Este es el caso de las madres de Soacha, una ciudad muy cercana a Bogotá, capital de Colombia. Este lugar ha sido escenario de dificultades complejas, de todo tipo. Uno de los eventos más graves ocurridos en ese lugar fue el de los llamados "falsos positivos". Es un crimen que se configura cuando las fuerzas militares matan a civiles para hacerlos pasar por criminales y ganar beneficios por ello. En Soacha, se presentaron nueve casos confirmados de falsos positivos. Aunque el número total de víctimas de este crimen es de más de 3000, en Soacha ellos tuvieron un impacto mucho mayor. Esto porque las madres de las víctimas se organizaron, tomando como modelo las "Madres de la Plaza de Mayo" en Argentina, e iniciaron una lucha que aún no ha terminado.
"No dejes que nadie te diga lo que puedes o no puedes hacer, o lo que no puedes alcanzar. No permita eso. -Emma Watson-
Estas mujeres fueron bautizadas como las "Madres de Soacha" por la prensa. Ellas también se llaman "Madres de Octubre", porque fue este mes que el grupo comenzó a formarse ya dar sus primeros pasos.Su lucha llevó a una cruzada de denuncias por todo el mundo.Su trabajo fue reconocido con varios premios internacionales. Uno de los casos más paradigmáticos de falsos positivos en Soacha es el de Fair Leonardo Porras.
Él tenía 25 años y tenía una deficiencia cognitiva de más del 53%.
Él vivía en una casa humilde, como la mayoría de los habitantes de Soacha. Hacía boquillas en negocios simples, principalmente en la construcción. También era reconocido como alguien solidario que colaboraba con todos a cambio de algunas monedas.Un día, Fair nunca volvió a casa. Su familia comenzó una búsqueda frenética por hospitales, prisiones, hospicios e incluso en la morgue. Sin embargo, no encontraron su paradero. Meses después, su cadáver apareció en Ocaña, una ciudad a más de 600 kilómetros de distancia. Se les dijo que murió en combate, pues era, clandestinamente, el jefe de un comando armado de guerrilla.
Cuando sus familiares fueron a recoger el cuerpo, encontraron grandes inconsistencias. Por ejemplo, supuestamente su cuerpo habría sido encontrado empuñando un arma en la mano derecha. El joven no tenía movilidad en esa mano y había certificados que probaban eso. Además, obviamente, no era lógico que una persona con discapacidad cognitiva comandara un grupo armado.
Las madres de Soacha que se convirtieron en heroínas Fue Luz Marina Bernal, la madre de Fair Leonardo, quien dio inicio de forma determinada a la lucha para esclarecer los hechos. El presidente de Colombia en aquella época, Álvaro Uribe, insinuó que tanto ese joven como los otros ocho jóvenes de Soacha que fueron encontrados en las mismas circunstancias eran criminales. Es por eso que las madres de Soacha también establecieron el objetivo de reivindicar el buen nombre de sus hijos muertos. Gracias a la ayuda de funcionarios de la prisión de Soacha y de los agentes de policía, éstas lograron llevar a los responsables de la justicia. La señora Luz Marina descubrió que su hijo había sido "vendido" por menos de 100 dólares a algunos miembros del ejército. Ellos lo engañaron y así lo hicieron. Más tarde, lo asesinaron por la espalda y llamaron "muerte en combate". Ellos obtuvieron permisos y dinero por su "buen desempeño".
Madres de Soacha por Carlos Julio Martínez / SEMANA Con gran coraje, Luz Marina Bernal y las otras madres de Soacha enfrentaron varias amenazas de muerte.
Exigían que ellas retiraran sus quejas y pararan con los actos de presión para hacerse justicia. Después de más de cinco años, el asesinato de Fair Leonardo Porras fue declarado como "contra la humanidad". Esto significa que ofende a toda la humanidad. Los responsables materiales recibieron sentencias de más de 50 años de prisión. Sin embargo, los autores intelectuales todavía son desconocidos.
Las madres de Soacha presentaron su tragedia en una pieza de teatro y en varias manifestaciones artísticas. Ellas se llaman "Las Antígonas" y se han convertido en un ejemplo de coraje y resistencia.
Así como sus análogas en Argentina, ellas decidieron no callarse ante la arbitrariedad. Ellas probaron que la fuerza femenina es capaz de ganar incluso en los escenarios más difíciles y atroces.