ostentan sus virtudes como si no hubiera otra cosa en el mundo.
Esa humildad falsa existe sólo en la apariencia y se mueve con superioridad por donde pasa. Provoca rechazo cuando logramos percibirla de manera consciente.
Si usted cree que es muy grande para las pequeñas cosas, tal vez sea muy pequeño para las grandes cosas.Compartir
Lo que es ser humilde
Ser humilde no es sentirse inferior a los demás, someterse o rendirse. Las personas humildes no son vulnerables simplemente porque conocen sus limitaciones, las aceptan y conviven armoniosamente. Sus virtudes son reconocidas por sus acciones y no por sus palabras.
Sin embargo, una persona arrogante no puede dormir por la noche porque sus sentimientos negativos entorpecen su descanso. La rabia y el resentimiento son una parte terrible de su vida. Admita sus errores
Ser humilde es no dejarse abatir y admitir nuestros errores
, ser inteligente para aprender de ellos y madurar lo suficiente para corregirlos. Sin embargo, la arrogancia nos hace tropezar, cerrar puertas y nos impide seguir adelante. "Lo que la humildad no puede exigir de mí es mi sumisión a la arrogancia y al destempes de quien me incumple. Lo que la humildad exige de mí cuando no puedo reaccionar a la altura de la afrenta, es enfrentarla con dignidad "-Paulo Freire-
CompartirLa falta de humildad es una característica de las personas que sólo piensan en sí mismas y se sienten superiores o mejores que los demás. Son envidiosas y no logra valorar las virtudes ajenas. La falta de humildad provoca un cierto rechazo social consciente o inconsciente;
el orgullo genera soledad.
Aunque de forma sutil, el egoísmo nos desagrada. Alguien que se jacta de forma exagerada es muy cansado y afronta la autoestima de los demás. Por eso, la evaluación que hacemos de nosotros mismos y el reconocimiento de las personas son muy gratificantes. Compartir
La humildad requiere un entrenamiento diario. Es muy fácil creer que somos mejores o más capaces que los demás para hacer algo, pensar que nuestros valores son mejores o más correctos.
Cuando la falsa humildad es un defecto leve, tardamos en darnos cuenta de que caímos en esa trampa.No podemos reconocer lo que existe en nosotros mismos, que de alguna manera juzgamos superior.
La humildad derrota la envidia y eleva la bondadEs fácil creer y admirar lo que es simple. Admiramos la amabilidad, la dignidad y las cualidades de una persona. La humildad nos hace justos y grandes, pues nos ayuda a comprender nuestros límites y percibir lo que todavía necesitamos aprender.
La práctica de la humildad es un ejercicio diario
, porque nos ayuda a escuchar y compartir silencios, a ser cercanos y sincero con las personas a nuestro alrededor. Así, nos transformamos en personas mejores, mientras conseguimos tocar a los demás con nuestros gestos y sonrisas. La humildad es la base de toda grandeza, porque para crecer hay que primero saber que somos pequeños. Ser humilde es ser sincero y eliminar de nuestra vida todo lo que es superficial, para garantizar nuestro bienestar emocional ...Compartir