La radio tocaba. Presionada por el trabajo atrasado, no pude escapar y olvidar el aburrimiento de los días. No me estoy quejando; el trabajo es bueno cuando nos gusta, y me gusta mucho el mío. Pero tengo que ser sincera, también me gusta mucho tener un tiempo sólo para mí, para relajarme, olvidar por un momento que debo cumplir mis tareas. Y ese pensamiento me hizo reflexionar sobre el olvido ...
Soy de aquellas que siempre dicen que no podemos remediar los errores del pasado, no podemos vivir presos a las desilusiones que quedaron atrás. El pasado es, para mí, pasado, entonces no tiene reparación.Pero algunos aspectos de nuestras vidas, no podemos, ni queremos olvidar. Por encima de todo, aquellos momentos que envuelven nuestros sentimientos, cuánto sufrimos, o cuánto fuimos felices, tienen un valor inestimable dentro de nuestros corazones.Aunque algunos recuerdos sean dolorosos, no estamos dispuestos a olvidarlos.
Yo, por lo menos, veo de esa manera. A través de estos recuerdos también podemos retomar momentos en que fuimos muy felices. La radio tocaba, y sus canciones románticas hablaban ... unas horas después, tuve la certeza de que estos amores frustrados, que un día fueron felices y terminados por diferentes motivos, todavía viven, pues alguien todavía los siente.
Ellos vuelven en recuerdos, porque los amores no se olvidan, sólo se superan. De alguna manera, encontramos a alguien nuevo, en los apasionados otra vez, insistimos en el amor. Después de todo, para ser feliz, hay que ser insistente. En algún lugar de nuestro corazón, en un espacio escondido de nuestra mente, parece aflorar un recuerdo que puede herirnos, pero que también puede hacernos sonreír. Como todos, también sufrí por un amor perdido. Me vi, como todos, con un amor que sabía que no iba a durar. Incluso con todas sus frustraciones, fueron amores de momentos felices ... de emociones encontradas, de amanecer en que parecíamos ser capaces de tocar el cielo .... De tardes frías de invierno, viendo por la ventana el cielo azul haciéndonos sentir la emoción que es amar y, quizás, ser amado. Quien sabe, en un día cualquiera, con los acordes de una vieja canción, ese recuerdo vuelva a demostrar que
usted puede incluso hablar que olvidó, que es bueno en superar el dolor, pero el recuerdo continúa allí, escondido en su mente, o sólo en aquella caja oscura donde guardamos nuestro pasado. No veo problema en derramar lágrimas por alguien que ya amé. Incluso si me ha herido. Algunos pueden decir que es tonto, pero el amor no es, por sí solo, una emoción suprema que nos permite hacer tonterías? No me interesa lo que otros piensan. Me gustaría sentir a alguien de mi pasado, que es sólo un recuerdo. No voy a sufrir, ni sumergirse en la desilusión.
Aunque en la radio, alguien parezca llorar, para mí no hay lágrimas de dolor. Siempre me gusta recordar momentos felices, la primera mirada, la primera caricia, una sonrisa ... porque, más que sufrir con lo que no sucedió, prefiero sonreír con el recuerdo de esa fabulosa sensación, que nos embriaga cuando estamos perdidamente enamorados ... y eso , no quiero olvidar jamás.